Sigo Aquí (SakuAtsu)

Un día más

El sol entraba por mi ventana dándome de lleno en la cara haciendo que mi cerebro despertara y comenzará a funcionar como cada mañana, al abrir los ojos lo que vi fue la cómoda a un lado de la cama, lo mismo de cada mañana.

Hasta hace unos meses todas las mañanas eran rutinarias, despertar, desayunar, entrenar y dormir, su vida se trataba de eso pero ahora Sakusa Kiyoomi estaba cambiando sus día a día.

Debido a la misofobia y Tocs del pelinegro yo tenía días inrrepetibles, aveces era complicado tratar con el pero ahora mismo intento ser el mejor novio para el y creo que lo estoy logrando.

Ayer el se veía relajado y cómodo durante la comida que tuvimos eso me hizo sentir bien, el estaba bien y yo estaba feliz por eso.

Sin embargo yo deseo más, deseo poder abrazarlo, tocar o incluso besarlo pero era algo que Sakusa aún no me permite y son paciente no quiero incomodarlo.

Pero el sentimiento de envidia en mi interior son mayores cuando veo a Suna y a Samu ellos....

Son tan felices juntos me gusta verlos, me siento feliz por ver cómo mi hermanito es feliz con alguien a su lado pero siento envidia del amor que se dan, envidio cada mirada, cada abrazo, cada beso o caricia, cada mirada de amor.

Yo quiero eso pero amo mucho a Sakusa como para exigir algo de eso, lo amo tanto que seré paciente con el no quiero apresurarlo, quiero que el se sienta cómodo, querido y amado por mi.

Soy capaz de esperar años solo por el.

• • •

Cuando Atsumu terminó su ritual mañanero salió de su departamento ese día era muy importante, el entrenamiento iba a ser algo más intenso pero vendría un pequeño juego con los Adlers, esto a petición del equipo de las águilas.

Vería a Tobio y eso le emocionaba quería competir contra el una vez más.

Por el lado de Sakusa todo era igual, estar en una relación con Atsumu no cambio ni impacto su vida de gran manera, el seguía su rutina y era feliz.

Como en estos momentos donde también salía de su vivienda para llegar al entrenamiento que tendrían.

Sin embargo el pelinegro esperaba que sus mañanas empezaran igual, de una forma alegre y movida.

Como solo su novio sabía hacerlo, la vez anterior todo fue muy raro, sin abrazo y sin celebración de cada punto hecho con ayuda del rubio.

El amaba estos eventos aunque se cansara de ellos a los 10 segundos.

° ° ° °

Debido a la distancia de las viviendas el primero en llegar siempre era Atsumu, vivía relativamente lejos del gimnasio del equipo pero no era nada que un bien horario y un transporte seguro no solucionaran.

Sin embargo si el creía que vivía lejos, su querido Omi-kun viva aún más lejos del lugar de entrenamiento

Y aun con un buen horario y transporte el siempre llegaba un poco después que su novio y esto era lo que le daba la ventaja al rubio para recibirlo con un gran abrazo mañanero.

° ° ° °

Mientras tanto Chacales y Águilas iban reuniéndose en las afueras del gimnasio del equipo de chacales, todos comenzaban a llegar.

Pero 2 en particular venían juntos, el setter de las Águilas y el opuesto* de los chacales.

Nadie de los equipos se sorprendió ante esto, llevaban bastante tiempo juntos y los 2 equipos sabían de la relación, a todos les parecía bien y hasta cierto punto anhelaba una relación como la de esos 2.

-Buenos días Shoyo, Tobio.

Enseguida el rubio de acerco a la pareja que recién llegaba.

-Buenos días Atsumu-san

-Tobio te he dicho que sólo me llames Atsumu

El pelinegro no respondió sólo asintió.

Los 3 estuvieron hablando hasta que llegó Bokuto, el siempre llegaba a esas horas al ir a dejar a Akaashi a su trabajo.

Bokuto estvio hablando como siempre de Akaashi por un rato y nadie lo paró, también eran una pareja querida por todos.

Pero un punto de la conversación llegó Sakusa todos le dieron los buenos días pero el pelinegro se apresuró a llegar a donde estaba el rubio esperando su abrazo mañanero.

Sin embargo no llegó, una vez más Atsumu sólo le dio los buenos días y le saludó de lejos.

Kiyoomi un días más se sintió incompleto, sintio como su día comenzaba mal una vez más y no le gustaba la sensación.

Pero tampoco se atrevía a pedirle el abrazo al rubio al pensar lo raro que eso se vería ante todos.

Pero Atsumu no se quedó con laa ganas de un abrazo y apretó entre sus brazos al primero que alcanzó que terminó siendo Inunaki que estaba pasando a saludar a todos.

El pelinegro fue consiente de esto pero no dijo nada y a los pocos minutos llegaron ambos entrenadores y los equipos pasaron a los vestidores  para comenzar con los partidos que los entrenadores habían programado.

° ° °

Cuando ambos equipos estuvieron cambiados y listos el partidos empezó, el ambiente se podía sentir tenso y era obvio, la última vez los chacales hicieron trizas a las águilas y el equipo quería su recancha en este juego.

Y esto lo dio a entender Hoshumi cuando su remate hizo que Hinata se fuera hacia atrás al querer recibirlo y el primer punto se le llevarán las águilas.

En su el partido fue bastante reñido siendo ganado por los Adlers por apenas poco.

Los siguientes partidos fueron con resultados distintos, aveces ganando los chacales y otras veces las águilas.

Y en cierto momento los entrenadores pusieron un alto a los partidos cuando la mayoría se vio cansada pero ciertos chicos querían y podian seguir.

Hinata, Kageyama, Bokuto, Hoshumi, Sakusa, Ushijima y por supuesto Atsumu, estos 7 aún querían jugar y no era sorpresa, ellos después de todo eran la generación monstruosa pero los entrenadores decidieron no seguir pidiendo a todos ducharse y cambiarse para terminar el entrenamiento y que pudieran irse a casa.

Los jugadores pasaron a las duchas, ahí Sakusa fue el primero en entrar, era algo normal de ver entre los chacales, sin embargo no para las águilas.

No era normal que alguien que iba en toalla los hiciera a un lado mientras corría hacia las duchas.

-Lo lamento Omi tiene un pequeño problema con los gérmenes así que no soportaría usar la ducha después de alguien.

El rubio sin dudar salió a defender a su novio de las miradas acusadoras que estaba recibiendo.

Sólo algunos dejaron de prestar atención al comportamiento del pelinegro y siguieron con su vida, como Kageyama y Hinata que sin pudor alguno entraron en la misma ducha.

El rubio terminó riendo un poco por lo ocurrido y busco una ducha vacía en la cual asearse.

Y por un momento se preguntó cuanto le tomaría a el hacer lo mismo con Sakusa, apenas tenía la dicha de hablar con el rubio y tomarle de la ropa cuando caminaban.

La envidia volvía atacar el interior de Atsumu.

Pero era algo que no dejaría que atacara tanto su cabeza, Sakusa era más importante para el.