Solo una copia

Capítulo 6

-Tu muerte será indolora y rápida o un infierno y lenta, todo depende de que tanto hables – le dije al prisionero mientras dejaba salir todo mi instinto asesino.

Él habló, sí, pero el miedo que me tenía era menor al de aquel que es su líder, por eso me demore más de lo que me imagine, haber arrancado uñas con solo fuerza bruta no fue algo que me gustara, cortar los dedos tampoco fue algo que me divirtiera, pero incluso cuando sentí que la poca humanidad que había en mi se iba recordé porque pedí hacer esto, para este punto quería pensar que era porque desde la perspectiva de otra persona iba a ser un héroe mientras era un monstruo, egoísta, sí, hipócrita, mucho, aun así, era mi decisión y n la cambiaría.

- ¿Quién es tu líder? – esa era mi última pregunta, lo último que me quedaba por saber, todo lo demás ya había sido respondido o no tenía relevancia.

-Si respondo acabarás rápido.

-Si lo que dices siento que es una mentira, no, pero si es la verdad lo terminaré con de manera instantánea.

-Es el padre de esa niña que rescataste.

Eso había sido verdad, tenía que admitir que poder sentir las emociones negativas gracias a la habilidad del kyubi era una gran ayuda, pero en este momento, la falta de ellas me demostró que sus palabras eran la absoluta verdad, así que el único cuyas emociones negativas estaban saliendo a flote eran las mías, sin embargo, cumplí mi promesa, con solo tocar su frente lo maté, el método Hyuga era aterrador, siempre y cuando logrará golpear al oponente, guarde el cuerpo dentro de un sello de almacenamiento para cadáveres que cree ahí mismo.

Quería explotar, destruir todo lo que se encontrará delante de mí, también quería simplemente sentarme en una esquina y maldecir todo lo que hice, no me gustaba torturar, no me parece algo que no soy capaz de hacer de manera constante, no sin ser yo alguien quien termine rompiéndose junto al torturado, tal vez de manera psicológica no reciba el golpe, pero prefiero no pensar en ello, no en este momento, tengo que mantener la calma, mantener la cabeza fría y no enloquecer.

- ¿Qué obtuviste Menma-kun? – sensei pregunto con un tono preocupado, al parecer mis ojos gritan que quiero gritar.

-El grupo de bandidos se esconden dentro del territorio del país de la cascada, no cuentan con ninjas dentro de su grupo y su líder es el padre de Silvie – eso último no fue más que un susurro.

-Entiendo ¿quieres hablar sobre lo que ocurrió?

Ella estaba enojado, podía sentir como intentaba reprimir sus emociones, pero ella también sabía que ese era mi caso, agradecí que mis compañeros no estuvieran presentes, pues delante de mi maestra me desmorone como si fuera un niño pequeño, fue tan liberador que me pregunte el porque no lloré antes, porque no me queje antes, aun así, las emociones negativas seguían dentro de mí, simplemente me estaba liberando de algo que acababa de suceder, tal vez si Rin no se encontrará abrazándome como creía que lo haría una madre habría recurrido a Hanabi, si algo quedó claro con los años que pasamos en la academia es que soy un libro abierto para ella.

-Ya estoy mejor sensei.

- ¿Estás seguro? – ella pregunto, su mano sobre mi cabeza.

-Sí, además, hay cosas que hacer.

-Tienes razón, lo primero será hablar con alguien de Taki para que no tomen nuestro acercamiento como uno agresivo.

-Creo que podemos encontrar un equipo cerca – dije recordando aquellas presencias que solo emitían emociones negativas.

-Lo sé, pero tú necesitas descansar, ahora ve y cuida a Silvie, deja que tus compañeros y yo nos encarguemos de lo que viene.

-Entendido.