Completamente diferentes

Capítulo 31. Imposible.

-¿Vamos a bailar?- Me preguntó Niall. Dirigí una mirada rápida al lugar tratando de encontrar a Harry, pero había desaparecido. Asentí con la cabeza y rápidamente el rubio me tomó de la cintura. Comenzamos a bailar, y a medida que se iba llenando la pista, nos fuimos pegando cada vez más. Tenerlo así de cerca se sentía bien, pero a la vez raro. Aun amaba a Harry.- Asi que... ¿Volvió la __________ de antes?- Fruncí el ceño.- Ya sabes, la de las gafas, sin tanto maquillaje y vestidos apretados o faldas cortas.- Dijo como si nada, pero sin despegar sus ojos de los míos. Quería divertirme.

-Solo fue un cambio por una apuesta con mi hermano.- Dije.- Tengo sed. ¿Puedes traerme algo?- Pregunté, Niall me sonrió y asintió, para luego desaparecer de mi campo de visión. Caminé unos pasos hacia la puerta para tomar aire y me encontré con una escena que no me agradaba demasiado. Harry besando a otra chica. Él estaba de espaldas por lo que no podía verlo, pero se besaban. ¿Tan rápido me había olvidado? Sin mirar más, me dirigí hacía algún lugar en busca del baño.

Sé que dije que no lo haría, pero ya no puedo.

"Solo debes olvidarlo".

No es tan fácil.

Y sin más, agarré la navaja, dañándome una vez más. Sintiendo aquel ardor que había sentido en mis peores momentos, viendo como gotas de sangre caían de mi muñeca. Pero, por alguna razón, esto no era suficiente. No podía seguir lastimándome porque se darían cuenta. Mis lágrimas salían una tras otra y sollozaba en silencio. Entré a un cubículo del que solo contaba con el retrete. Me agaché y lentamente metí dos dedos hasta hacerlos llegar a mi garganta. Una arcada. Más adentro. Dos arcadas. Más. Tres. Y continué hasta que ese sabor horrible, agrio, se despidió cayendo al inodoro. Ambos dedos estaban sucios, por lo que me dio asco y más vómito vino a mí. Iba a continuar pero una voz me llamó la atención.

-No hay nadie.- La voz de un hombre que se me hacía completamente familiar. Traté de tranquilizarme.

-¡¿ERES ESTÚPIDO?!- Ese era Harry.

-¿Por qué?

-Entramos al baño de mujeres y cuando estaba besando a esa chica tú deberías de haberle preguntado sobre ________. Sabes que cualquier información iba a servirnos.-Podía notar que Harry estaba frustrado pero... ¿Por qué quería información mía?

-El de hombres estaba ocupado por un rubio y la chica estaba muy concentrada tocando tus partes.- Debía saber quién era, me asomé un poco para ver a Harry de espaldas y a Steve. ¿Lo estaba tocando?

-Si quería saber de ________, debía dejarla.- Sí que te costó, pensé. En eso, una chica entró al baño, haciendo que los dos hombres se vayan con la excusa de que estaban borrachos. Salí de aquel cubículo, lavé mis manos y por primera vez, dejé mis marcas al descubierto.

Me dirigí a la barra encontrándome con Niall, que al verme me sonrió.

-¿Estuviste llorando?- Me preguntó preocupado. Su aliento tenía olor a cerveza, pero estaba sobrio.

-No, no me siento bien. ¿Puedes llevarme a casa?- Pregunté tratando de no dar tantas explicaciones, que al parecer, Niall tampoco quería saber y me dirigió a su auto. El trayecto fue silencioso, lo que agradecí. Habíamos llegado.- Gracias.- Dije antes de bajar del auto.

-Si necesitas algo, llámame.- Dijo para después irse.

Entré a casa y estaba todo apagado. Todos estaban durmiendo. Me dirigí en silencio hacía mi habitación, en busca de uno de mis pañuelos y caramelos. Estaba colocándome un pañuelo en mi muñeca y al darme vuelta me pegué un gran susto.

-Louis.- Dije recobrando el aire.- Me has asustado.

-¿Otra vez?- Preguntó él.

-¿A qué te refieres?- Sabía a qué se refería.

-Sabes a qué me refiero.

-No te enojes, ¿sí? Yo no quería, pero la situación me sobrepasó y después... Entonces... Y fui al baño... Pero no era suficiente... Y entonces... Las arcadas... No pude evitarlo.- Y era tarde cuando me di cuenta de mi error. Le había dicho a Louis que había vomitado. Ups.

-¡¿Qué hiciste qué?!- Estaba furioso y lo entendía.- No solo tengo que lidiar contigo, sino también con Eleanor. ¿No te das cuenta el daño que te haces a ti misma?- ¿Eleanor? ¿Ella también vomitaba?- Sí. Ella vomitaba si es lo que te preguntas, pero ha dejado de hacerlo. Ella lo superó.

-No volverá a pasar, lo prometo.- Dije

-Está bien- Contestó Louis un poco frustrado.- Que descanses.

-Igual.- Contesté antes que se vaya a su habitación.

¿Cómo podía ser tan tonta? ¿Por qué había vomitado? Lentamente fui hacía el baño y me duché. Me relajé y salí. Me puse mi piyama y me acosté, enredándome en las sábanas. No tardé en dormirme.

Ya era de día y había despertado muy feliz y enérgica. Harry estaba a mi lado, en su colchón, y me preguntaba a qué hora había llegado anoche. Dormía como un bebé, y Marly no tardó en aparecer. Sonreí.

-Haz lo tuyo.- Le dije al perro, pero este se echó en mi cama. Como si estuviera cansado.- Vamos Marly, debes despertarlo.- Pero no hizo nada. Siguió en la misma posición. Me levanté, me cepillé mis dientes, me vestí para ir al instituto y me dirigí al comedor para ir a desayunar.

-Hola.- Le dije a Lizzie pero no obtuve respuesta. Al parecer nadie estaba de humor o yo me había levantado demasiado bien. Al darse vuelta esta, tenía unas ojeras realmente grandes, su cabello estaba demasiado despeinado y sus ojos rojos. Había estado llorando.- ¿Pasó algo?- Pregunté. Ella negó con la cabeza.-¿Segura?- Insistí.

-Tu padre ha cancelado la boda.- Dijo después de un tiempo, en el que seguro se debatía si debía contarme o no.

-¿Qué?- Pregunté perpleja. Alguna razón había cambiado a papá de aquella idea, pero me extrañaba ya que él no era así, a no ser que... No. No puede ser. Mis ojos se cristalizaron. Tomé aire.- Estaba... ¿Estaba borracho?- Pregunté temiendo la respuesta de ella. Sus ojos también se cristalizaron y una lágrima cayó rápidamente.

-Si.- Dijo ella retomando el trabajo de darme la espalda. No podía ser... Papá había dejado de tomar hace años, y si no me equivocaba, una situación lo había llevado a esto.- Me dijo que el trabajo no le estaba yendo muy bien, la competencia había robado a sus clientes. Estaba furioso. También me dijo que se había encontrado con una mujer que debería estar muerta, revolcándose en su tumba.- Además de enseñar defensa personal, papá trabajaba en una empresa donde hacía jabones, pero "Lifebuoy", se había hecho popular con la propaganda del nenito dibujando un germen. Pensé sobre la mujer, pero nada se me venía a la cabeza. No sabía que papá tenga tanto odio hacia una persona y mucho menos, hacia una mujer. Escuché la puerta de una de las habitaciones abrirse, donde rogué que fuese Louis, pero era papá. Lizzie se tensó.

-¿Dónde está mi desayuno?- Preguntó él. Al parecer había tomado demasiado y los efectos del alcohol no se habían ido. Me quedé mirándolo.- ¿Y tú qué miras?- Me preguntó, desvié rápidamente la vista.

-¿Has visto a mi hermano, Liz?- Pregunté, ella negó con la cabeza y papá rió fuerte y sarcásticamente.

-¿Hermano? ¿De verdad?- Volvió a reir.- No tienes ni siquiera madre y a ese lo llamas hermano. No seas ridícula.-

-No lo soy.- Susurré.

-¿Qué has dicho?- Me preguntó, levantándose de la silla violentamente.- Responde.- Negué con la cabeza. Al no recibir respuesta, el hombre levantó la mano y me pegó haciendo que cayera al piso, ya que no me lo esperaba.

Me pegó.

"Sabes que está borracho"

Me levanté del piso y, con lágrimas en los ojos, me fui hacía mi habitación. Pero cuando iba a tirarme a mi cama, todo se tornó negro.

Y era que todo lo que había pasado en el comedor...

Solo había sido un sueño.

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Hola!!! Lamento la tardanza, y es que AL FIN PUEDO SUBIR UN CAPÍTULO. :) Me siento feliz..

DISFRUTEN!! :3