«Dedicado a: @smileforlarry, @louiskinny, @MauricioCamayo, @Rosepolitan»
Me alegra poder haberme mudado con Harry.
Si bien todavía tenemos momentos difíciles, ya me estoy acostumbrando a la convivencia con él. Mis días junto a él son muy divertidos. Él siempre se le pasa bromeando, y toqueteándome. Lo cuál ya lo deje ser, porque mi cuerpo se acostumbró a las grandes manos de Harry por mi cuerpo. Todavía sentía esos estremecimientos cuando su nariz rozaba mi cuello, olisqueándolo, pero adapto, poco a poco. Pero lo único que nunca podré superar, son los latidos todavía mucho más rápidos cuando estoy con él. Es imposible que eso se vaya volando y desaparezca, porque siempre los puedo sentir dentro mío, atormentandome.
Sin embargo, el sólo hecho de poder estar al lado de la persona que amo me hace muy feliz.
Muy feliz, pero...
El silencio en la sala de estar agonizaba, mientras yo entraba por la puerta. Ni un sonido, ni un movimiento.
...pero, Harry está cada vez más ocupado con la universidad. Y muchas veces debe quedarse investigando en el laboratorio por días enteros. No podía quejarme, porque era su deber. Además de que era su último año y sabía que estaría mucho más ocupado con los trabajos. Pero lo extrañaba, y extrañaba sentir la presencia de su cuerpo cerca mío.
El teléfono de la casa sonó, despertándome de mis pensamientos. Lo tomé y lo apoyé contra mi oreja.
—Sí, con la familia Tomlin- perdón, Styles.— Nunca me podré acostumbrar a ello.
Escuché la risa ronca y fuerte del otro lado de la línea y supe al instante quién era.— Veo que aún no te acostumbras a decir mi apellido cuando coges el teléfono.
—N-no, lo siento.
—Pareces una esposa recién casada, qué lindo.
—¡Harry!—mordí mi labio.
Escuché un suspiro cansado —Bueno, te llamaba para decirte que creo que no podré regresar a casa hoy. Parece que tendré que quedarme por varios días, ¿podrías traerme algo de ropa, por favor?—asentí y me sentí un idiota cuando me fijé que él no me podía ver.
—Entiendo, está bien.—una sensación horrible me recorrió el cuerpo.
—Muchas gracias, hasta luego.
"Tendré que quedarme por varios días" Oh, maldición.
¿Qué se supone que voy a hacer? La depresión empezó a entrar en mi ser.
Bueno, al menos podré verlo cuando le lleve la ropa.
Pero, a decir verdad, me siento muy solo.
~
Los largos pasillos de la Universidad de Londres me hacían marearme. Dios, sí que era inmensa. Podría perderme en cualquier momento por allí, pero por suerte para mí, tenía un mapa. Giré por el pasillo y encontré a Harry hablando con Missy. Llevaba puesto esa bata de laboratorio que me encantaba tanto. Parecía un científico. Pero uno muy sexy.
—¡Harry!— acomodé el bolso en mi mano y apresuré los pasos cuando él giró la cabeza. Tenía unas notables ojeras debajo de sus ojos, pero aún así, me sonrió, cansado. Tenía puesto sus anteojos anticuados, con marco negro. Cuando llegué a su lado, le tendí el bolso y él lo tomó, sonriente
—Muchas gracias, lamento haberte hecho venir hasta aquí —plantó un beso en mi mejilla.
—Está bien, estoy contento porque al menos pude verte un rato. —sonreí, sonrojado.
Sentí las grandes manos de Harry atraérme hacia él. Mi nariz tocó su pecho arriba de su ropa, dejándome sentir ese aroma que tanto amaba de él. Suspiré y rodeé mis manos por su cintura. Sus manos levantaron mi mandíbula y acercó sus labios a los míos, atrapándolos. Vi como estudiantes salían de la puerta de clase y miraban curiosos hacia nuestro lado.
—Harry, n-nos están vi-endo. —dije entrecortadamente. Harry dejaba pequeños besos húmedos sobre mis labios.
—Está bien, está bien. —dijo y tomó mi labio inferior entre sus dientes, apretándome más hacia su cuerpo.
—¡No está nada bien! ¡No se pongan melosos frente a mí! —dijo Missy, golpeando bruscamente la espalda de Harry con una libreta. Traté de separame de él, pero sus manos sostenían mi cintura con fuerza.
—¿Podrías dejar de molestarnos? —bromeó Harry, mirando a Missy seriamente. La chica se encogió de hombros y bufó.
—No lo hago con mala intención. Te dije que el profesor te estaba mirando. —suspiró.
Missy me miró cariñosamente, tocando lo que más podía de mi hombro porque Harry estaba casi arriba de mi cuerpo, aplastándome. Le sonreí.
—¡Cuánto tiempo, Louis! Lamento interrumpir. —sonrió y negué con la cabeza.
—Hola, no hay problema.
—Vamos Harry. Mazzei nos está esperando. —tomó su hombro y tiró de él. Suspiró cuando se dio cuenta que no podía mover a Harry nunca, porque él era mucho más fuerte que ella. Que todos, en realidad.
—Bien, bien, ya voy. Adiós, Louis. Te llamaré luego. —besó mi mejilla y agitó la mano, despidiéndose. Vi cómo su figura alta desparecía por la puerta y suspiré.
—Veo que están con mucho trabajo.— los estudiantes pasaban corriendo con muchas planillas y hojas, dejándome una mirada rápida antes de aumentar la velocidad.
—Es cierto, no sólo tenemos que entregar la tesis, sino que también tenemos el examen final, antes de graduarnos. —asentí y jugué con mis manos.
—Vaya, no sabía que Harry, era así... —yo no podría hacer todo eso sin que mi cabeza explote en algún momento. Debía ser duro.
—¿Hmm? Sí, tiene las mejores califícaciones y es el preferido de todos los profesores. —arregló su colita de pelo y suspiró— Gracias a que él está en nuestro grupo podemos presentar nuestro informe, aunque nos falte una persona para llegar al cupo mínimo. Por su capacidad, tranquilamente podría haber pasado el grado sin presentar la tesis o terminar la carrera en el exterior. Qué necio, no sé por qué habrá rechazado la oferta.
Cuando otras personas me cuentan sobre él, realmente me doy cuenta de que él y yo, somos de mundos totalmente diferentes. Que es una persona a quien no me llegaría una vida entera para alcanzarlo. Supongo que siempre será así, y tendré que acostumbrarme a sentirme un mediocre al lado de él, frente a las personas. Pero siento esa sensación vacía en mi interior, diciéndome que no estaré tan feliz con ello.
Lo siento tan lejos.
~
Harry tiene su propio destino, el cuál, él mismo escogió y se está encaminando. Pero yo... sólo sería un estorbo.
Siempre pensé que sería suficiente con quedarme a su lado, pero eso significaría que estaría dependiendo de él. Aunque nunca pueda llegarle siquiera a los talones, quisiera poder sostenerlo de algún modo. Quisiera que él pueda decir: "Qué bueno que estás conmigo, Louis" que se sienta orgulloso de mí, de alguna forma.
Pero eso lo veo muy lejos de mi alcance.
Suspiré y dejé el café en la mesa, el diario estaba allí también, y si tenía que esperar a que Harry viniera, debía divertirme con algo. Lo tomé y fijé mi vista en un cartel de gran tamaño impreso en él. Mi mente comenzó a trabajar, diciéndome que sería una buena idea. Podría seguir los pasos de Harry. Aunque sea, podría intentarlo.
¿Qué tan mal podría salir?
~
—¿Quieres trabajar como profesor particular?
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Math teacher » l.s au
FanfictionLouis no será bueno para las matemáticas, pero sí lo es para otras cosas. Adaptación del manga "Katekyo."