Regeln. (Marco Reus)

CAPÍTULO 11

|Chanel|

Ya hace un mes que no tengo ningún contacto con Marco y eso es algo que me alegra. Pero internamente esta todo mal.

Lo extraño, pero supongo que él a mí no. Y ahora eso... Es algo que me molesta, y mucho.

En cuanto a mis amistades, está todo más que bien, excepto por Erik. Últimamente está actuando muy raro y cada vez que estamos juntos trata de decirme algo que no logra pronunciar.

Los partidos de liga del Borussia no están yendo muy bien. La semana que viene tendrán que ganar el partido para poder clasificar a la UEFA Champions League, y Klopp tiene mucha presión encima por los aficionados y dirigentes del club.

Yo continúo con mi vida normal, solamente que mañana viajo con Emily hasta Múnich a visitar a mi familia que vive allí. También, aprovecho para ver a mi casi hermano, Mario.

Ahora mismo me encuentro trabajando, sacando fotos en un estudio. Hoy me tocaba sacarles fotos a los jugadores, uno por uno, para presentar el nuevo plantel 2015.

Estaba fotografiando a Mats, mientras hablaba, me llamó la atención con un tema en particular.

―Chanel... ¿Qué pensás sobre Marco?―preguntó, curioso.

― Qué pienso sobre él... ¿En qué sentido?―contesté, con mi ceño fruncido.

―Sobre su forma de ser, ¿Te simpatiza?―incitó el defensor.

―Creo que ya sé a dónde va todo esto. Es decir, ¿Si Marco me gusta?

―Bueno, sí. Es por eso.

―Confío en vos lo suficiente como para contarte esto, y no voy a mentirte Mats. Marco me gusta, y mucho―confesé―. Sólo sé que saldré lastimada. Él me quiere para entretenerse un rato, y ambos lo sabemos.

―No tiene sentido. No sabés si él te quiere o no. Tendrías que intentar algo―me contestó. Me quedé atónita, Mats casi había confesado que Marco me quería, pero no estoy lo suficientemente segura.

― ¿Y si arriesgo y pierdo?―incité.

― ¿Y si arriesgas y ganas?―contraatacó mi pregunta.

―No lo sé, Mats. Es todo muy complicado―contesté.

Terminé con su sesión de fotos, y luego pasaron más jugadores. Lamentablemente algunos me hablaron bastante y otros no tanto, pero me implicaban a responderles y mi timidez se hacía presente allí.

Ahora mismo, Erik entraba por la puerta, dejó su abrigo en una de las mesas del estudio y me miró. Estaba totalmente colorado y se notaba algo nervioso, sin embargo me dedicó una sonrisa tímida de las típicas de él. Se sentó en la silla donde se sacarían las fotos y comenzó a jugar con los dedos de sus manos.

Le hago una seña con la mirada para que pueda comenzar con mi trabajo. Al cabo de unos minutos, logro notar cómo ya no mira a la cámara, sino a mis ojos. Abre mínimamente su boca para pronunciar un par de palabras.

―Chanel, ¿Te gustaría salir conmigo mañana a la noche?―dejó de jugar con sus dedos, y dirigió una de sus manos a su nuca. Estaba nervioso.

―Claro, no hay problema Erik―contesté de manera amigable, con una de mis mejores sonrisas.

―No lo entendés... Yo no quiero salir como amigos, ya sabés―yo sólo logre esbozar una pequeña "o" con mi boca, sin respuesta alguna. Sin dudas, no esperaba esto de Erik.

―Si no querés, está bien. Sé que puede que todavía te guste Marco―era increíble la sinceridad de este muchacho. Por eso lo quiero, pero como amigo.