Tengo algo que contarte

Capitulo 10 Vivir juntos?

Ese fin de semana hicieron mucha playa, pasarle el protector solar ahora que tenía permiso para tocar, era un verdadero placer. Y verla caminar hacia el agua para perseguirla después y zambullirse con ella era una delicia. Tenerla en sus brazos dentro del agua y besar sus labios y su piel salada era algo más que placentero.

También fueron de compras, él necesitaba algunas cosas y ya aprovechó para llevarla de compras a ella. Al principio Mayte se rehusó a que él le comprara ropa, pero después que él le mostró algunas piezas de lencería, la convenció que sería para disfrute muto. Claro que a la lencería terminó agregándole un guardarropas entero.

Ella estaba algo abrumada, nunca había tenido tanta ropa ni de tan buena calidad. Al fin aceptó si ella pagaba una parte. Él se enojó porque era un regalo y en fin.. así pasaron su fin de semana, que por cierto, todo se sucedió más rápido de lo que hubieran querido y antes de darse cuenta ya estaban camino al trabajo otra vez.

El lunes a media mañana apareció Frida en su oficina. Era lo más cercano a una amiga que Mayte tuvo en mucho tiempo.

-Quiero que me cuentes….te llevó el viernes y hoy te trajo él. Pasaste el fin de semana en su casa?

-Sí -para qué negar, seguiría preguntando hasta el cansancio.

-te mudaste con él? -preguntó con los ojos grandes bien abiertos

-Si….casi

-Cómo que casi?

-Me dio su llave y llenó un guardarropas de prendas femeninas para que no tuviera que volver a casa…

-Eso podría catalogarse como que sí…ya vives con él. Vaya chica que rápido fuiste. Te le metiste en la cabeza a ese hombre hasta que claudicó su eterna soltería

-Sigue siendo soltero Frida

-No me sorprende que te pida matrimonio antes de fin de año al paso que vamos -emitió una risita- puedo ser tu madrina? Porfis!

-No hemos hablado de matrimonio Frida, ni una palabra. Pero si nos casamos en algún momento, prometo que serás la madrina.

-si!!

En ese momento entra Robert a la oficina y Frida se pone en pie con una sonrisa amplia.

-Ya me retiro jefe, no quiero importunar.

-No Frida, quédate, sólo traigo algo.

-Carla ya no trae sus documentos?

Él la miró risueño

-Los documentos privados para mi novia los traigo personalmente.

Dejó una carpeta sobre el escritorio y le dedicó una mirada a Mayte -te veo en el almuerzo?

Ella asintió con la cabeza y él se retiró.

Carla volvió a sentarse

-Chica, ese hombre está babeando por ti…..-la observa detenidamente, ese brillo en su mirada, el rostro sonriente, parecía que emitía luz… -carajo, si tú también estás babeando, por dios! Son dos babosos!

Se levantó riendo y ya en la puerta se volvió hacia Mayte -madrina y te ayudo a elegir el vestido de novia! No lo olvides! – Y cerró la puerta tras ella riendo a carcajadas.

Dos semanas pasaron…dos semanas y ni pisó su propio apartamento. Estaba pensando en sacar lo poco que quedaba de ella allí y devolver la llave, no tenía sentido pagar el alquiler, era un hecho que ya no volvería a ese lugar a vivir. No podría vivir sola de nuevo y lejos de Robert. Eso era algo que no podía ya ni considerar.

Robert llevó una carpeta con él esa noche, estaba serio y con el seño fruncido.

-Qué pasa?

-Nada, es el informe del investigador, volvió ayer de América y hoy envió toda la información. Pero no he tenido tiempo ni de ojearla, me enloquecieron con el trabajo hoy. Son muchos papeles, los miraremos en casa tranquilos.

Ella tomó la carpeta con mano temblorosa y la puso sobre su regazo. El ambiente se tensó notablemente, ella estaba preocupada y por ende él también.

Llegaron y se sentaron en el comedor, era el lugar de mejor luz para leer.

Ella le dio la carpeta a Robert

-Ábrela tú….no puedo hacerlo…. -respiraba agitada y estaba pálida

-Tranquila -tomó la carpeta con una mano y sostuvo un momento la mano femenina con la otra.

Abrió y ojeó primero y luego comenzó a leer los documentos allí existentes.

-Según esto hace cinco años tramitó visa de visitante en el consulado de España y le fue negada por tener antecedentes penales por violencia doméstica.

Tomó otro documento -Aquí dice que seis meses después salió del país en un viaje rumbo a Madrid con visa falsa y fue detenido en el aeropuerto, nunca ingresó, fue deportado de nuevo con cargos por documentación falsa que le valieron 6 meses de cárcel.

Tomó otro documento – Este dice que hace un año que fue detenido por asalto y robo de autos a gran escala, fue condenado a cinco años de prisión.

La miró a los ojos -Sí, trató de seguirte pero no pudo y ahora está en prisión por cuatro años más. Además, visto esto y por sus antecedentes, él no podrá entrar nunca en España….. estás segura Mayte…

Los ojos femeninos brillaban, estaba emocionada. Él se levantó y la abrazó, sería que todo había terminado realmente?

-Hay más informes pero creo que eso es lo importante. -se separó un poco y la miró a los ojos.

-Mañana iremos a hablar con mi abogado, tenemos que solucionar lo de tu matrimonio con este tipo pero más importante aún, ver lo de tu identidad falsa. Tenemos que arreglar eso primero que nada, él nos asesorará.

Volvió a abrazarla, ahora había un rayito de esperanza de tener una vida real y verdadera juntos. Ahora sí podrían proyectar un futuro juntos.

-Si tú hubieras tenido que irte…. me hubiera ido contigo, te seguiría al fin del mundo. No te hubiera dejado ir sola, no hubiera podido. Quedarme acá solo y perderte hubiera sido como estar muerto….

Lo abrazó fuerte, muy fuerte y quedó allí largo rato. Ella se sintió como el naufrago que acaba de llegar nadando a la orilla, agotada del viaje pero feliz de haber encontrado refugio y una vida nueva…otra oportunidad de ser feliz… Robert era su otra oportunidad y el amor que había surgido entre ellos. Ninguno de los dos había experimentado un sentimiento así antes…. Y era reparador…