Contigo. (FINALIZADA)

Cuando el León es adicto al vinagre.

Aquella floristería la cual había empezado como un proyecto de ensueño para Xiao Zhan y la cual levanto con tanto esfuerzo y empeño hoye se convertía en un hecho,  cinco años después era un negocio prospero y maravilloso, las personas asistían a aquel lugar para adquirir hermosos arreglos de flores pero sobre todo a empaparse con la calidez de su propietario.

Gracias al auge de clientela y al esfuerzo de Zhan aquel lugar no solo creció en fama sino que también en tamaño expandiéndose unos metros mas luego de que su propietario decidiera aprovechar la venta de un lote vacío que se encontraba justo al lado de la floristería, ahora en aquel lugar no solo se podían encontrar flores, desde tarjetas con bellos mensajes, muñecos de peluche e incluso postres y pequeñas tartas, todo esto con el fin de que las personas pudieran expresar sus sentimientos de una forma tierna y dulce.

- Muchas gracias por la compra.- Zhan despedía a un cliente.

- Jefe debemos abrir un nuevo lote de conejos de peluche, también de los leones, han sido los mas vendidos en estos días.- Un cliente hablaba desde el almacén.

- No entiendo porque a las personas les gustan tantos los conejos y los leones.- Zhan negaba mientras reía.

- Buenas tardes.- Un joven ingreso a la tienda.

- Bienvenido.- Zhan sonrió.- ¿En que le podemos ayudar?

- ¡Oh!..- El chico apunto a Zhan.- ¡Eres tu!

- ¿Yo?...- Zhan sonrió con sorpresa al ver bien de quien se trataba.- ¿Qué sorpresa?

- ¿Entonces me recuerdas?.- Se acerco a Zhan.

- ¿Cómo no lo voy a hacer?.- Zhan tendió su mano.- Ángelo, eres el hermano de Pietro.

- No creí que me recordarías.- Estrecho la mano de Zhan.

- Fuiste de gran ayuda aquella vez...

Angelo Polizzi hermano mayor de Pietro por un año había sido aquel joven de actitud intimidante el cual le sirvió no solo de ayuda a Zhan sino también de protección aquella vez que decidió enfrentar a Darren Wang y a Yuri por su engaño, habían pasado años de aquel suceso aun así Zhan no había olvidado el rostro de la persona que lo ayudo.

Ángelo había llegado a China por negocios familiares , por petición de su cuñado Hua, Ángelo debía encontrar un gran obsequio para la señora Chen quien se encontraba pasando sus vacaciones en casa de sus amigos los Wang y aquel día también festejaba su cumpleaños, fue así como el joven Italiano sin saberlo fue a parar a la tienda de Zhan, cruzando sus caminos nuevamente.

- ¿Esta es tu tienda?.- Ángelo veía todo a su alrededor.

- Así es.- Zhan sonreía.

- Es grandiosa, Hua me lo había mencionado antes pero no imagine que terminaría viniendo a tu tienda.

- ¿Qué te trae por aquí?

- Vengo por la señora Chen y Hua me pidió que le comprara un obsequio pues es su cumpleaños.

- ¿La tía esta de cumpleaños?

- Así es.

- Entonces si me permites me gustaría elegir algo especial para ella.

- Adelante.- Ángelo asintió.

- Vamos.- Zhan tiro con suavidad de su muñeca.

Zhan y Ángelo pasaban un agradable rato entre platicas en aquel momento, si bien había decidido dejar su pasado atrás de alguna manera le causaba cierto agrado volver a encontrar a personas las cuales le tendieron la mano en aquel momento sin interés alguno.