365 Drabbles ♡ Treasure

Cita

La familia So era reconocida ya que todos sus miembros masculinos eran reconocidos deportistas y sobre todo por su talento en las artes marciales, siendo los dos más jóvenes, Junghwan y su primo Yohan especialmente buenos en el taekwondo.

—¿Seguro que no quieres que te lleve?— Pregunto el señor So a su hijo que terminaba de tomar el desayuno, era sábado y el castaño debía alistarse para ir a sus entrenamientos.

—Prefiero caminar, me ayuda a calentar mis músculos antes del entrenamiento— Explico el menor tomando lo que quedaba de su sándwich en un gran bocado, no era mentira ya que ciertamente caminar antes de sus entrenamientos lo ayudaba pero en realidad prefería hacerlo por otros motivos.

El camino hasta el edificio era un poco largo pero aun así se desvío como cada vez, yendo a la izquierda en lugar de seguir recto por la avenida para detenerse en una conocida casa blanca con demasiadas plantas y flores en el jardín, donde un chico pelirrojo más bajito que él pero mayor en edad lo esperaba.

—¿Ya tienes tus cosas?— Pregunto el menor asustando un poco a Doyoung que no había notado su llegada al estar jugando en su celular. Doyoung era su novio y el castaño no podía decirlo sin que sus mejillas se pintasen de rojo, sintiéndose tímido y feliz como cada vez que pasaba a recoger al mayor para acompañarlo hasta sus clases de baile y este lo saludaba con un pequeño beso en los labios.

—¿Por qué sigues siendo cada vez más alto?— Pregunto el pelirrojo mientras caminaban tomados de la mano, últimamente siempre solía quejarse de como era mayor que Junghwan pero mucho más bajito y delgado que este —Soy tu Hyung, no debería parecer tu hermanito menor— Siguió quejándose Doyoung sin notar que ya habían llegado hasta el gran edificio en el cual veía sus clases de baile.

—Bueno Hyung, ya llegamos— Comentó el castaño no queriendo soltar el agarre de sus dedos que seguían entrelazados.

—Estamos aquí— El mayor tampoco quería separarse realmente, jugando con la gran mano de Junghwan mientras tarareaba cualquier melodía que se le ocurriese —Creo haberte dicho que hoy salgo temprano— Comento el pelirrojo mirándose las uñas, haciendo reír al más alto que dejo algunas palmaditas en su cabeza.

—Sip, lo recuerdo perfectamente— Junghwan sabia perfectamente por donde iba su novio.

—Bueno, ¿Qué esperas?

—¿Qué espero?

—Anda, invítame a una cita después de mis clases.

—Mmmmm, no lo se, quizá deba-

—No tienes absolutamente nada que hacer después de tu entrenamiento— Lo interrumpió el mayor con una sonrisa burlona.

—¿Te gustaría ir a una cita después de clases?— Preguntó el castaño con las mejillas ruborizadas y una pequeña sonrisa tímida.

—Completamente adorable ¿Por qué eres tan grande si sigues siendo un bebé?— Pregunto Doyoung colgándose del cuello de su novio y poniéndose un poco de puntillas para dejar un besito en sus labios.