Frio y calor

XIV

Al llegar a casa lo primero que hizo Chile fue ir a sentarse en el sofá y dar un suspiro agotador, mientras que el europeo se fue detrás del sofá y abrazarlo por el cuello, apegando su mejilla con la del pequeño.

—¿No te llevas bien con tus hermanos?—

—Los conozco desde toda mi vida, ¿Por qué no me llevaría bien con ellos?—

—Porque te vez agotado y un poco estresado después de estar casi una semana con ellos—

—(No puede ser tan estúpido) Ese no es el problema, el problema eres tu...—

—¿Yo?... ¿Y yo que hice?—

—Y preguntas más encima...—

Se llevo una mano en la cara de forma molesta, el ruso solamente se quedo pensando un poco, mientras que se apegaba a él.

—No, no entiendo a que te refieres ¿Qué hice mal?—

—Primero que nada, aléjate de mi, segundo esto ya te lo habia dicho antes, pero parece que eres tonto y tercero con solo tenerte cerca me estresas...—

—...—

—Lo único que quiero ahora es estar solo y relajarme—

—Si quieres te ayudo a relajarte~—

—(Dios dame paciencia...)Ha eso me refiero cuando digo que eres un tonto, imbécil y entre otras cosas más que quiero decirte—

—¿No te gusta esas clases de juegos que nos damos a veces?—

—¿Son juegos o clases de Kamasutra?—

—Ahora que lo dices tienes razón... ¿Y si compramos ese libro?—

—...—

Lo miro mal para luego darle un cabezazo y levantarse para irse a la habitación, el ruso se quedo tocando su cabeza un poco adolorido se fue a sentar en el sofá dando un suspiro enamorado. 

—Me gusta cuando se hace el difícil~—

En la noche Chile estaba acostado en la cama apunto de dormir, pero el ruso se habia acostado a al lado de el, mientras que ponía sus manos debajo de su pijama tocando su abdomen, ya molesto se giro un poco para regañarlo.

—¡Ugh! ¿Podrías dejarme dormir en paz una noche? ¡Y quitas tus manos de mi!—

—Al fin estamos en casa ¿No quieres divertirte un poco?—

—("Divertirnos" mi culo) No queras terminar en el hospital otra vez ¿Oh si? ¡Mmmm...!—

Rusia le había besado inesperadamente, trato de alejarse de él, pero era inútil, noto como se le apegaba aun más hasta el punto que invadió su cavidad bucal con su lengua, soltando un pequeño jadeo, habia bajado los beso hasta su cuello molestándolo aun más.

—Haa... ¡Quítate...!—

—Déjame hacerlo... Solo una vez ¿Por favor?—

—¿Crees que caeré en ese truco otra vez?—

Se alejo de su cuello para luego mirarlo a los ojos, el chileno tenia un leve sonrojo en su rostro aumentando un más su deseo.

—Estaré ocupado por el trabajo a partir de mañana, así que ya no tendré tiempo para jugar contigo... Vamos hagámoslo—

—(¿Acaso a eso lo ha llamado "Jugar"?)—

—Estaré muy ocupado por un tiempo ¿No podrías solamente cooperar?—

Llevo su mano a la entrepierna del chileno quien soltó un leve jadeo, llevo sus manos al cabello del ruso para tirarlo un poco.

—¡Que te jodan!—

—Vamos se que quieres~—

Quito las manos del chileno de su cabello y se acerco al rostro de este para lamerle la mejilla, escuchando un chillido de su parte.

—¡Ya para!... Bien ganas, pero solo sera una vez...—

—...—

Luego de un rato se encontraba embistiendo al chileno en la típica posición del misionero, este daba gemidos altos y excitante para el por lo que aumentaba aun más sus embestidas, sus cuerpos se encontraban perlados por el sudor al igual que uno que otro fluido, unos minutos más tarde ya cansado de la posición lo dejo en cuatro sin detener sus estocadas, ya iban en la tercera ronda. 

—Me dijiste... ¡Que solo iba hacer una vez!—

—Hmm... ¿Dije algo asi?—

Les dejo algunas marcas en la espalda al igual que dejarles unos caminos de besos.

—Entonces... Haa... ¡Ya es suficiente detente!... D-Duele un poco...—

—Aguanta cariño~—

Su cuerpo se estremeció al sentir la esencia del ruso en su interior, mordió la almohada para callar sus gemidos... En la madrugada el chileno ya se habia dormido, mientras que Rusia se encontraba acariciando su pelo mientras que lo observaba dormir.

—(Duerme tan plácidamente, aun que ahora tiene una buena razón para estar cansado... Después de todas esas rondas no seria una sorpresa)—

—Mmm... Para—

Lo miro un poco sorprendido para luego sonreír satisfactoriamente, le acaricio el rostro mientras que se acercaba a él.

—(¿Acaso sigue en el sueño?... Su cara esta roja...)—

El chileno lo abrazo por sorpresa y el lo aprovecho para acurrucarse y darle un pequeño beso en la frente.

—(Podría acostumbrarme a esto... El es suavecito...)—

Al paso de unas semanas el ruso habia estado trabajando demasiado por lo que por suerte dormía en la cama y pasaba tiempo con el chileno, quien habia estado bien durante esas semanas, pero a la vez se sentía extraño al no tenerlo cerca, ahora estaba con sus hermanos en la cafeteria y a lo lejos veía la mesa donde estaba el ruso trabajando.

—(Realmente no mentía cuando dijo que estaría muy ocupado, él... Ha estado trabajando muy duro)—

No le quitaba la miraba de encima por lo que parecía un depredador cuidando de su presa, por asi decirlo. En la noche se paseaba un poco por la casa de manera aburrida por lo que paso por la oficina del ruso para echarle un vistazo.

—Me iré a dormir—

—Bien... Buenas noches cariño—

—(Es raro verlo tranquilo)...—

Se fue acostar para luego darse unas vueltas en la cama de manera intranquila para después de unos minutos quedarse dormido.

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Bueno, no quedo tan Hmm, ya saben "bien", pero ahora mismo me la suda... Saludos a todos...