Capítulo 4: No soy tu niñera

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POV SOLAR


Genial, volviendo sin haber ganado nada. Espero que ese capullo no me eche demasiado la bronca. Si tenía la suficiente suerte, esa noche no me lo encontraría por allí y así no tendría que enfrentarlo cara a cara. Entré en el edificio para devolver las llaves del coche y cambiarme a una ropa más...cómoda. Al cruzar la entrada vi de reojo a Chungha sentada en el recibidor, leyendo una revista. Aunque parecía no haber levantado la vista, estaba segura de que me había visto, y también estaba segura de que me iba a decir algo por no acercarme a darle el dinero.

―¿Se ha arrepentido en el último momento?

Chungha era la única persona que conocía sobre mi vida real. Aunque no conoce la historia completa de cómo he acabado aquí, estuvo conmigo desde el principio, y siempre ha intentado ayudarme en todo, así que no podía mentirle.

―Eso parece.

Entonces levantó la mirada de la revista para fijarse en el reloj que adornaba la pared que tenía enfrente. Luego, me miró directamente. Sabía perfectamente qué intentaba sugerir.

―Estaba bastante confundida, así que se lo he dejado gratis.

Chungha suspiró y cerró la revista, dejándola a un lado de la mesa. Hacer algo así tenía consecuencias, consecuencias que conocía a la perfección y las cuales no quería escuchar. Pero ella también sabía todo eso.

―Tranquila, me inventaré cualquier cosa, como que la chica al final ni ha aparecido. Pero no vuelvas a hacer eso, no quiero que te metas en líos.

Asentí, no solía desobedecer las normas, así que tampoco pensaba que pasara nada por una vez. Pero Chungha se preocupaba demasiado por mí. Iba a continuar mi camino, pero volvió a hablar.

―Te recordaba a ella, ¿verdad? ―No respondí. La volví a mirar unos segundos antes de bajar la mirada.― Cuando llamó, su voz me recordó un poco a la suya.

Aquel comentario me había sorprendido. No sabía qué decir, ni siquiera me había fijado...o quizás sí que lo había hecho, pero no quería pensar en ello. Pero como dije, a Chungha no podía mentirle, así que me encogí de hombros confusa.

―Supongo que se parecía ligeramente.

Notaba que Chungha quería hablar del tema, ver cómo estaba, ayudarme a profundizar en mis sentimientos, en vez de hundirlos profundamente en mi interior, pero yo no me sentía cómoda hablando de ese tema. Solo quería ignorar por completo todos esos pensamientos. Tampoco había nadie en quien confiara lo suficiente como para abrirme y echar toda la mierda que tenía dentro. Confiaba en Chungha, confiaba en Eric y en Jimin, pero no era suficiente. Chungha solía intentarlo, soltar algunos comentarios para ver si le abría la puerta, pero mi reacción era siempre la misma, así que simplemente cambió de tema.

―Por cierto, me ha llamado un tío, decía que quería una cita específicamente contigo.

Solté un bufido mientras rodaba los ojos.

―Ya sabes que no acepto citas con hombres.

―Era por probar, supongo que se lo pasaré a Krystal, no te preocupes.

Agradecía que el capullo de mi jefe no estuviera por ahí, y así poder irme sin ningún interrogatorio. Estaba cansada, solo quería llegar y darme una buena ducha.


En cuanto abrí la puerta, como siempre, mi perrita vino a saludarme como si el verme aparecer fuera la mayor alegría de su vida, quizás de verdad lo fuera. Lala era lo que hacía que mi pequeño apartamento pareciera menos triste. La verdad es que, si no la tuviera a mi lado, seguramente me habría tirado por la ventana.

You're my doom [MOONSUN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora