Opacidad ‖Gabrinette‖

Capítulo 18 Ultimar.

Ignoró lo inquietante que fue todo eso, no sé si es molestia o halago; sea lo que sea lo ignoro y sin dejar de verlo vuelvo hablar.

-Quiero preguntarte algo -Retiro su mano de mi mejilla- ¿Por qué estás conmigo?

Me castigo mentalmente, no era eso lo que debía preguntarle, sino lo que pasa con Emilie, estoy por rectificarme pero él contesta -No lo sé.

-¿A qué te refieres con eso? -Lo observo confundida.

-Que no lo sé.

-Sabes creo que mejor te dejo descansando y... -Él interrumpe.

-Me repito varias veces, esta será la última vez y después solo estamos haciéndolo otra vez y otra vez. -Sonríe de la nada.

-¿Quieres terminar esto? -Pregunto despacio.

-Desde la primera vez que toque tus labios -Musita-, no puedo dejarlos, no puedo dejar de verte, me atraes tanto.

-También me atraes -Murmuro avergonzada-, aunque después del primer beso me advertiste que estabas casado.

-Estoy casado -Coloca su mano en el puente de su nariz, desacomodando sus lentes-, ¿O no?

-Supongo... es decir, tu esposa desapareció -Parece mirar al techo, como si intentara recordar- ¿Qué sucedió Gabriel?

-Enfermo -Frunzo el ceño-, no pude hacer nada, solo mirar como empeorara hasta que durmió.

Son confusas las palabras que usa Gabriel y el tono arrastrado me confunde más.

-¿Cómo? -Cuestión verdaderamente confundida.

-No había remedio, no lo hay o si lo hay. -Habla tan torpemente que intento recabar lo que ha dicho.

-Harás lo necesario -Vuelve a mirarme, intenta ya que sus lentes se han desacomodado-, ¿No es así? -Asiente-, debiste quererla tanto.

-La amo -Pronuncia de manera natural-, la extraño y claro que la quiero devuelta.

-Sabía que jamás le harías nada -Sonrió débilmente-, ¿Por qué le harías algo y luego tratarías de traerla?

-¿Piensas que le hice algo? -Su pregunta es pausada, incluso trata de interpretarla-, todos lo piensan.

-No, no pienso eso -Su mano se posiciona de vuelta a mi mejilla, dando suaves caricias-, no tendría sentido.

-El libro que le robaste a mí hijo -Bufó-, ella me lo dio.

-Discúlpame de nuevo por eso. -Murmuro.

-T-Tu querías a mi hijo ¿Cierto? -En su voz hay demasiada burla.

-Lo quiero -Rectificó mordaz-, no del mismo modo pero el cariño continua ahí.

-Nunca te correspondió. -Luce verdaderamente interesado.

Me siento culpable, está en un estado en el que no está totalmente conciente y de cierto modo me estoy aprovechando de ello, y aun peor no estoy consiguiendo información sobre el miraculous o Emilie.

-Nunca se lo dije -Susurro-, a veces me pregunto qué hubiera pasado pero eso no importa, lo supere.

-Tal vez debiste besarlo -Suelta una risilla-, como a mí. -Libero una carcajada.

-Quizás no hubiera tenido tanta suerte. -Su otra mano libre se una a la suya en mi otra mejilla, espero la caricia pero me sostiene acercándome a su rostro.

-¿Quién podría resistirte? -Mi cuerpo se inclina totalmente hacia el suyo-, cualquiera en su sano juicio caería rendido a ti. -Roza sutilmente mis labios.