Capítulo 18: Un trato es un trato

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Aquello no tenía ningún sentido. ¿Por qué Hyejin me estaba pidiendo algo así? Hasta me costaba teclear de lo mucho que me estaban temblando las manos.

Moonbyul

¿De qué estás hablando?

Ahn Hyejin

Estuve pensando que sería divertido tener una esclava. Ya sabes, me limpias el cuarto, esas cosas. Sería solo durante un mes. Es un buen trato, ¿no te parece?

Moonbyul

¿Y si me niego?

Ahn Hyejin

Sería una pena que, tras años de estudios, Yongsun no pudiera encontrar un trabajo mejor que en esa cafetería por culpa de su anterior modo de vida.

Gruñí, sabía que iba a ir por ahí el asunto, que podía ser algo más serio que aguantar preguntas incómodas. Pero ese trato era absurdo. Ahora había hablado de limpiar, pero antes había mencionado otra cosa...A saber todas las cosas que incluirían ese trato. Seguramente solo quiera usarme como esclava, como ha dicho. Mandarme cosas que hacer solo para divertirse, para ver hasta dónde soy capaz de llegar.

Por un lado, pensaba en que no tenía razones para tenerle miedo, seguramente solo me mandaría recados y poco más. No era posible que pudiera ser tan cruel para algo peor, ¿no?

Moonbyul

¿Por qué has dicho antes de acostarme contigo?

Ahn Hyejin

Era una broma, pensaba que reaccionarías entusiasmada ante ello.

Ah. Solo era eso. La verdad es que me quitaba un peso de encima. Si realmente solo iban a ser cosas como hacerle la cama o llevarle las bolsas de la compra, podía aceptar. Total, el futuro de Yongsun era mucho más importante que pasar un poco de vergüenza. Pero cuando volví la vista hacia la conversación, mi mundo volvió a caer.

Ahn Hyejin

O pensándolo mejor...quiero comprobar una cosa, así que eso sigue en pie.

Comprobar...¿una cosa? ¿Es que acaso?

Moonbyul

¿Es que ahora dudas de tu sexualidad?

Ahn Hyejin

Lo siento, pero no. Eso está muy claro, pero quiero comprobar si algunos rumores son ciertos. Aunque no te hagas muchas ilusiones, yo no te voy a tocar.

Ugh, esto era demasiado frustrante.

―¿Qué miras con esa cara?

Levanté la vista encontrándome con Yongsun con el pijama puesto y el pelo mojado. Estaba tan guapa. O sea, siempre era guapa, pero en los momentos tan cotidianos como aquellos eran cuando reafirmaba la belleza que era.

―Ah, nada, he leído una noticia que me ha enfadado un poco. Nada importante.

Bloqueé el móvil y lo dejé sobre la mesita, al lado de la cama. Yongsun me sonrió con ternura y rápidamente se subió a la cama, abrazándome por la espalda.

―Yo haré que te sientas mejor.

Por un momento, pensaba que se refería a otra cosa, ya que cuando solía decir eso, acababa teniendo varios orgasmos seguidos. Sin embargo, lo que hizo en ese momento fue hacerme cosquillas.

Comencé a moverme mientras me reía, intentando huir de ella, pero no podía, la tenía prácticamente encima de mí.

―Para para ―le suplicaba, ya notaba las lágrimas saliendo de mis ojos.

You're my doom [MOONSUN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora