Vulnerable

Capitulo 8.

Cuando la señora termino de darme los datos del Hospital, me dirigí rápidamente hacia allá, tenía miedo, puesto que tenía la mala inquietud de que Liam estuviera allí por la misma persona que él había visto aquel día del otro lado de la calle, la misma de la  grabación, la misma persona de la que casi estaba segura que había puesto aquello en mi puerta.

No estaba segura de que le haya pasado algo grave a Liam, porque aún no sabía casi nada de lo que le sucedió, pero,  muy en el fondo de mí, algo me decía que era sumamente malo.

Entre al Centro de Salud a paso rápido, sentía como mis ojos ardían, Liam me importaba, como cualquier otro niño del Orfanato. Pregunte en recepción, me dieron el número de habitación y piso, tome el elevador y mis ansias crecieron.

Al llegar en aquel pasillo divise a la Sra. Green saliendo de la que suponía era la habitación de Liam, lucia cansada. Apenas tuvimos una distancia adecuada la abrace y contuve mis lágrimas lo más que pude, al separarnos veía como los ojos de la Sra. Green comenzaban a estar acuosos.

-Lo lamento Carolyn, olvide avisarte y…

-No se preocupe la entiendo.- le corte.- tiene muchas cosas en su cabeza. Comprendo.- le di una minúscula sonrisa.- ¿Cómo esta Liam?

-Es mejor que lo veas por ti misma.- asintió en dirección a la habitación.

Me moví lentamente, cuando estuve frente a la puerta y tome el picaporte, creció el sentimiento de que no me iba a agradar nada de lo que vería dentro. Tome valor  y abrí.

Al entrar, mire a un muy pequeño niño, con una espantosa bata blanca que suelen poner en los hospitales, una muy pálida piel,  moretones en un brazo, el otro vendado, y aún más moretones en la cara. Estaba dormido.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, de nuevo, pero esta vez si las deje salir.

 Liam se veía fatal, no me gustaba verlo así, es decir ¿a quién le gustaría ver a un niño de 7 años con moretones en la mayor  parte de su cuerpo?

-Fue mi culpa, lo lamento, enserio lo siento.- la voz de la Sr. Green me saco de mis pensamientos, me volví hacia ella y me acerque al marco de la puerta, donde ella se encontraba.

-¿Por qué dice eso?- le mire con desconfianza,entre cerrando mis ojos. La Sra. Green trago saliva y suspiro cansadamente, cerró la puerta tras ella y se acercó  más a mí.

-Porque no supervise adecuadamente, deje que ellos salieran y no me di cuenta y…-la Sra. Green comenzó a llorar.

-Solo trate de tranquilizarse y explíqueme por favor que fue lo que sucedió.

Tomo aire.- Era el sábado en la noche, yo ya estaba en mi habitación acostada, cuando inesperadamente, llego Connor, su amigo, repetía el nombre de Liam una y otra vez, no sabía que le sucedía, trate de tranquilizarlo, pero lo único que hacía era jalarme el pijama hacia una dirección, le seguí, me condujo hacia fuera, no tenía idea que estaban afuera, ni siquiera sé cómo lograron salir. El punto es que, me llevo a la parte trasera del edificio, allí estaba Liam, con moretones en su cara, brazos, piernas, con la nariz sangrando, demasiados raspones y un brazo roto.- relato entre sollozos.

Quede en Shock. Las lágrimas no paraban de salir.

-¿Lla-llamo a la policía?- logre preguntar.

-Sí, están tratando de buscar pistas, pero al parecer no hay rastro, ya trataron de hablar con Liam pero él se niega a hablar.

-¿Y el otro niño, Connor?

-Igual, ninguno de los dos ha hablado, ya no sé qué hacer, y los demás niños lo único que me dijeron fue que los miraron salir como cada noche fuera del edificio. Me siento pésima, culpable, debí de haber tenido más precauciones. Pero estaba segura de haber cerrado todo con llave, no sé cómo lograron salir.