˜"*°• 𝓢ó𝓵𝓸 𝓾𝓷𝓪 𝓶𝓸𝓻𝓭𝓲𝓭𝓪.. 𝓐𝓤 •°*"˜ //Shadonic\\

Capítulo 4.

Ya estaban todos del otro lado de la muralla.

Caminaron con sumo cuidado, buscando cualquier indicio de algún 'fantasma' por el lugar. El azabache decidió ir detrás de su grupo.

—Yo no veo nada —soltó la oji-jade.

—¿Seguro que fue aquí, Shadow? —preguntó el oji-reptil.

—¿Buscan algo? —preguntó una voz que solo uno de aquel grupo conocía, sobresaltando al resto, haciéndolos gritar y apuntarle con sus linternas. 

El cobalto se talló los ojos ante la repentina luz que el grupito le había puesto encima.

—Y-yo no le veo nada de fantasma.. —susurró la albina, mirando con bastante impresión al chico que se les 'había aparecido'.

—Mejor apaguen las linternas, les dije que no trajeran eso —se quejó el de orbes rubíes, acercándose a su, ahora, amigo para ayudarle—. ¿Estás bien?

—Sí, sí, sólo me deslumbró un poco —sonrió leve el oji-esmeralda, dirigiendo su vista ahora a los chicos que lo miraban impresionados— ¡Ustedes deben ser los amigos de Shadow! Por supuesto que sí, sino no estarían juntos, qué tonterías dices.

El azulado inmediatamente se acercó a ellos y jugueteó con el cabello de Amy, las colas de Tails, las orejas de Rouge, etc.

—Ehm..

—¡Lo siento! Es que no acostumbro ver mucha gente aquí.. —rió nerviosamente el cobalto, alejándose ligeramente del grupo para no incomodarlos. Más.

—¿Tú, eres..? —empezó la albina, invitando al otro a hablar.

—¡Oh, claro! Perdonen mis malas formas. Yo soy amigo de Shadow, pero ustedes pueden decirme Blue. —se presentó el cobalto. O algo así.

—Y tú.. ¿Vives por aquí? —preguntó esta vez el de vetas turquesas.

—Algo así.

—¿Vienes seguido a la cascada? —preguntó el zorrito, con el cual el azulado había simpatizado bastante.

—Sí, la mayor parte del tiempo.

—¡Oh, alma perdida, dinos cómo podemos ayudarte! —habló esta vez el equidna, alzando los brazos como si adorara al oji-esmeralda.

—¿Perdón? —el azulado lo miró ciertamente extraño, haciendo que la de cabellos rosas le diera un codazo al rojizo.

—Nada, nada, no le hagas caso —rió nerviosamente ella.

—¿Está bien? —respondió dudoso el cobalto— ¡Bueno! Díganme, ¿Qué los trae por aquí?

—Tú —respondió el de orbes rubíes, mirando directamente al de menor estatura.

—¿Yo? —preguntó de nuevo, señalándose a él mismo— ¿Qué podría tener yo que les interese cuando ustedes tienen esas.. esas.. ¿Me la prestas? —pidió al zorrito, que sujetaba su linterna en manos.

El de ojos cielo le cedió la linterna al contrario, dejando que este la mirara por todos lados, como si nunca hubiera visto una. 

Presionó el botón para encenderla por accidente, alumbrando se la cara. Soltó la linterna y rápidamente se escondió detrás del de vetas carmín.

Sí, el azabache se había vuelto su 'lugar seguro' para ese tipo de cosas de aquel mundo moderno que él no conocía. El mayor había intentado mostrarle algunas cosas de vez en cuando, pero no las entendía y prefería seguir sin hacerlo.

Claro que en ocasiones el azabache le insistía, orillándolo a ceder a sus propuestas y, la mayor parte del tiempo, llevándose un buen susto.

Se asomó por sobre el hombro del de vetas carmín, mirando aquel aparato que lo había dejado temporalmente ciego. Parpadeó repetidas veces a causa de que aún veía pequeños puntos de luz, incluso cuando cerraba los ojos.

Entonces, pensó en algo que le alarmó un poco y se revisó a sí mismo.

—¿Cómo capturaron el sol ahí? —preguntó una vez se aseguró no se había quemado.

—¿Sol? Es sólo un foco —respondió el rojizo.

—¿Foco? ¿Otra de esas cosas raras que me has mostrado? —preguntó el oji-esmeralda, esta vez mirando al de vetas rojizas.

—Te lo dije una o dos veces, pero insistes en que prefieres no saberlo.

—¡Casi me quedo ciego! —reclamó el azulado, importándole poco que los amigos del azabache vieran su berrinche— Además, te apuesto a que si me mostrarás todo lo que quieres, ya me haría muerto, ¿O quieres que te recuerde lo que pasó con el, el, el..? Esa cosa rara con la que, que le jalabas como así y hacía un ruido raro, algo así como 'Brrrrr'.

—¿Una motosierra? —preguntó Tails, viendo las gesticulaciones que el cobalto hacía.

—¡Eso! El punto es que casi muero —se cruzó de brazos, viendo por el rabillo del ojo al azabache.

—No seas exagerado, ni siquiera te pasó nada.

—¡Pero podría haber ocurrido!

La discusión sobre la motosierra se prolongó un poco, ganándole tiempo a los chicos para examinar tanto el comportamiento del cobalto como tratar de entender de qué época venía.

⇀ 00:09 ━━━━⬤─────── 03:40 (⇆ ◁ || ▷ ↺)

—Fue un gusto conocerlos pero debo irme o mi hermano se enfadará —se excusó el azulado, levantándose del suelo y sacudiendo un poco la tierra que se había adherido a él

—¿Te volveremos a ver? —preguntó la murciélago mientras imitaba al menor en estatura, seguida del resto.

—Seguro que sí, ¡Hasta luego! —se despidió el oji-esmeralda para después perderse en el bosque, desapareciendo de la vista del grupo.

⇀ 00:09 ━━━━⬤─────── 03:40 (⇆ ◁ || ▷ ↺)

¡Hey! 

Bueno, sólo venía a saludarlos rápidamente y a indicar que a partir de hoy empiezan las actualizaciones de nuevo.

Yyy, ah sí, cambié el "dialogo" de esta historia debido a que me di cuenta que era más fácil y cómodo de leer así que le coloqué guiones.

Bueno, sin más, ¡No se olviden de comentar y darle a la estrellita!

Lxs quiero!