Bang chan no dijo nada en todo el camino y yo no trate de iniciar una conversación, estaba realmente atrasado y no sabía que tipo de escándalo hiba a hacer mi tía, claramente me arrepentía de aceptar el aventon de chris, no quería que viera que clase de vida llevaba por nada del mundo.
Luego de algunas indicaciones más estuvimos en la puerta de aquella casa, mis hermanos esperaban afuera, cada uno con una mochila que obviamente llevaba lo necesario para los días que estarían en mi apartamento.
Cuando me vaje del auto, hambos corrieron a mi encuentro al notar mi presencia.
Pensé que el se iría, pero me hizo señas de que volviera al auto y así lo hice acompañado de mis hermanos
— Chicos el es bang chan y ellos son Lucas — señale al menor — y jay.
SE saludaron y chan volvió la vuelta al frente para evitar accidentes por lo que yo hice la pregunta que tenía desde que los vi afuera — por qué no me esperaron adentro?
— tía salió con samuel — lucas hizo una mueca y agregó — podemos ir a fantacilandia algún día?
— eso queda lejos, pero podemos ir a algún parque de diversiones aquí en Corea.
El pequeño Lucas alzó las manos de felicidad — genial.
— lix la tía fue a fantacilandia y dijo que no te molestaras en llevarnos durante toda la semana, dijo que nos fueras a dejar el proximo lunes.
Mi felicidad se noto demaciado y la de ellos era evidente, chan no dijo nada solo miraba a Lucas y jay por el espejo retrovisor de vez en cuando.
Le di algunas indicaciones y nos dejó en el edificio — gracias profesor chan.
— podrías dejar de decir profesor? ... Realmente es molesto, solo dime chan o chris.
— ok, gracias chris — echo a andar el auto y le perdimos de vista en poco tiempo así lleve a esos 2 diablitos a mi humilde morada.
Jugamos un poco y se quedaron dormidos, hice algunas tareas y cuando me hiba a acostar a dormir con los 2 pequeños me llegó un mensaje de chan.
Puedes salir un momento.
Salí de mi piso y corrí por las escaleras para ver el auto de chan fuera del edificio, tenía que estar bromeando venir en medio de la noche, sabiendo que tenía 2 pequeños niños a mi cuidado, camine hasta su auto y golpee el vidrio, el lo bajo y dijo — entra.
Hice caso omiso a sus palabras y una vez sentado en el asiento del copiloto echo a andar el auto — chan tengo a mis hermanos en casa, están solos.
— no iremos tal lejos y no tardarémos tanto.
Realmente estaba loco, estaciono el auto en medio de la nada, estaba oscuro y no había construcciones cerca, esto estaba cerca de mi casa ni me percaté.
Echo mi asiento hacia atrás y comenzó a besarme, de un momento el ya no estaba en su asiento, sino que estábamos hambos en el asiento del copiloto y lo peor es que era yo el de encima.
Por dios yo nunca había sido el del mando.
Comenzó a deshacerse de mis prendas de a poco y por fin estuvimos hambos Desnudos, no saben cuán desesperado estaba esto de ser el que manda te da adrenalina y me sentía mucho más caliente que cualquiera de las veces que estuve con alguien, su mienbro rozaba mi tracero y realmente quería meterlo de una vez en mi interior, aún seguía algo adolorido por la noche anterior, pero eso me importaba poco, no cuando el estaba abajo mío, me sentía más poderoso.
— felix, necesito estar dentro de ti.
Sus labios húmedos recorría mi piel, dios tengo que decir que en serio amaba la forma en la que tomaba mi tracero, y entonces me levanto el mismo y me dejo caer a lo largo de su miembro, lo sentí llenarme y gemi de placer, de un placer inhumano.
Me sostuve de sus hombros con hambas manos y di un pequeño brinco, solo para ver la reacción de chan, quien apretaba con fuera mi tracero, y entonces comencé a saltar sobre el, esto nos estaba gustando a hambos lo podía notar en sus expresiones.
De vez en cuando besaba mi pecho o le daba una delicada mordida a mis botones, me sentía en las nubes, parecía que chan me veía como un postre, tal vez el mejor que hubiera provado.
Mi mente no podía estar en otro lugar más que aquí, en donde chan me poseía, como me sostenía con sus grandes manos, sus besos humedos en mi cuerpo y dios mío sus expresiones.
Sus fuertes manos me ayudaban con las estocadas, y por fin lo sentí, mi cuerpo estaba completamente listo, me corrí y parte de mi semen llegó al pecho de chan, pero no me deje de mover, chan aún no estaba listo, aun no llegaba al climax, pero no tardó en hacerlo y dejo caer su cabeza en mi pecho.
— eso fue rápido — sonrió y note una de sus margaritas, juro que no pude contenerme y le bese, el correspondió mi beso y estuvimos asi por un rato, pero entonces todo el calor se fue y recordé que mis hermanos estaban solos en casa.
Me levante como pude, le dejé irse al otro asiento y comenzamos a vestirnos, de vez en cuando miraba a chan.
Nadie dijo nada cuando estuvimos listos, era de noche, el parecía cansado, me dejó en mi casa y entonces pregunte — quieres pasar por un café?
Si se suena cliché, pero no se me vino otra cosa a la mente, quería agradecerle por su amabilidad de esta mañana.
El asintió, entonces subimos, gracias a dios mi piso no estaba en una planta tan alta y podríamos escuchar si algo le pasaba al auto.
Una vez más me arrepentí por invitarlo, jugando y haciendo estupideces habíamos hecho un desastre de mi departamento, entre un poco apresurado para arreglar un poco el desastre, el pudo notarlo y sonrio.
Eran más de las 2 ya y el había dicho que no tardaríamos mucho, gracias a dios era domingo y nadie tenía que ir a trabajar, digo solo trabajo los sábados y los domingos si pagan extra.
Hervi un poco de agua e hice el café ofrecido, comenzamos una amena charla, entre risas hablamos de todo y nada, el y yo teníamos muchas cosas en común, como nuestro gustos musicales y otras cosas.
Bang chan era muy diferente a lo que pensé.
La luz del día se anunció por la ventana y el se dispuso a marcharse, por alguna extraña razón quise detenerlo, pero no lo hice.
Le vi perderse una vez más con su auto.
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profesor bang? (Chanlix)
FanfictionDe no ser por esa conversación que logre escuchar entre 2 de los profesores más reconocidos de mi facultad, créanme que no lo habría hecho, ni siquiera lo habría pensado, a pesar de mi necesidad no lo habría hecho por nada del mundo. Pero tengo que...