One-Shots Anime

💫 Izana 1/2 💫

Anime: Akagami no shirayuki–hime

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–Hola izana, te traje el te. –entre a su habitación y coloque la taza sobre una pequeña mesa de centro.

El no me miraba solo se dedicaba a observar por la ventana. Curiosa me acerque también y me pare a un lado de el.

–¿Que ves? –pregunte al notar que no había nada afuera.

–mira atrás de los arbustos. –se dió la vuelta,fue hacia la mesa y agarró la taza que contenía el te.

Fijé mi vista a los arbustos como indico y fue entonces que me di cuenta. Una cabellera roja asomaba entre los arbustos, pero no era exactamente lo que el veía. Si no al chico que acompañaba a esa pelirroja.

–Oh, es esa chica shirayuki, ¿No es así?

Me gire hacia el y coloque mis manos atrás de mi espalda.

–Si, acaso no se da por vencida con mi hermano. –sono molesto. –y ese tonto de zen. –apretó la taza con fuerza y logro estrellarla.

Camine hacia el, le pedí que soltará la taza y mire la palma de su mano.

–Principe, se ah echó daño. –quite pequeños trozos de porcelana que tenía incrustados y los tire al piso. –¿Quiere que llame a esa chica para que lo atienda?

–¡Por supuesto que no! –alejo su mano de mi con brusquedad.

–Pero su mano necesita atención. –intente tomar su mano nuevamente, pero se alejo de mi.

–Atiendeme tu. –fue hacia un sillón y se sentó en el. –prefiero que alguien como tú me toque a qué lo haga esa niña.

–Perdon, ¿Alguien como yo?. –me cruze de brazos y lo mire molesta.

–Si, una simple esclava. –alargo su brazo en espera de que me hiciera cargo de sus heridas.

–Ya veo, después de todo sigo siendo una esclava para usted. –dije antes de dirigírme al baño en búsqueda de un trozo de tela y agua. Después regrese con el.

–Espero que hagas bien tu trabajo. –coloco su codo sobre su pierna y me extendió la palma de su mano.

–No puedo prometer eso, yo solo soy una esclava que no sabe nada de medicina. –mencione.

Metí un trozo de tela en el agua y comencé a limpiar la sangre de su mano. Limpie cada cortada cuidadosamente, después hice algo que el odiaria.

–¿Que haces? –cuestiono al ver qué rasgaba la parte baja de mi vestido. Arrancando una gran tira.

–voy a vendar su mano. –respondi mientras enredaba la tela.

–Ese vestido fue muy costoso. –alejo su mano en cuanto termine de vendarla.

–Odio los vestidos que elijes para mí, no se por que gastas tanto en una esclava como yo. –recogi todo y lo lleve de regreso al baño.

–Tu sabes perfectamente por qué lo hago. –dijo desde su lugar y yo permanecía en el baño escuchando lo que decía. –¿ya olvidaste por qué te saque de ese lugar?

Izana me hizo recordar el día que me saco de un asqueroso lugar donde me vendían a los hombres, solo para pasar el rato.

–No, no se me olvida que pagaste por mi.

Salí del baño a toda prisa sin ver a la cara a izana en ningún momento.

–Tu sabes por qué lo hice____. –se recargo en el respaldo del sillón y estiró sus largas piernas.