Capítulo 5

293 60 3
                                    


[Krist]
Estábamos teniendo una agradable conversación cuando Nam alza el brazo derecho llamando a alguien. Dirigí mi vista hacia el frente y me encontré con un Singto acercándose a toda velocidad; seguía viéndose formal pero algo desaliñado, ¿acaso llegó corriendo?

Su cabello revuelto, su corbata floja y unas cuantas gotas de sudor escurrían por su frente.

Sentí un escalofrío recorrer mi espalda.

— ¿Pero qué te pasó? —Nam parecía preocupada, acomodó su corbata y peinó su cabello con sus dedos.

—Tuve varias juntas hoy, además mucho tráfico —le respondió ignorándome por completo, yo solo los observaba sin saber qué hacer o decir, contemplando los cuidados que mi amiga le daba a mi jefe.

—Te dije que no era necesario que vinieras por mí.

—Yo también te dije que tenía hambre y el lugar me quedaba cerca.

El mesero pidió su orden, nuevamente una comida balanceada.

— ¿Pero qué estás comiendo Namtan? Solo fideos, ¿enserio? —la regañaba como un hermano mayor, yo solo tomé mi soda.

—P'~, no me reprendas. Siempre como sano, solo que hoy decidí comer un poco de comida chatarra — ella también actuaba como hermana menor.

¿Estoy viendo una discusión entre hermanos? No hay nada de jefe o amiga aquí.

Me hizo darme cuenta de su cercanía... Y de lo difícil que será mi vida si quiero andar con Nam en un futuro.

—Sé que te molesta porque te preocupas por mí y me quieres, que si no fuera por eso no te molestarías por mí alimentación, pero no voy a morir por comer así de vez en cuando y tú tampoco —extendió su cuchara pretendiendo alimentarlo pero él no se dejó.

... Espera, ella dijo que si no se preocupara no le molestaría lo que coma... Entonces cuando me obligó a comer lo mismo que él es porque ¿le importo?

Curiosamente hoy decidí comer Tom Yum Goong (sopa picante de camarones y setas)

—Me alegra que al menos alguien aquí esté comiendo un poco sanó, aunque deberías bajarle un poco al picante y cambiar esa gaseosa por una agua mineral Sr. Perawat— dijo en forma de regaño pero más ligero que a Nam.

—Y por qué regañas a Kit, acaso él también te importa— preguntó Nam haciendo que me atragantara con la sopa.

Ambos me extendieron una servilleta para limpiarme, no sabía cuál debía tomar por lo que mi indecisión hizo que Singto se acercara a limpiarme, rápidamente tome la servilleta con la que me estaba limpiando Singto y me aleje un poco para limpiarme por mí mismo.

Afortunadamente llegó la comida de Singto así que continuamos comiendo tranquilamente.

Terminando de comer, Singto fue al estacionamiento por el auto en lo que Nam iba al baño, nos indicó que esperáramos en la entrada principal de la plaza.

Nam salió del baño y nos dirigimos a dónde índico Singto.

—Gracias Kit, me divertí mucho, lamento que Sing interrumpiera nuestra cita, pudimos haber pasado más tiempo juntos— me dijo eso con un pequeño sonrojo en sus mejillas.

—Yo también me divertí y no te preocupes podemos vernos otro día— acomode un pequeño mechón de cabello que tenía en su cara.

*Claxon*

—Nam vámonos— gritó Singto desde su auto.

—Vamos Kit, te llevamos a tu casa.

—No te preocupes, no quiero causarte molestias.

Un amor inesperado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora