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Algunos intentaban no caer en el sueño profundo, y otros no consiguieron quedar despiertos

- ¿Beta? – dice el último hombre que quedaba en pie, pero al segundo su cuerpo fue cayendo. Antes de que se lastimara, lo tomé y lo senté en una silla de escritorio, mientras escuchaba como Nat cerraba las persianas

Ella había tenido la idea de traer un par de guantes para cada una, así nuestras huellas no se quedarían en nada que toquemos

***

Cuando terminamos de revisar los sectores cercanos, vamos al último lugar que nos queda

La zona de los lockers

La comisaría de la manada cuenta con una zona repleta de casilleros, donde todo el personal puede guardar sus cosas, y cada uno tiene la llave del suyo

Al entrar un olor que rápidamente reconocí, llego a mí

- Nat, ese olor es de brujo

- Y no cualquier olor de brujo, sino uno que solo un Alpha, Beta o Delta puede oler

- Hay dos opciones – comento siguiendo el olor – Una es que estemos averiguando lo que ellos quieren que averigüemos – siento como me sigue por atrás – Y la otra es que hayan confiado tanto en que ninguno de esos rangos iba a aparecer por acá, que lo dejaron ahí guardado – tiro con fuerza de la puerta del locker por donde sale el olor, y dentro me encuentro con una mochila, la cual no dudo en revisar. A continuación me encuentro con una bolsita transparente la cual dejaba ver un polvo blanco, idéntico al que vi en la casa de mi prima

- ¿Lo reconociste de algún lado? – pregunta al verme muy concentrada en lo que tenía en mis manos

- Este polvo es el mismo que habí...

- Chicas – susurran exageradamente – Alguien viene, hay que irse

Damos media vuelta encontrándonos con Brooke y Kai. Asentimos y miramos para todos lados, buscando una salida. Al instante veo una ventana, y señalo hacia ella, viendo como los demás asienten. Podíamos salir por ahí, y caer en la parte de atrás de la comisaría

Ellos se adelantan y cuando estoy por seguirlos, veo que la puerta del locker sigue abierta, al igual que la mochila

Eso no puede quedar así

Retrocedo y empiezo a cerrar todos los bolsillos que había abierto anteriormente. Una vez que lo hago empujo la puerta para cerrarla, pero una ráfaga de viento se me adelanta, haciendo que el ruido resuene por todos lados

# ¡Maldita ráfaga de viento! #

Todos se dan vuelta mirándome con reproche, incluso Brooke, que ya está sentada en el marco de la ventana a punto de bajar. Unos segundos después lo hace, seguida de Nat y Kai. En mi caso aprieto más la bolsita que se encuentra en mi mano, y salto desde el marco de la ventana hacia abajo. Cuando aterrizo me tambaleo un poco por solo poder usar una mano, pero la loba de Natalie me ayuda a mantenerme en pie, hasta que cambio a mi forma lobuna, y agarro la bolsita con mi boca. Los cuatro ya convertidos salimos corriendo, y antes de cada uno ir por su lado, Nat me dice que vamos a hablar de esto en la cabaña, mañana a la hora de siempre

Llego a mi casa y me voy a la parte de atrás, tratando de ser sigilosa, como siempre que me toca volver. Antes de saltar a la ventana de mi habitación, veo una sombra que sale de entre medio del bosque

Ese refrescante olor a coco

- Me acordé que me dijiste que para entrar a tu casa dejabas abierta la ventana – dice Samuel – Y yo necesito hablar con vos, así que subí y te bajé ropa – me quedo sorprendida por unos segundos, pero luego lo paso por un lado en dirección hacia el bosque, sintiendo como me sigue

Lobos de MedianocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora