La Redención

Capítulo 15

Obito estaba de pie en frente a una inerte Annie. Sus lágrimas aún caían en su rostro y después vió sus manos que estaban manchadas de sangre.

_No... Todavía no estás muerta_ diría Obito, mientras que con sus manos quitaba una de las ramificaciones del jutsu de madera que había incrustado en el vientre de Annie y empezaba a utilizar lo básico que esté conocía del ninjutsu médico en Annie, para tratar de curar sus heridas, lo más rápido posible.

Con la legión de reconocimiento..

Estos se estaban reagrupando para volver a las murallas, vieron desde la distancia a las afueras del bosque un humo negro se elevaba hacía el cielo.

_ Humo negro? Que demonios está pasando en el bosque_ preguntó Leví, mientras observaba desde la distancia hacía al bosque.

_ No sé, pero no me quiero quedar a averiguarlo_ diría Erwin, mientras se montaba su caballo y ordenaba a sus hombres, para que se alejarán de aquél bosque.

_ Andando vámonos de aquí!_ diría Leví haciendo que el resto de los soldados lo siguieran y se marcharan de vuelta a la ciudad.

En una carreta estaba el clon de madera de Obito, esté estaba vendado de sus "heridas", esté observaba a su alrededor, mientras recibía los recuerdos del Obito original. Después Obito miro a un lado y vió que Mikasa estaba al lado de Eren, qué aún se encontraba inconsciente. El Uchiha no necesitaba ser un genio, para saber sobre los sentimientos de la Ackerman hacía Eren.

_ Deberías de decirle tus verdaderos sentimientos_ diría Obito a Mikasa atrayendo la mirada de está.

_ Hu?_ está tan sólo mira al Uchiha y notó que esté ya estaba despierto_ No.. se de que estás hablando_ respondería Mikasa algo avergonzada, mientras tapaba parte de su sonrojó con su bufanda_ El es mi familia_ diria en un tono bajó.

_ Mm! Sabés pase por eso antes_ diría Obito atrayendo la atención de Mikasa_ Estaba enamorado de una chica, ella era increíble... La amaba en todo sentido. Me sentía muy bien cuándo estaba con ella, pero nunca le confesé yo lo que sentía a pesar de que tuve tiempo, para hacerlo_ diría Obito, para después guardar silencio un momento.

_ Qué pasó con ella?_ preguntó mikasa, mientras notaba que la expresión de Obito cambio a un semblante triste.

_ Jamás le pude decir lo que sentía, por que ella murió_ diria el Uchiha aún con la cabeza gacha, para después decir_ Te sugiero que le digas pronto por experiencia propia_ diría Obito, para después su mirada se centrará hacía el Bosque. Dejando a una Mikasa bastante pensativa.

En un lugar desconocido.

Annie estaba parada en la nada misma, ella observaba a su alrededor y no podía ver nada ni a nadie. Caminó en esa nada misma, por varios minutos e incluso horas.

_ Estoy muerta?_ preguntó Annie, ya que lo último que recordaba era que Obito la había apuñalado con una extraña estaca que salió de su brazo. Al recordar que Obito le había atacado, no pudo evitar dolerle, pero era hipócrita de su parte, ya que Obito debió sentir al principio lo mismo que ella y no tenía derecho a quejarse o reclamar Algo.

Annie prosiguió caminando hacía la nada misma, hasta que vió una luz a lo lejos de lo que parecía ser una salida de todo esté lugar. Ella había decidido caminar hacía esa luz, pero cuándo intentó dar un pasó Más hacía allí. Fue detenida por una mano que agarró su antebrazo, Annie al voltear vió a una niña que tenía el cabello corto, de color marrón oscuro , y unos brillantes ojos marrones. Ella tenía dos marcas rectangulares color púrpura en cada lado de su rostro, las cuales poseía desde su infancia. Llevaba una blusa negra de manga larga, y una falda de color rosa-púrpura. También portaba una pulsera roja en la mano izquierda, unas mallas largas color púrpura en las piernas y unas sandalias azules.