JUGUEMOS CORAZON.

¿fiesta?... sobre mi cadaver

Termino de verla irse y los chicos se van poco después tras ella, no veo que pasa después, seguramente la alcanzaron y la subieron al coche para que se revolqué con ellos en algún motel, termino por desprenderme de la ventana y voy a cocinar mientras se va acercando la noche, oigo el coche de nuevo, ya no es hora para que se metan en propiedad privada, pero veo que dejan a la chica en la casa del lado, apagan el motor y ella abre la puerta para entrar con ellos, desde la cocina veo como ella enciende las luces de esa casa, como ella va iluminando todo

"imposible"

cruza por mi mente, esta villa es sola, las casas no están siendo usadas eso me dijo Mario, debe ser que el conserje le dio la llave.

Más autos llegan, ¿acaso será una reunión de adolescentes?, pero ¿aquí?, en una villa privada, las dudas se disipan cuando veo más chicos llegar, alcohol bajar, chicas pocamente vestidas y chicos con ellas, si va ser una fiesta, pero sobre mi cadáver, ese estúpido conserje perdió su trabajo hoy.

Busco mi teléfono para llamar al conserje, al fin lo hayo y busco entre los contactos el número que me dio Mario en caso de que no encontrara la villa.

Hola buenas noches- digo apenas el hombre contesta.

Hola muy buenas noches ¿con quien hablo?- me dice la voz fuerte de un hombre que no debe tener ni 40 años.

Si amigo-le digo- controla a tu zorrita, no se si es tu hija o tu novia pero esta haciendo la fiesta del siglo...

Dejala.

su voz no me deja terminar de hablar-si valoras tu vida, no la molestes.

Cuando termina de decirme eso, me cuelga, intento llamarlo de nuevo, pero no me contesta, miro por la ventana y los 10 chicos que habían hace unos minutos se convirtió en más de 50, es una locura, salgo de la casa y voy hasta donde está la chica conversando muy a gusto.

Oye-le digo tomándola del brazo, al girarla veo que soltó el cabello de repente veo que subió de edad, su imagen me desconcentra por un segundo, pero recupero la cordura- ¿Qué crees que haces en esta casa?

Dos cosas- me dice soltándose el brazo-uno suéltame y dos ponte una camisa.

Solo ahy me doy cuenta que por salir rápido olvide vestirme, - no me cambies el tema- le grito- ¿qué haces en esta casa?

Es mia- me responde cruzándose de brazos- hago lo que me da la gana con ella- ahh y no me digas zorrita, porque tengo nombre.

¿Tú Cómo?...

Que, el conserje me lo dijo, acaba de llamarme a decirme que me dijiste zorrita-me dice mientras sus amigos cuchichean detrás de ella.

Eso eres- le digo amenazante- ¿te acuestas con cuantos para que creas que esta villa es tuya?, mínimo el conserje para que haga la vista gorda, y con los chicos para que traigan a sus amigos, pero no eres más que una zorra.

Murmullos se escuchan, otros alaridos de sorpresa, seguramente nadie la había dicho eso de frente, y ahora el comentario letal
¿Cuánto me pides por una noche?

Sus ojos se abren como platos y todos se sorprenden, veo a algunos que se preparan para golpearme, mientras otros los detienen.

Cuida tu lengua- me dice con su mirada de veneno- no sea que mañana amanezca morada.