Capítulo 10

67 12 0
                                    

No sabía como actuar en este momento, había salido de la casa porque ese niño se había vuelto insoportable con el asunto de morir, no iba a repetirme ni tampoco a soportar su insistencia, así que hice que subí al cuarto para luego saltar por la ventana, pase toda la noche entrenando por mi cuenta, combatiendo de manera mental contra un oponente que no se encontraba aquí, pero cuya fuerza podría ser superior a la de un jounin, en cada intento falle, cada plan que creí que podría funcionar era contrarrestado con facilidad y antes de que me diera cuenta, termine dormido en el claro del bosque en el que me encontraba.

El problema, bueno, la presencia a la que le había lanzado el kunai antes de que Zabuza apareciera se encontraba acercándose hacia mí, el hecho de que se tratara de alguien con la habilidad necesaria para tener la velocidad de un anbu era un problema, saque un kunai de mi bolsa a medida que sentía que se acercaba, sus intenciones de repente cambiaron, las emociones negativas se disiparon y eso me dejo confundido, por eso, cuando me toco el hombro y comenzó a moverme para despertarme, algo ante lo que no fui capaz de pensar.

-Te resfriarás si te quedas ahí - dijo con tono suave, no era capaz de discernir si se trataba de un chico o una chica.

- ¿Eh? ¿Ya es de día? - pregunte haciéndome el tonto mientras bostezaba y me frotaba los ojos - ¿Quién eres?

-Mi nombre es Haku - él-ella contesto, todavía no estaba seguro de su género, aunque por su apariencia podría decir que es mujer - ¿Qué hacías aquí durmiendo?

-Estaba entrenando - respondí con la verdad, no tenía sentido mentir en este momento, aunque me sentía curioso ¿por qué no me atacó?

-Pareces fuerte ¿por qué entrenas? - su pregunta me confundió ¿a qué quería llegar?

-Hay alguien a quien quiero superar y personas a las que quiero proteger.

-Concordamos en algo - dijo con tono tranquilo mientras comenzaba a recoger algunas plantas - considero que la verdadera fuerza nace cuando se quiere proteger a alguien importante.

No pude evitar darle la razón, no es como si hubiera peleado por ese motivo hasta ahora, pero lo que dijo es algo que no puedo negar, después de todo, yo mismo lo dije, prefiero la vida de mis compañeros sobre la mía, ya que decir sobre la de mi familia, eso último me hizo pensar, él es parte de mi familia, me odia, lo sé, aun así, tengo el presentimiento de que, por alguna razón me protegería, tal vez sea solo una tontería de mi parte, lo único que sé, es que como él es el mayor, la copia sería yo, en cuyo caso, esta bien que el débil sea yo.

Su nombre era Haku y estuvimos conversando durante varias horas, algunas cosas sin mucho peso, otras de importancia para ambos, pero sin decir algo de manera directa, ambos sabíamos que éramos enemigos, que tendríamos que pelear, sin embargo, no pude evitar verlo como un amigo, si, descubrí que es un chico, tenía que sus facciones eran demasiado femeninas y el hecho de que vistiera un kimono de mujer no ayudaba, pero bueno, eso era lo de menos.

-Sabes Haku-san - dije con tono calmado mientras apuntaba un kunai a su cuello - me hubiera gustado pelear contra ti como amigos, pero eso no podrá ser.

-Lo mismo digo Naruto-kun - una aguja de hielo apuntaba a mi cuello - no creo que si te pido que se vayan los hagan ¿verdad?

-No podemos hacer eso y lo sabes - respondí retirando mi arma y guardándola - somos shinobi, nos pagaron por esta misión y la vamos a cumplir, al igual que tú y Zabuza rinden cuentas a su empleador.

-Entiendo - la aguja de hielo se disolvió en agua, dando a entender que esto sería solo una conversación - solo espero que no guardes rencor cuando alguno de tus compañeros muera.

Solo una copiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora