10

2.2K 253 134
                                    

Al día siguiente, Broflovski acomodaba su cabello mirándose frente al espejo tras haberse bañado y cambiado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al día siguiente, Broflovski acomodaba su cabello mirándose frente al espejo tras haberse bañado y cambiado.
  Se había echado (según su mamá) un perfume que olía demasiado bien.

Rápidamente Sheila cayó en cuenta de que su hijo finalmente intentaba impresionar a alguien y la curiosidad la estaba matando.
Porque esa chica estaría frente a la puerta en unos segundos para llevarla a ella y a su adorado hijo a Casa Bonita.

Kyle el día anterior, en el horario de salida, había reunido el valor suficiente de invitar a Cartman a Casa Bonita en un intento de hacerlo como si hubiera sido obligado, dándole a entender que realmente no quería invitarlo, porque si quisiera, hasta para Eric sería extraña la situación y probablemente no iría por pensar que era un plan malvado creado por el judío.

Pero si podía ir para molestar al pelirrojo, no se quejaría.. ¡y mucho menos si era Casa Bonita! ¿Qué más le importaba cuando era así? Nada.

La comida mexicana venció.

Por otro lado, Marsh se encargaba de invitar a Kenneth, para hacer las cosas menos sospechosas y así ayudar a Broflovski, porque si no fuera por eso, probablemente iría sólo con Cartman.

Ni Kenneth ni Eric se negaron.
Aunque al primero probablemente Kyle también debería pagarle como al segundo nombrado.

Lo demás transcurrió con éxito.

Los padres les permitieron a cada uno de sus hijos ir; no hablaron entre ellos, sabían lo responsables y cuidadosos que podían ser los Broflovski, además eran amigos hace años, todos se conocían y se tenían la confianza.

Por lo tanto, Sheila creyó que su hijo le veía cara de idiota, por no decirle con quién REALMENTE saldría en lugar de con sus amigos habituales.
Así que miraba a Kyle con cierta desaprobación pero a la vez con una emoción inexplicable.

Su hijo tristemente jamás había tenido la suerte de encontrar el amor.
O sí, pero no había sido correspondido.

Así que ahí estaba el chico preparado, con una sonrisa que durante los años jamás había visto en su hijo, parecía que explotaría de felicidad.

Definitivamente, era alguien especial, pensó su madre.

Como ella durante su primera cita con Gerald.
  Sabía que no podía entrometerse cuando era tan importante.

El timbre de la casa sonó y Kyle prácticamente corrió a la puerta ignorando los llamados de su madre.

- ¡Casa Bonita! - Fue lo primero que dijo Cartman mientras se movía exageradamente en un intento por bailar imaginando música mexicana de fondo, mientras que no tan disimuladamente Kyle le sonreía de una forma tan genuina, con un brillo tan único y las mejillas algo coloradas que Sheila creía que explotaría.

Al judío se le hacía muy lindo.

Kyle aclaró su garganta y miró a sus tres amigos.

- ¡Chicos, al fin! ¡Supongo que es hora de irnos! deben estar más que listos -

It Wasn't Cupid ᪥ [Kyman]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora