No Trust Without Us

El Sonido De Algo Quebrándose pt.3

Espera encontrar a Jeongguk llorando en algún lugar, aterrorizado cuando no puede localizarlo inmediatamente. Se sorprende cuando ve el sombrero de conejo rosa sobre la parte superior de la multitud. Está junto a la entrada, con los brazos cruzados, cara recta. Con alivio, Taehyung corre hacia su lado, ya gritando su nombre. En el momento en que lo ve, Jeongguk camina a través de las puertas, una mano saludando para que Taehyung la siga.

—Estoy bien.— dice antes de que Taehyung pueda recuperar el aliento. —En serio, estoy completamente bien. Estoy enojado, obvio, pero no necesitas entrar en pánico, ¿de acuerdo? Puedo cuidarme a mí mismo. Vamos.—

—Jeongguk, creo...—

Se detiene, girando para enfrentarse a él. Taehyung lo observa, temeroso de lo apagados que se han vuelto sus ojos después de que brillaran todo el día, pero su voz está tranquila cuando insiste: —Sólo quiero irme a casa ahora. ¿Vamos, Tae, por favor?—

No dice nada en el viaje de regreso, ni cuando entran en el dormitorio. Taehyung solo puede ver cómo baraja en la cocina, agarra una bolsa entera de apio de la nevera y luego desaparece sin palabras en su habitación.

Taehyung se permite pensar brevemente en Jimin, desea  que estuviera aquí porque por mucho que haga que su intestino se tuerza, por mucho que tenga que morder el aguijón de lágrimas ante el pensamiento, simplemente no sabe cómo consolar a Jeongguk de la forma en que lo hace Jimin. Jimin lo conoce desde hace años. Jimin sabe lo que necesita y Taehyung no está seguro de que pueda ser eso. Jeongguk siempre ha corrido a su hyung mayor durante estos tiempos: cuando se mudó por primera vez, cuando él y Taehyung pelearon. Nunca ha venido a Taehyung.

Aún así, no puede estae aquí y no hacer nada, así que después de que se ha cambiado en su pijama y haya devorado un tazón de cereal para la cena, llama suavemente a la puerta.

—¿Guk?—Llama, sin respuesta.

Él abre la puerta.

Jeongguk está sentado en su cama, teléfono en una mano, palo de apio en la otra. Solo está tomando otro bocado cuando Taehyung entra en la habitación. El crujido de la verdura debajo de sus dientes es el único sonido, su atención en el dispositivo en sus manos. Taehyung lentamente camina hacia él y cuando se encuentra sin resistencia, se sienta a su lado.

—¿Guk?— Lo intenta de nuevo. Jeongguk no responde. Taehyung mira hacia arriba y, —Oh, Gukkie.—

Sus hombros tiemblan mientras Taehyung tira suavemente del teléfono de sus manos, la pantalla oscura. Tal vez no sea Jimin y tal vez no sea lo que Jeongguk necesita, pero él es el que está aquí ahora. Con esto en mente, envuelve sus brazos alrededor de su novio. La forma en que se derrite en su abrazo le dice que lo tiene bien hasta ahora.

Jeongguk llora durante mucho tiempo. Lágrimas silenciosas que Taehyung puede sentir en su brazo desnudo, olfateos pesados son el único sonido durante algún tiempo. No dice nada, solo lo sostiene fuerte y no se mueve, incluso cuando el temblor se detiene y las lágrimas se ralentizan. En silencio, se quita el sombrero de conejo y el gorro de una sola vez, viendo cómo las orejas de Jeongguk se liberan. Frota a lo largo de la base de ellos, sabiendo que deben doler después de estar confinadas durante tanto tiempo. Jeongguk no ronronea, una señal preocupante, pero se ve significativamente más relajado.

Veinte minutos más tarde los encuentra acostados uno al lado del otro, de lado. Jeongguk no lo mira a los ojos, sino que mira la almohada debajo de la cabeza de Taehyung, mirando la que está debajo de la suya.

—No puedo creer que haya dicho todo eso.—susurra eventualmente. —Fui horrible.—

Taehyung se levanta y acaricia la delicada piel debajo de sus ojos con la punta de sus dedos, cepillando la humedad de las huellas de lágrimas.