Tengo algo que contarte

Capítulo 12 La amenaza

El abogado llamó justo cuando preparaban el desayuno.

-Robert tienes que venir, tenemos problemas, pero no le digas nada a Mayte. Es mejor que ella no sepa que vienes.

-Bien -Mayte lo miraba mientras servía el café -estaré ahí en el correr de la mañana, lo antes que pueda.

-En auto demorarás más, en tren estarás en poco más de 3 horas. Te sale uno en 30 minutos, quizás lo alcances. Avísame cuando estés llegando, iré por ti. El tema es muy delicado.

-Bien, estoy saliendo.

Tomó su chaqueta y sus documentos.

-Qué sucede?

-Un problema en una obra, no podré llevarte a la oficina. No podré desayunar. Tendrás que pedir un taxi.

-Ok

La besó apenas y salió rápido, así evitaba preguntas incómodas. Este viaje repentino le serviría también para aclarar la mente, eran las ocho de la mañana y necesitaba despejarse. Al mediodía estaba llegando a Madrid. El abogado lo recogió , de hecho ya lo estaba esperando.

-Sufrimos un robo, revolvieron todo, hace dos noches. Estuvimos ayer todo el día ordenando lo que tiraron hasta que lo descubrimos… falta la carpeta de Mayte.

-Qué dices?

-Los archivos de Mayte es lo único que falta. Hice la denuncia policial ayer pero ahora a primera hora de la tarde iremos a ver al juez. Estamos resolviendo su tema de identidad, los documentos falsificados no se usaron en nada oficial, sólo los hizo para buscar trabajo. Eso minimiza el daño, pero pediremos para ella inmunidad y nueva identidad.

-Nuestra dirección estaba en el archivo?

-No, ella está bajo protección. No había datos en la carpeta pero ya sabemos que ahora que movimos el divorcio, alguien está tras ella. Pediremos guardia para ella por unos días mientras descubrimos quien está detrás de esto.

-Su marido sigue preso no?

-Sí, me confirmaron hoy.

-Algún compañero de la cárcel? El tipo no es rico, no puede pagarle a alguien para venir hasta acá.

-Él está metido en drogas. Pudo conseguir un sicario. Pero sus compañeros de cárcel tienen antecedentes, no pueden entrar a España. Ya hablaste con ella que en cuanto salga el divorcio, que es inminente deberían casarse y ella adoptar tu apellido?.

-Le hice la propuesta…pero no le dije porqué

-Aceptó?

-Si… no muy a gusto creo. Tengo la impresión que la palabra matrimonio le causa pánico..

-No es raro, eso es bastante común después de un evento traumático. Estamos cerca del juzgado, tenemos media hora para comer algo antes de que nos reciba el juez.

Mientras almorzaba algo rápido llamó a Biel. Ya le había avisado que iba rumbo a Madrid de urgencia, y por qué. Ahora le pedía que reforzara  la seguridad, Mayte podía estar en peligro. No le había dicho nada a ella para no asustarla.

EL juez los recibiría a la una. Fue una tarde larga, se arregló una investigación urgente y se daba aviso a la policía de Barcelona, pero el juez no tenía pruebas suficientes para ponerle un policía de custodia donde vivían.

Era de tardecita cuando Robert pudo tomar el tren de regreso. No llegaría a Barcelona antes de la medianoche.

Le pidió a Biel que llevara a Mayte a casa y que revisara que todo estuviera bien en el apartamento.

Biel se presentó en la oficina de Mayte a la hora de salida.

-Hola.

-Hola Biel.

-Te llevo a casa? Voy para allá, me voy a encontrar con Robert.

-Pero él no está, me dijo que había problemas en una obra, salió corriendo de mañana y no he vuelto a saber nada de él. Tuvo el celular apagado todo el día. Sabes donde está? En que obra?

-En Madrid

-Madrid! No tenemos obras en Madrid!

-La tendremos… Vamos? Me dijo que llegaba en breve, lo esperaré un rato.

Llegaron al apartamento Y parecía que Biel revisaba la casa… qué le pasaba a Biel?

-Pasa algo?

-No nada. Te molesta que me quede un rato? Podemos pedir algo de cenar, yo invito.

-Bien, eso será agradable, podrás contarme cosas de Robert que yo no sepa -rieron ambos -pero antes tomaré un baño.

-Tranquila, prenderé la televisión, cuando salgas pediremos comida.

Comieron y charlaron hasta que Mayte quedó dormida en el sofá, toda acurrucada mientras miraban una película.

Cuando llegó Robert ella estaba muy dormida, le hizo señas a Biel y salieron al pasillo a hablar.

-Alguien está tras ella, están investigando quien. Creen que fue alguien que entró al país con documentación falsa.

-Eso significa que puede estar en peligro. Guardia policial?

-No hay pruebas suficientes para pedirla.

-Pondremos un guardia privado. Yo me haré cargo de eso Robert. No te preocupes por nada.

-No quiero meterte en estos problemas

-Tranquilo. Tenemos ya una empresa contratada en la empresa, solicitaré una extensión para la noche para ustedes y un refuerzo para la empresa durante el día.

-Gracias

-No hay de qué. No me cuesta nada darte una mano. Me despido por hoy, cuídense.

Se despidió de Biel y entró cerrando tras él. Verificó que todas las ventanas estuvieran cerradas. Al día siguiente contrataría un sistema de alarmas.

Tomó a Mayte en brazos y la llevó a la cama. Ella sólo susurró -volviste- y luego siguió durmiendo.

Se bañó y se fue a dormir con ella. Para qué decirle? Para qué preocuparla?

De mañana Mayte se levantó antes a preparar el desayuno. Él se quedó un rato más, estaba muy cansado. Pero de repente se dio cuenta que la casa estaba silenciosa. Se levantó y fue hasta el living y allí la vio, pálida, sentada en el sillón con un papel en la mano. Su cara estaba desencajada.

-Mayte, que sucede?

No podía hablar, no podía pronunciar palabra, como si hubiera visto un fantasma. Levantó la mano y le alcanzó el papel

“Hasta que la muerte nos separe..” estaba impreso en aquel  papel.