El Pequeño Gigante de Aoba Johsai

La Última Óportunidad

Hola, estimados lectores. ( ╹▽╹ )
¿Qué me cuentan? Mis mejores deseos. ¡No puedo creer que ya estamos en abril! (• ▽ •;) yo soy pésima con las fechas y apenas me acuerdo que día es
Dejando eso de lado, disfruten de la lectura.
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– Vino mucha gente – exclama el pelinaranja.

– Las finales son asi – dice Kunimi.

– El estadio esta lleno...además, saldremos en televisión... – comenta el de pelo de nabo.

– No se dejen llevar, ni se pongan nerviosos...juguemos como siempre – lo dicho por el As del equipo blanquiceleste tranquiliza y anima a sus compañeros.

– ¡Iwaizumi-san es genial! – es el pensamiento general de los de primero y segundo año, exceptuando a Kyotani que voltea la mirada y chasquea la lengua.

– Debo de admitirlo, ¡eso fue cool! ¡Me da envidia! – dice el capitan y armador principal con un leve puchero, provocando que sus compañeros de tercer año sonrían burlonamente. A los segundos retoma la seriedad – Así es, ¡hagamolos trizas! –

En ese momento el equipo bicampeón, entra a la cancha.
En el tiempo que Ushiwaka y su equipo comienzan a practicar... Primero comienza el anterior campeón.

– ¡Ushiwaka es increíble! – admite el #10 al ver el desempeño del capitán y estrella oponente, provocando que todos se giren a verlo – ¡Estoy emocionado! – eso alivia a los de tercer año y calma un poco a los demás.

Es el turno de calentamiento del equipo de Hinata, en ese momento el balón de parte de una mala recepción del #10 del Seijoh, se va en dirección del otro equipo, pero es interceptado por el capitán y estrella del Shiratorizawa.

La poderosa tensión se siente al instante en donde capitanes y estrellas rivales cruzan la mirada, y Hinata que a pesar de querer mostrarse amenazante no logra soportar dicha presión y comienza a temblar por ello. De pronto Ushijima, lo voltea a ver y estrecha los ojos provocándole un gran escalofrío.

– Les deseo suerte – esto hastía a los mayores.

– No la necesitamos... – Iwaizumi responde entre dientes.

– ¡Esta vez caerás, maldito Ushiwaka! – asegura el armador.

– Ya lo veremos... – les da la espalda – Demuéstrame lo que tienes Hinata Shōyō – el mencionado lo mira desafiante desde atrás de Kentarō quien observa todo este intercambio de palabras con molestia.
Practican los remates, tal vez no sean tan poderosos como los de Ushiwaka igualmente sobresalen.

•••Mientras en las gradas•••

Del lado del equipo del Aoba Johsai, también se hallaban haciendo porras.
En una parte alejada del bullicio, estaba un peliazul usando una sudadera, una mascarilla y unos lentes oscuros; tratando de pasar desapercibido.

– ¡¿Ka-Kageyama-kun?! – le reconoce Yachi provocandole un susto a su compañero.

– ¿Cómo pudiste reconocerme? –

– Eres demasiado obvio y nada discreto – le responde esta vez el de lentes.

– ¡¿Hah?! –

– No sabía que también vendrias Kageyama – llama Ennoshita, acompañado del resto del equipo exceptuando a Nishinoya y Tanaka que están tras el barandal de donde cuelga la bandera del equipo con la frase: "Gobiernen la cancha" impresa.

– Ennoshita-san, todos vinieron. Creí que solo Tanaka-san y Nishinoya-san .. – se saca los lentes, la mascarilla y la capucha.

– No te creas la gran cosa, Rey – dice el más alto.