Hora Dorada (Omegaverse)

Capitulo 6

-Entonces tienes a tu amante esperando en casa?- pregunto indiscretamente mi maquillista.

La gente que estaba en el lugar volteó a esperar mi respuesta y me sentí incómodo. Mi vida no era algo que contaba en el trabajo, no contaba con amistades en ese lugar y estas preguntas no eran habituales, pero sabía que el hecho de que mis parejas de una noche empezaran a desaparecer poco a poco desde hace dos meses, llamaría la atención.

-Si lo tengo o no, no es un tema que vaya a decir abiertamente- fruncí el ceño y los demás disimuladamente regresaron a su trabajo, pero sentía aun su atención en mi.

-Aun así los rumores ya son fuertes, no seria más fácil presentar a la omega?

-Que? Porque supones que es omega?

-Pues... - se avergonzó- recientemente tienes el aroma de un omega mezclado con el tuyo... así que pensamos.

Yo tengo el aroma de Kuroko? No lo había percibido, supongo que es normal al vivir juntos, pero no debería ser tan fácil de percibir para los demás, no estamos en contacto tanto tiempo... Tome mi chaqueta y trate de percibir el aroma y efectivamente, estaban mezclados el olor a moras y el mío, pero desde cuando?

-Parecer sorprendido- hablo mi mánager que venia llegando.

-De que hablas?

-Todos sabemos de tu pareja, menos tu?- entendía que el reclamo venía por el hecho de decirle que no era nada especial y ahora parecer que le había mentido.

-No es así... él es...

-Es un chico?-  el grito de nuevo alerto a los demás.

-Están malinterpretando todo!

-Kise, si un omega marca a un alpha, es claro que es tu pareja... aunque no pensaba que te fueran los chicos...- intervino otra chica que creo era la de vestimenta.

-O talvez esta marcando territorio- dijo la maquillista despreocupada.

Kuroko? Pero si yo no le interesó...

Aunque tampoco es que le preguntara como se siente hacía a mi actualmente. Le he reclamado de muchas cosas, pero... que pasa con nosotros ahora? Es más porque ha aceptado todo lo que le he pedido y si ya le perdone... él solo se quedo por mi petición? Él iría a buscar a otro de los chicos, si yo no hubiera ofrecido mi casa?

Iba a llamarle, mi curiosidad empezó a crearme ansiedad y no me sentía cómodo, pero otra llamada interrumpió mis planes. La gente a mi alrededor se alejo al instante de mí y entendía el porque...

Mi enfadó era brutal en ese momento.

-No pensé que tuvieras el descaro de llamarme- hablé apenas había contestado la llamada.

-Veo que sigues con rencor Kise... lástima que no volveremos a jugar, me encantaría volverte a ver desesperado ganando un partido.

-Si solo llamas para eso, colgaré.

-Claro que no idiota... debes tener sospechas de porque llamo.

-Si hablas de Kuroko, no te diré nada.

-No es necesario, ya se empezó a correr el rumor de que eres el próximo alpha en mira.

-Que? De que hablas?

-Akashi nos contacto. Sabemos que viste a Kuroko el día de la reunión y desde entonces no los vemos a ambos. Debiste ser más cuidadoso si querías protegerlo.

-Si claro... y que debía decirle? Que no lo necesito y botarlo? Como tu?

-Tu no sabes una mierda! No te metas en temas que no te importan.

-Kuroko me lo contó, así que de alguna manera me involucra.

-No discutiré contigo, por esa mierda... solo llame para decirte que se tienen que presentar con Akashi el fin de semana.

-Es claro que no iremos. Su padre es parte de altos mandos del gobierno.

-Si no lo quieres poner en más peligro, más te vale hacerlo- me amenazó.

-Que harán ustedes para protegerlo mejor? Él esta bien ahora.

-El llama demasiado la atención! Si sigue pidiendo empleo en cualquier lado, no dudes que vamos a perderlo todos! Así que olvida tus celos y solo tráelo.

-En cualquier lado? En serio lo tienen vigilado?

-Akashi no ha perdido el interés en nosotros, todos seguimos bajo su vigilancia.

-Es una locura.

-No le hará daño y todos... merecemos vernos de nuevo.

-Él se ve bastante dolido cuando hablamos de ustedes. No hables por Kuroko, si los únicos beneficiados serán todos menos él.

-Tu no eres mejor que nosotros... también lo quieres para ti no?

-La diferencia es que él me busco por voluntad.

-Solo llévalo a la reunión- contesto después de un largo silencio y después colgó.

Ahora mi día había empeorado el doble. Con lo enojado que estaba  no creí buena idea hablar con Kuroko, dejaría la política para cuando llegara a casa.

Me concentré en el trabajo y deje mi mente en blanco, estaba algo disperso, pero cumplí mi parte como modelo, pero la gente notaba mi mal humor y me evitaba, si no tenía que ver con trabajo.

Agradecí la consideración y apenas acabo el trabajo, corrí a casa. Escuche a varias personas tratar de detenerme y a mi manager que seguramente querría hablar de Kuroko, pero justo ahora, solo quería hablar con una persona.

Llegando al departamento, no tarde mucho en encontrarlo. Estaba sentado en el comedor con un pequeño botiquín. Me acerque cautelosamente para no asustarle, pero cuando vi su mejilla golpeada, no controle mis feromonas y le asuste de todas formas.

-Kise?

-Que te paso?- lo tome de la barbilla para que no escondiera su herida.

-No es nada importante.

-Esa no fue la pregunta- mi voz se volvió más amenazante.

-Fue en un restaurante donde fui a pedir trabajo, querían que les diera algo a cambio de que me contratarán... y al negarme me golpearon- su voz se iba haciendo casi nula mientras contaba la historia.

-Porque no me dijiste?- fruncí el ceño.

Tome una silla y la jale para quedar a su lado. Le quite las cosas que iba a usar para limpiar su herida y empecé a curarlo.

-No es tan importante, son cosas que pasan.

-No! Esto no debería ocurrir- tenía un humor de los perros, definitivamente no era mi día- mañana iremos a ese local y pondremos una denuncia porque..

-Tranquilo...- al sentir sus manos sobre las mías, me percate que estaba temblando del enojo.

Trate de respirar para relajarme. No quería enojarme a ese grado... solo, ver que le habían hecho daño me enojó sacándome de mí.  Aun seguía el deseo de protegerlo y estaba haciendo un pésimo trabajo.

-Siento asustarte.

-Esta bien, aunque estas tan enojado que ni siquiera puedes ocultarlo.- sonrió y enredo un poco sus dedos con los míos.

-Pasaron varias cosas.

-Ah si? Del trabajo?- el verlo tan tranquilo y relajado, me daba escalofríos tener que arruinar su paz por un jodido berrinche.

-Akashi quiere vernos...

Su rostro de miedo reflejo todo lo que no quería en él, pero ambos lo sabíamos... los deseos de ese emperador, eran absolutos.