𝐄𝐑𝐑𝐎𝐑 || 𝐒𝐀𝐓𝐙𝐔

DIECISÉIS

Sana llegó de regreso a su casa, haciendo que en cuanto abriese la puerta el aroma de Tzuyu la golpeara con fuerza. Dejó las bolsas en la cocina y frunció el ceño, nunca había sentido el aroma de Tzuyu de ese modo. Mordió su labio inferior y se acercó nuevamente a la puerta de la habitación de la alfa, apretó sus ojos.  Golpeó la puerta. 

— Tzu, lamento molestar, pero iré donde Mina hasta que tu celo acabe, llama a Mina cuando yo pueda regresar – sonrió para sí misma. 

— Bien, envíale saludos – sonrió feliz al oír la voz de la menor. 

— Le diré – se alejó de la puerta y salió de su casa nuevamente, esta vez rumbo donde la menor le había dicho que vivía. 

A Sana le emocionaba conocer a la omega de su amiga, tontamente consideraba actualmente a Mina como su amiga y no sólo como una compañera de trabajo. Eso emocionaba a Mina de igual modo, no sabía que había hecho Tzuyu con Sana, pero le agradaba. Tocó el timbre y una emocionada y sonriente Mina se acercó a ella. 

— Pensé que no vendrías, hasta que me llegó un mensaje de Tzuyu diciendo que le avise cuando llegues – Sana rió y negó con su cabeza. 

— Te envió saludos – Mina hizo pasar a Sana, para luego dirigirla a la cocina y allí ver a una chica sentada. 

— Sana, ella es Chaeyoung, mi omega – sonrió, la omega se levantó de su lugar y le sonrió a Sana – Bebé, ella es Sana – la omega se sonrojó y miró a Sana. 

— Soy su amiga, Sana – sonrió hacia Chaeyoung.

La tarde había pasado divertida para Sana, la omega de Mina era demasiado adorable, perfecta para Mina según Sana. La pareja se notaba muy enamorada y eso emocionaba a Sana, le gustaba ver a Mina feliz. Después de todo ella también había crecido en un lugar horrible y merecía su felicidad. Eran alrededor de las ocho de la tarde cuando Mina acompañó a Sana hasta su departamento, a pesar de que Sana se negará diciendo que no se molestara fue Chaeyoung quien insistió a su alfa para que fuera con Sana. 

— Me agrada demasiado Chaeyoung – sana miró sonreír a Mina. 

— Eso me emociona, no sabía que éramos amigas Sana – la omega rió. 

— Lo somos, trabajamos mucho tiempo juntas y me soportaste y aconsejaste a pesar de ser un desastre contigo también – Mina abrazó por sobre los hombros de la mayor. 

— Me gusta que al menos hayas oído algo de todo lo que te dije – Sana soltó aire.

— Y tenías razón en la mayoría de esas cosas, por eso te odio un poquito, pero me agrada Chae así que no te odiaré – la menor se carcajeó. 

En cuanto Sana entró a su casa sintió el aroma de Tzuyu, pero era como normalmente lo hacía, sonrió al ver a la alfa acercarse a la puerta principal para luego abrazarla. 

— Lamento no haber estado contigo hoy – Sana negó. 

— Está bien, lo entiendo. – Tzuyu le sonrió – Minari me presentó a su pareja, es una bonita omega.

— En algún momento yo conoceré a su pareja, maldito celo – Sana se carcajeó. 

— Te quejas de un celo de casi un día, yo soporto uno de cuatro – Tzuyu asintió. 

— Eso es cierto, pero tú te vez tierna, yo debo encerrarme – Sana entrecerró sus ojos y asintió.

— ¿Tienes hambre? Chaeyoung me dio un par de recetas que quiero hacer – tomó la mano de la alfa y la dirigió a la cocina. La alfa sonrió al ver feliz a la mayor.