Completamente diferentes

Capítulo 22. Baile de invierno.

Habían pasado dos semanas, desde que me dijo que éramos todo y nada. Harry y yo nos entendíamos mucho mejor, pero habían diminutas peleas aún. Nuestra relación era rara porque no somos nada pero nos besamos como si fuésemos algo. También habían pasado dos semanas de que yo había cambiado mi forma de ser. Era más extrovertida, divertida. Era como Jade, tan loca como ella y eso me gustaba.

-Marly, basta.- Siempre despertaba con Marly lamiéndome la cara. Se bajó de encima de mí y me senté. Harry dormía como un bebito. Esto de despertarlo con Marly se había convertido en casi una rutina por lo que no tenía que decirle nada al perro, él ya sabía qué hacer.

-O callas a tu perro o juro que un día no lo verás más- Dijo Harry cubriéndose con las sábanas, no pude evitar reír.

-Debemos ir a la escuela- Grité desde el baño. Terminé de cepillarme los dientes y entré a la habitación de Louis.- ¡TOM!- Grité. Se despertó sobresaltado, cayéndose de la cama. Reí.

-No es gracioso, Pe.- Dijo adormilado. Aun así era adorable.

-Lo sé.- Dije orgullosa.- Prepárate debemos ir a la escuela.- Salí de la habitación y fui a la mía con la intención de despertar a Harry, pero ya estaba levantado y vestido para ir a la escuela.

-Me cepillé los dientes mientras le gritabas a Tom.- Dijo haciendo voz de niña en Tom. Le salió gracioso y reí.- Ahora dame mi beso de Buenos días.- Me acerqué a él, me tomó de la cintura y yo del cuello y nos besamos. Era lindo empezar el día así. Una mano en mi estómago no me preocupó, pero luego sentí dos y era para preocuparse.

-¡LOUIS WILLIAM!-Grité.- Bájame ya de tu hombro… Y espalda.- Estaba enojada. Había interrumpido mi beso con Harry, mientras ambos reían a carcajadas.

-Esto te pasa, por hacer que me caiga de la cama.- Dijo con el mismo tono de orgullo con el que le había hablado minutos antes.

-¿Por qué esta casa tiene que ser un griterío todos los días?- Preguntó mi padre mientras leía el diario y tomaba su café.

-Lo lamento papá- Dijimos los tres al unísono. Harry le decía papá por el hecho de que le incomodaba que lo llamen Sr. Lautner, así que debió acostumbrarse a decir papá y porque ahora era un miembro de la familia. Todos nos sentamos en nuestros respectivos lugares y Lizzie comenzó a hablar.

-Bueno…- Estaba nerviosa. Louis la miraba atentamente.- Yo… Nosotros…- Y luego dijo lo más rápido posible: Me propuso matrimonio- Señaló a mi padre.- Y le dije que sí.- Mostró su dedo con un lindo anillo de oro. La sonrisa de Louis se esparció tanto que pensé que se le iba a salir la dentadura. Harry se limitó a sonreír mientras que a mí se me caía un poco de lágrimas por la felicidad. A pesar de que me había costado aceptarlo, me había acostumbrado y me gustaba que mi padre encuentre a la mujer perfecta. Me levanté de la silla para darles un fuerte abrazo, lo que pareció eterno.

-No quiero ser aguafiestas pero debemos ir a la escuela.- Dijo Harry.

Diez minutos más tarde nos encontrábamos en la primera clase de hoy.

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-¿Estás lista para el baile de hoy?- Me preguntó Emily con tanta felicidad.

-Sí, ¿Y ustedes?- Pregunté a la rubia y a Jade.

-Sí.- Contestaron ambas.

Comenzamos a hablar del baile mientras que caminábamos en dirección a mi casa, ya que me acompañarían y luego se irían. Todo sería sorpresa sino fuera por el pre-baile en dónde debíamos decir la vestimenta que llevaría cada uno.

-Bien chicas, nos vemos a la noche.- Les dije y les guiñé el ojo. Saludaron con la mano y se fueron. Cerré la puerta y al darme vuelta casi me agarra un orgasmo. Zayn, Louis, Niall, Liam y Harry estaban detrás de mí con su respectivo traje puesto. Sí que estaban sexis.