Si él fuera quien vivió lo que yo el mundo ardería en su venganza... pero ya que no es así y soy yo quien busca algo de paz, solo mueren aquellos que me han hecho daño. Nunca volveré a dejar que alguien me haga tanto daño, nunca perdonare a esa maldita mujer, y nunca dejaré que la venganza se escape de mi alcance como agua entre los dedos.
Simplemente no, no lo permitiré, y si tengo que hacer daño a gente inocente lo haré, nada me detendrá, ni un niño, ni un amor, mucho menos Roderick, un sicario fracasado que no acepta que ha sido vencido.
Pero bueno, por que no disfrutar de mi corta vida mientras aún puedo.
Me puse mi mini falda, unas botas de plataforma sobre una panti a cuadros, un top negro y mis cabellos cayendo sueltos sobre mis hombros y espalda, reitero, amo mi cabello rojizo, desgraciadamente tuve que ponerme mis lentes de contacto... Tomo mis cosas, esta vez no llevo mi arma, pues planeo sacarme la ropa y no quiero que mi guardia favorito vea que voy armada, sería malo para el negocio, y el dolor me recuerda que debo usar el cabestrillo...
Tomo la ruta que me lleva cerca de su casa, a esta hora ya debiese estar llegando. Camino lento con los audífonos en mis oídos, escuchando bella música, cuando de repente y "Tomándome por sorpresa" escucho la voz de Alan, quien tiene a su lado al perseguidor, ósea Javier.
-¡Juliet!- Me llama con una sonrisa casi anatómicamente imposible, y se acerca a mi con una velocidad escalofriante
-¿Alan?- le digo sacándome los audífonos -¿En serio eres tú? Wow, no esperaba verte aquí- digo con una leve risita -Que sorpresa- le miento con maestría, de esa que no sospechas siquiera.
-Ni yo, ¿a dónde vas?- me dice curioso, y yo obviamente no le diré que vine a verlo, ósea, obvio no.
-Una amiga mía vive por este sector- sonrió -y ya me estaba yendo a mi casa- sonrío y él ensancha su sonrisa.
-¿Quieres hacer una segunda visita? Me gustaría que vinieras a mi casa, digo, yo... verás...- dijo poniéndose extremadamente nervioso, oh por Dios este hombre es extremadamente adorable...
-Claro, me encantaría- le sonrío y me engancho de su brazo, él sonrojado comienza a caminar, y escucho un tercer par de pasos, Javier no planea irse... pero bueno, no tengo problema, para la próxima será.
-Oye, ¿me puedes dar tu número de teléfono? Así podemos estar en contacto- me dijo Alan de la nada luego de unos pasos de camino.
-Claro- él me ofreció su celular y yo anote el número de mi celular de "Vida Normal", el recibió su teléfono fascinado y jovial. Luego de un rato llegamos a su casa -Mira, estuve pasando frente a tu casa sin notarte durante los últimos 5 años- me rio por lo fascinante del falso descubrimiento y él corresponde con su risita.
¡Estoy tan feliz! ¡Al fin la vuelvo a ver! ¡No me importa lo que haya dicho Roderick! Estoy seguro que esto es el destino!
Juliet entro a mi casa y luego lo hizo Javier, serví algo para que tomáramos un poco, ¡le gusta el wiski! ¡Y desde su audífono escuche a Sebastián Yatra! ¿Qué más será de su gusto? ¡Le gusta vestir poca ropa, pero por dios que se presume! Es hermosa de pies a cabeza.
-Bueno Juliet, háblame de ti, ¿estudias? ¿Trabajas?- indago un poco más, ósea, es obvio que quiera saberlo todo de ella, pero es mejor ir despacio.
-Estudio, carrera de kinesiología, ya estoy en el cuarto año- sonríe de una forma tan angelical y llena de orgullo que me caería a sus pies sin pensarlo. -¿Y tú? Eres Guardia ¿no?-
-Soy guardaespaldas, estuve en la Escuela Militar toda mi vida, hasta que al fin fui libre, lo malo es que solo pude obtener este tipo de trabajo, aunque me gusta- dije con simpleza.
-Oye Juliet- le llamo Javier -¿Conoces a un tal Roderick?- dijo con seriedad.
-mm... Roderick Ayarza, estaba con ustedes en la fiesta, ¿no? Todo fue tan rápido que no lo había notado- su rostro cambio, no sabría decir el qué, pero lo hizo -Si, nos conocimos, fuimos amigos alguna vez, él se había enamorado de mí, pero yo le rechacé, desde entonces no hablamos-
Aguanto una risotada.
-Con que era por eso que me pidió que no me acercara a ti, le rompiste el corazón, eso no se hace- le digo juguetonamente mientras tomo un sorbito de mi combinado, si, tengo muchos tipos de licores para todos los gustos, pero no soy alcohólico.
-¿A si? ¿Y tú también estas enamorado de mí?- casi escupo el líquido en mi boca cuando me dice aquello y solo intento disimular el bochorno -Es broma- dice riendo con ganas, que mujer, me encanta.
Haku-Tan
19 de septiembre, 2021
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Jugando Con Fuego
Ficção AdolescenteTantos peligros acechan el mundo, tantos padres muertos, hijos desaparecidos, torturas silenciosas y suicidios... El ser humano es frágil, tanto que no es capaz de aceptar aquello, y si lo hace no es capaz de cambiarlo... Le falta fuerza de voluntad...