☎️ ⁞ Minho marcaba el mismo número a diario. Una, dos, tres, cuatro veces. Era casi una obsesión. Aunque nunca contestaba sus llamadas, simplemente llamaba para escuchar su voz en la contestadora... Al menos así podía escucharlo de nuevo.
| 설...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Agua. Agua por todas partes, infinita, abrumadora. Minho de nuevo estaba allí entre el mar, sin poder hacer nada, moviendo sus brazos y piernas frenéticamente, intentando respirar pero ahogándose más y más, tomando agua con cada intento. Todo daba vueltas, se sentía desfallecer poco a poco. La desesperación lo consumía y fue entonces cuando lo vio a él de nuevo... Nononono, no debería estar aquí, él no debería estar aquí.
En ese momento Minho se despertó de golpe. 4 de la mañana. La misma pesadilla de siempre. Ya estaba acostumbrado a esto, tan acostumbrado que ni siquiera intentó volver a dormir. Caminó hasta la cocina y preparó un café. Probablemente es gracias al café que Minho sobrevivía a diario.
Estaba lloviendo afuera, se sentó en el piso al lado de una ventana para ver la lluvia caer. Estuvo allí un momento pero las imágenes del sueño y el agua volvieron a su cabeza así que cerró las cortinas, llevó su café al sofá, se sentó y encendió el televisor. Estaban dando una película de thriller pero no pudo prestarle atención aunque intentó hacerlo.
Al menos el tiempo pasó rápido y pronto eran las 6. Se dio una ducha y se puso un pantalón y su sweater marrón de siempre. Llamó a Jisung de nuevo y la llamada se fue al correo de voz, colgó. De desayuno comió dos panes, es más de lo que comía a veces. Conectó sus audífonos al celular y después de varias canciones y un corto viaje en bus llegó a la universidad.
A veces iba caminando a la universidad, quedaba a unos 30-40 minutos caminando o 15 minutos en autobús. Hoy no quería caminar. De hecho no tenía muchas ganas de hacer nada. Las clases fueron eternas y prestó atención parcialmente. Tomó pocas notas pero no eran letras, solo garabatos ininteligibles.
Su hermano, Lee Felix, lo llamó a la hora del almuerzo, preguntaba si quería salir a comer. Minho aceptó, al fin y al cabo no tenía ningún plan y hace días no veía a su hermanito. Minho solo le llevaba un par de años. Felix estaba en segundo semestre de culinaria, en la misma universidad.
⏤Hyung, al menos deberías intentar... No sé.. Sonreír, seguir viviendo... Ya ha pasado mucho tiempo ⏤dijo Felix al terminar el almuerzo. Minho lo miró con seriedad y no dijo nada⏤. Es que... siento que desde octubre eres una persona completamente distinta... y extraño a mi hermano mayor divertido y ocurrente.
⏤Esa persona ya no existe. ¿En serio esperas que actúe como si todo estuviera bien? ¿¿Quieres que sonría como si nada hubiera pasado?? ⏤Minho se enojó de repente.
⏤Yo... solo pido que lo intentes.
⏤Yo pido que dejes el tema.
Felix tomó sus cosas y se fue algo molesto. Minho siguió fingiendo enojo hasta que vio a su hermano salir por la puerta del restaurante. En ese mismo instante rompió en llanto. Limpió sus lágrimas rápidamente y pagó la cuenta para luego volver a su apartamento e intentar pensar en otra cosa.
Fue inútil. Nunca podía pensar en otra cosa.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
