It Wasn't Cupid ᪥ [Kyman]

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"No puedo chupar el pene de Butters". Lo primero que pasó por su cabeza mientras que salía de sus dos últimas horas de clase, apretando con algo de fuerza la mochila que traía abrazada, tan distraído que ni siquiera se la había pasado por los brazos.

"Kenny es su novio, me patearía las bolas" Razonó, mientras le hacía muecas a la nada y se dirigía a la salida sin detenerse.

Cartman frunció el ceño, regresando a la lógica de su niñez tras pensar en la bufanda que Broflovski le había prestado cuando enfermó.

Esa vez, había podido dormir.

Discutía con él mismo sobre terminar con la supuesta maldición o aceptar que no tendría escapatoria.

Todo pensamiento se frenó cuando sintió menos peso sobre sí, dándose cuenta de que su amarilla y adorada mochila ya no estaba con él, sino que un par de guantes verdes la habían tomado con total descaro.

－ ¿Qué mierda haces? －

－ Te ayudo －

－ No lo necesito, devuélvemela －

－ No quiero － Cartman frunció el ceño y saltó intentando tomarla por su cuenta, Kyle la elevó sin problema.

－No me interesa, ¡devuélvemela, judío de mierda! －

－ Carajo culón, ¡deja de quejarte y permíteme ayudarte! Sé que no pediste mi ayuda, pero quiero arreglar las cosas －

－ No hay cosas que arreglar realmente － Cuando menos cuenta se daban, inclusive ya estaban fuera de la escuela entre otros chicos.

－ Sí las hay, estabas realmente molesto en el recreo, ¿cierto? －

－ Mi novia acababa de dejarme y estabas rompiendo mis bolas －

－ Sólo quería saber por qué le habías rogado.. －

－ Porque me gustaba, carajo. Era mi novia, ¿es tan difícil de entender? Quería seguir con ella. Era y es una pregunta estúpida, Kyle －

Eric tenía razón, pero escucharlo admitirlo golpeaba distinto, y dolía mucho más. Cierto, le gustaba alguien más, le gustaba una chica; le gustan las chicas.

¿Cómo mierda podría él cambiar eso?

No tenía suerte con las chicas, y parecía que con los chicos tampoco.

O por lo menos, no con Eric Cartman.

－ Tienes razón, lo siento － Último comentario que funcionó como pausa en la charla; una pequeña en la que ambos se quedaron viendo sus propios pies avanzar.

－ ..¿Ya vas a devolverme mi mochila? －

－ Aún no quiero －

－ No tiene nada de interesante － Mencionó el castaño, desviando la mirada con una mueca en cuanto recordó el nombre del judío en varias hojas de sus cuadernos.