Jirou miraba el escenario de aquel local mientras le daba un sorbo a su cerveza. Sus amigos se encontraban en su mismo estado. Tal vez no había sido tan mala idea ir.
—¿Quieres que vayamos a tocar algo todos juntos?—le sugirió Denki con una sonrisa.
—Es una buena idea—le apoyó Ashido dándole un trago a su bebida.
La pelimorada simplemente negó con la cabeza. Agradecía tener a sus amigos a su lado, pero no estaba de humor.
No tenía ganas de nada y mucho menos de cantar en público.
—¿Vas a estar así toda la vida por esa cola de caballo? Quita esa cara de amargada de una puta vez—resopló Bakugou con molestia.
El de ojos carmesí era su amigo, pero aquellos días no estaba de humor para sus tonterías.
—¿Qué? Solo digo la verdad, era una cobarde, no merecía la pena.
—Cállate—masculló, levantándose de la mesa.
—¿Qué me calle?—frunció el ceño.
Ella simplemente le ignoró yéndose de la mesa hasta la barra. La de pelo rosado la siguió.
No iba a dejarla sola.
—Kyouka, tal vez estás bebiendo demasiado—dijo con suavidad.
—¿Yo?
Sí, posiblemente.
La de baja estatura se apoyó en la barra, mientras un suspiro salía de sus labios.
Momo nunca la hubiera dejado beber tanto alcohol ni fumar un solo cigarrillo.
—Sabes que sí quieres hablar del tema puedes hacerlo, no seas tan reservada. Somos amigas ¿Recuerdas?
Mina le dedicó una sonrisa. Quería ayudarla de alguna manera.
—No puedes ayudarme, Mina. No estamos juntas y no hay vuelta atrás.
—¿Por qué no intentáis hablar de nuevo? Seguro que conseguís...
Jirou no dejó que acabara la frase, colocó su dedo índice en sus labios y negó con la cabeza.
—Le di muchas oportunidades y tiempo, y ella las desperdició. Ella se puso de lado de sus padres, prefirió ser una cobarde y no perder su estúpida herencia que a mí.
—¿Segura qué...?
—¡Segura, estoy segura!—masculló—Incluso me pidió perdón, pero no me importa. Dejemos el tema, estoy harta.
Mina suspiró. Era mejor dejarlo.
Al acabar salieron de aquel bar. Denki estaba preocupado, pensó que aquello lograría animar aunque fuera un poco a su amiga, pero parecía estar con la misma cara inexpresiva de siempre.
—¿Quieres que juguemos a algún videojuego?
—No me apetece.
—¿Tienes miedo de perder?
Denki arqueó una ceja con diversión. Kyouka le miró ofendida, dirigiendo sus pasos hacía la videoconsola.
—Una partida.
El chico sonrió satisfecho. Haría lo posible para que Kyouka se animara aunque fuera un poco.
Ambos estuvieron toda la noche jugando a aquel juego de peleas que tanto les gustaba y por primera vez en días vio a Kyouka sonreír.
¡Hola! Solo vengo a decir que el siguiente capítulo será importante y más largo que el resto ¡Gracias por leer!
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Ruptura | MomoJirou
RomanceEl proceso de una ruptura es doloroso, y no es una excepción para Momo y Kyouka. [AU sin quirks]