-El amor no es lo mio.
Dijo la niña de la luna sentada sobre su muro.
-Prefiero verlo a traves de mis libros, ahí no duele, aquí en el mundo lo prefiero lo mas lejos posible.
El hombre de las Estaciones sonrió con tristeza.
-Pequeña, el amor siempre encuentra la manera, no creas lo que dicen las historias, no es un angel regordete con un arco, es un asesino y de los mejores, corre por los tejados y burla las barreras siempre listo para asestar su venenosa puñalada cuando menos te lo esperes.
Alzó la vista y la miró a los ojos.
-Un dia tú nombre estará su lista y no habrá muro lo suficientemente grande ni libro suficientemente desalentador que lo detenga.
-Si mis defensas caen hare lo que siempre hago, correré tan rapido como la luz.
-Hasta la luz puede ser tragada.
-Eso hacen los agujeros negros, no el amor.
-Tu tampoco corres como la luz, solo la reflejas niña de la luna.
Intercambiaron miradas un momento hasta que ella llevo sus ojos a pasear al cielo.
-No quiero ser destruida...
Dijo
-Ademas ni tu tienes un corazón abierto ni yo un alma organizada.
-Pero el reloj de arena corre pequeña, y aunque marque las mismas horas a través de muchas vidas nunca sus granos de arena caeran de la misma forma.
-¿Y es que acaso no puedo decidir? ¿También me será arrebatado eso?
-Nadie te quitará tu libre albedrío, no es algo que divierta al destino. El solo juega cruelmente, como el niño que encierra una hormiga en un anillo de agua, ella aún es capaz de decidir si correr por el espacio al que ha sido confinada ó lanzarse al agua y morir.
-El destino es un mito y el amor no llegará, cuando lo haga prefiero morir intentando llegar a la seguridad.
-Nada con ellos es tan fácil pequeña.
-Veremos
Dijo sentenciando la platica a su fin.
El bajo su vista, recogió sus pinturas y se alejó dejando un Grafitti entre las rocas, ella lo vio marcharse, mordió su labio y se guardo un deseo y a lo lejos, en un lugar olvidado, una pagina guardaba su nombre en sangre.
ESTÁS LEYENDO
El Hombre de las Estaciones
PoetryFrases, pensamientos al aire entre cafes y madrugadas en vela. El hombre de las Estaciones será tu guía a travez de los desvaríos de una mente que cambia tanto como estas a través de años... Ó minutos... Todo depende de Vivaldi... (Ilustraciones G...