15 | The New Past I

958 113 22
                                    

❝El Nuevo Pasado I❞

┏━━━━ • ✿ • ━━━━┓
Caos
┗━━━━ • ✿ • ━━━━┛

[N/A: En caso de no recordar lo sucedido en la historia, les recomiendo volver a leer el capitulo 42 de "Infinite", Amelia's Sister y 49, Merlin's Nightmares.]

Todo era un completo caos, no solo por la intromisión de Douxie y sus amigos del siglo XXI, no solo por los nuevos sucesos, y mucho menos por la aparición de Stella en publico, siendo el centro de atención para todo el reino de Camelot; había algo nuevo, 4 entrometidos de los cuales uno de ellos logró redimirse a tiempo, porque si no las consecuencias a pagar serían peores de lo que se podía a preveer.

La Orden Arcana, aquel misterioso grupo de semidioses primordiales, quienes buscaban el equilibrio de la magia y la humanidad, donde el primero era más resaltante.

Hasta que un ser de luz se juntó con un ser oscuro, desequilibrando la balanza del bien y el masl, destruyendo aquel estereotipo de luz con luz y la oscuridad con oscuridad; no iban a intervenir, solo vigilaban con suma cautela en caso de peligro a mayor causa, harían lo necesario para acabar con toda amenaza.

Aquel ser de luz quedó en cinta de unas gemelas, Amelia y Morgana Le Fay.

Dos gemelas, eso sería una amezana. Una de ellas sería la luz y la otra estaba desyinada a ser la oscuridad; ¿Debían dejarlo pasar?

La mujer dueña de la luz se emparejó con quein sería el padre de Arturo Pendragón, creando lazos de magia con un simple mortal cuya moral podía cuestionarse al tener poder sobre mortales más debiles que él.

Debían intervenir.

─━━━━━━⊱✿⊰━━━━━━─

—Cariño mío, ten siempre presente esto.— una niña de 10 años era peinada por una mujer de mediana estatura, que se encontraba algo debil debido a su condición, pero siempre sacaba fuerzas para proteger y amar a sus hijas por igual, pero siendo más seria con Amelia.— 'Ellia, ya no soy eterna.— dijo besando las mejillas regordetas de su pequeña, la que nació primero.— el momento de perecer ha llegado y eres mi niña fuerte que no va aquebrantarse, si lo haces, ellos te atraparán y no tendrás salida.— advirtió tosiendo un poco.

—¿Quiénes, mami?.

—La Orden Arcana.— respondió dejando el cepillo y viendo a su pequeña.— eres fuerte, y quiero que protejas a tus hermanos siempre ¿De acuerdo?, ellos irán primero por ti, siempre han querido ir por ti al ser la más fuerte de la familia.— susurró con cansancio, le quedaba poco tiempo.

La niña miró a su madre temiendo lo peor, comenzabab a ponerse palida y su piel estaba helada, sabía que ya era hora, siempre fue madura y no iba a llorar frente a su madre, siempre se los advirtió, era su castigo por haberse metido con un ser de magia oscura, al nacer ellas dos su energía se iba perdiendo de forma lenta, hasta que una de las hijas tuviese contacto con magia de sombras, hasta ese momento llegaría la vida de su madre.

Morgana comenzaba a practicar aquella magia de sombras a espaldas de ambas, no era su culpa, aquella magia le resultaba tan atrayente comop la abeja a la miel, y al ser descendiente de laguien así, era logico que s conexión sería más fuerte.

—Digan lo que te di-digan.— tosio hasta el punto que sus manos comenzaron a teñirse de rojo, se estaba desangrando.— hagan... lo que hagan...— suspiró.— aleja a Morgana de ellos, no caigas en su manipulación, protege a los seres de piedra... No deben ser vistos ni escuchadps... Perdoname, hija mía.— sollozó.—, ella ya está con ellos, ve y protegela, las am...

Hasta que una luz de color dorado cubrió el cuerpo debil de la mujer, iluminandolo y llevandoselo consigo, quedando solo destellos en el aire.

La madre de ambas hechiceras y del principe de Camelot había muerto.

─━━━━━━⊱✿⊰━━━━━━─

Morgana Le Fay se paseqba por los frondosos bosques de Camelot, quería encontrar un ramo de flores para su madre y buscar algunas fresas para su hermana 7 minutos mayor que ella; estaba dispuesta a disculparse, había hehcho un hechizo de manera prohibida, creando una bestia de tamaño pequeño que solo podía decir "Waka-Chaka", su hermana tuvo que salvarla, raspando ssu rodilals y su madre parecía haberse puesto debil por lo que había hecho.

Sin duda aquellas cosas oscuras le eran atrayentes, y agradecía que Amelia estuviese al pendiente, siempre la salvaba y se echaba la culpa de vez en cuando por sus errores.

Sin duda su hermana mayor era la mejor.

—¿Buscabas esto?.— un ser de apariencia femenina, tamaño pequeño y de piel verduzca se apareció frente a ella, con un ramo de margaritas frescas y de aroma exquisito, las faortitas de su madre.

—'Ellia dice que no debo hablar con extrños.— se apresuró a decir girando sobre sus talones e ir directo al castillo, recordó las palabras que Amelia le decíia todo el tiempo.

—Oye, no soy una extraña.— dijo tomando su mano con delicadeza.—, soy amiga de tu hermana, me llamo Nari.— dijo sonriente, aquella falsa sonrisa que ocultaba sus verdaderas y escalofriantes intenciones.— vivo con los seres de piedra que protegerá cuando sea mayor...— mintió de manera descarada.

—En ese caso, supongo que pudeo hablar contigo.— le sonrió con ingenuidad e inocencia.

—Por supuesto, soy inofeniva.— dijo entregandole el ramo de margaritas.— Justo quería buscarte, te tengo un regalo, Amlia me dijo que te gustan las varas de madera y yo te tengo una especial.

Mentira, Amelia jamás había hablado con ella, es más, siempre estaban en riña; Nari era perteneciente a la Orden Arcana, ella las vigilaba entre las sombras, y ahora que la madre de las hermanas estaba con la que siempre se negaba a darles leltad, podían aprovechar la soledad de la amante de magia de sombras.

Pero, ¿Qué iba a saber Morgana? Nunca los conoció porque Amelia la protegía.

—Ten, con esta vara, puedes hacer lo que quieras... La llamo la vara de las sombras.— la sonrisa falsa llena de amabilidad fue lo suficientemente convincente para la pequeña Morgana.

Mientras ella se acercaba a su nuevo destino, a su nueva vara; su madre comenzaba a perder la batalla, su vida era arrebatada.

La tomó entre sus regordetas manos, mirándola con demasiada atención, se sentía a gusto, con poder; la vara se tornaba de color oscuro conforme iba aumentando su emoción.

—Tus sentimientos serán quienes definan lo que quieres, lo que harás y lo que necesitas.— aclaró.— entre más fuerte, más poderoso.

Con una sonrisa de emoción e inocencia, Morgana apuntó hacia el frente lista para crear cualquier cosa que sus sentimientos desearan, bajo la atenta mirada de Nari quien se sentía una ganadora por el logro obtenido.

Cerró sus ojos y al abrirlos, miró la primera cosa creada por ella misma.

Un portal.

La Orden Arcana había intervenido satisfactoriamente contra las hermanas Le Fay, unos cuantos detalles más y todo saldría como habían planeado.

Habían visto el futuro sin su intervención, y estaban seguros que afectar el pasado era la mejor decisión para mantener el equilibrio y su poder entre la magia asegurada.

3 | Into The Unknown 【Wizards; James Lake Jr.】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora