Capitulo 18

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-Tengo los nervios de punta, esto es horrible...

-Calma Kise, él esta bien- me apoyaba Aomine sentado a mi lado.

-Lleva demasiado tiempo ahí.

-Esta dando a luz, es claro que va a tardar.

-Pero Midorima dijo...

-Aseguro que todo estaría bien, así que relajate... Momo ya esta en camino también, así que por ropa y esas cosas tranquilo.

-Gracias, la verdad me tomo por sorpresa.

-Si, escucharte gritar a las tres de la mañana no fue fácil...

-Fue el pánico, esperábamos el parto para la siguiente semana.

-Esta bien, me alegra que contaras conmigo

-Ya ha pasado, dejemoslo en el pasado

-Si, sería ideal.

-Chicos...- llego Momo con unas bolsas, que me entrego de inmediato.

-Hola- saludaron.

-Hay noticias?

-Todavía no...

-Bueno, ya les avise a los demás.

-Gracias- dije ya mas relajado.

Estuvieron hablando casi una hora, pero yo realmente no prestaba atención a lo que sucedía. Solo quería saber de su pareja, pero estaba relajado, ya que nuestro vínculo se mantenía estable.

-Kise Ryota?- me llamo una enfermera.

-Si, soy yo- me levantó rápido.

-Si pareja esta estable y los niños también. Felicidades- sonrió tranquila.

-Puedo verlos?

-Los niños los están revisando, pero ya puede pasar a ver a su omega.

Voltee a ver a mis amigos y ambos asintieron. Acepte y segui a la enfermera para ver al pequeño peliazul

-Los dejo para que puedan hablar, en un momento traemos a sus bebés.

-Gracias.

Entre y vi a Kuroko adormilado, pero parecía querer resistir al sueño. Sonreí y me acerque, dejando notar mi presencia, que logro despertarlo.

-Como estas cariño?

-Mejor que cuando me trajiste.

-Claro y con dos niños menos- Me senté a la orilla de la cama y junte nuestras  manos tratando de protegerlo.

-Los has visto?

-Todavía no...

-Son hermosos- sonrió.

-En serio? Seguro se parecen a ti.

-Aah... definitivamente no- puso sus ojos en blanco.

-No?- me sorprendió.

-Son iguales a ti- suspiro- aun no he visto sus ojos... pero son una copia tuya.

-Bueno... talvez para el próximo se parezca a ti.

Sinti un pellizco en mi mano, provocándome un quejido y reí al ver el puchero de Tetsu.

-Ni se te ocurra, embarazate tú

-No funciona así Tetsu...

-Pues tendrás que aguantar, porque suficiente será con dos niños al mismo tiempo.

-Ambos son niños?- se sorprendió.

-Gemelos...

-Deseaba una niña.

-Lo que fueran, estoy contento de que estén bien

-Yo igual... gracias por todo, por darme una familia y estar a mi lado.

-No soy yo quien debería decir eso?

-No, bueno... puedes decirlo, pero no cambia nada.

-Ah... bien, me alegro que estés a mi lado.

-También yo...

-Permiso- regreso la enfermera- traigo a sus cachorros.

Me levanté enseguida y me acerque a ella. Me entrego a un bebé y el otro se lo dio a Tetsu.

La manta tapaba un poco el rostro de mi cachorro, lo destape un poco y note sus pocos cabellos rubios, era como había dicho Tetsu, era muy parecido a mi.

Escuche el suspiro de Tetsu y voltee a verlo. Notando como veía a él bebé. El niño reía y sus manitas se aferraban a la mano del omega.

-Sucede algo?

-Tiene tus ojos... es una copia tuya- abrazo al niño- pero es hermoso.

Volteé a mi propio bebé que tenía en brazos y me sorprendí al ver sus ojos azules. Me acerque para ver al otro bebé y él tenia mis ojos ámbar, así que ese era el único rasgo de Kuroko y solo en uno de sus hijos.

-Tetsu...- susurre emocionado.

-Mmh- estaba distraído con su cachorro.

-Mira...- me senté de nuevo a su lado, abrazandolo por la espalda con una mano y con la otra cubriendo a mi bebé.

-Que cosa?

-Ve los ojos del bebé...

Con curiosidad destapo el rostro del bebé y sus ojos se iluminaron, sonrió enternecido y beso las mejillas del cachorro. Se asustó al notar el quejido de su otro bebé, pero no se altero, dejo salir sus feromonas y ambos bebés se adormilaron.

-Son hermosos, los adoro- se acurrucó a mi lado.

-Lo son...

-Hay que ponerles nombre.

-Ya tienes él tuyo?

-Si y tu?

-También...

-Bien, es justo que cada uno le ponga el nombre a uno.

-Vale, él se llamara Reda...- susurro antes de besar la mejilla de su bebé- el favor de los dioses.

-Y él Kazuya... pacifico...

-Me encantan...

-Aah... por fin puedo respirar, ahora que ya los tengo entre mis brazos.

-Te asustaste?

-Claro que si! No me oíste gritar?

-Estaba concentrado en dar a luz...

-Claro. Bueno, ahora solo me queda una cosa por hacer

-Ah si? Que cosa?

-Casarme con un omega increíble...

Si... su familia es increíble.

Hora Dorada (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora