Another | yoonseok

nightmare

Aquel bosque siempre estaba solo, nunca había alguien más que él, los animales y los insectos deambulando alrededor de todo el bosque. Estar solo le traía paz, le gustaba estarlo, así podía pensar sin sentirse presionado.

Se removió levemente al sentir como las hojas acariciaban sus alas, sintiendo cosquillas y dolor cuando una rama las rasguñaba. No tuvo otra opción más que buscar un sitio en dónde no haya tantos árboles.

Sus pies descalzos llegaron a sangrar en cada paso que daba, pero no le dió importancia.

Por fin pudo encontrar un lugar no tan lleno de árboles que pudiesen dañarlo y dañar sus alas. Sonrió levemente, suspirando mientras miraba a su alrededor.

Sentía como si estuviese flotando.

Giró su rostro por instinto al sentirse observado, encontrándose de lleno con la mirada de un desconocido.

Todo se empezó a tornar borroso, antes podía ver el cuerpo, ahora solo veía una mancha llena de rasguños y oscuridad. Se sintió intimidado en algún punto, su pecho se sintió pesado.

Debido al miedo que crecía en lo más profundo de su pecho, sus alas se ampliaron listas para volar por instinto al sentir que estaba en peligro. Sin embargo, al hacer aquello, un dolor punzante descolocó al chico, cayendo de rodillas.

Trató de mirar hacía atrás, su ala izquierda estaba sangrando.

Fue un sentimiento angustiante, volviéndose tenebroso al ver como aquella mancha se acercaba, y él sin poder moverse debido al dolor ni poder volar por el mismo, solo pudo encogerse, lo que fue un error, ya que la rama que había atravesado una de sus alas, provocó una herida más profunda al tratar de moverse. El chico gritó, retorciéndose en su agonizante dolor convertido en punzadas.

Aquella mancha se acercaba cada vez más a él.

Trató de irse, de moverse, pero fue demasiado tarde cuando sintió que aquella mancha lo tocaba.

Un grito aturdió sus sentidos, el pálido alzó la mirada a punto de maldecir a quién se haya atrevido a gritar de esa manera, sin embargo, se quedó estático al ver como el chico a su lado se encontraba sentado, respirando bruscamente mientras fruncía el entrecejo, buscando aire como si se hubiese quedado sin él. Había despertado, de una forma bastante extrañaba que sin querer, lo angustió.

— ¿Estás bien?. —se sintió confundido, mirando a aquel delgado chico, él cuál solo miraba algún punto incierto. Creía que aún no se había dado cuenta que había alguien más con él.

Se sintió extraño al preguntar aquello.

El chico eventualmente lo miró, sus ojos reflejando de un momento a otro tranquilidad y aquel lindo brillo que el pálido había visto en ellos. ¿Ya estaba bien?, ¿ya podría preguntarle por qué mierda se había puesto tan raro antes de desmayarse?.

Lo miró igualmente, conectando sus miradas.

— Estoy bien. —sonrió con dulzura, sus labios convirtiéndose en un corazón al sonreír. El pálido apartó la mirada, sintiéndose de nuevo extraño al verlo. Su estómago se revolvió, sintiéndose incómodo ante la atenta mirada del chico.