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Sí, definitivamente si me hubieran dicho que a estas alturas del año yo iba a estar encargada de sacar a escondidas los trajes y armas del club, hubiera negado con la cabeza y tratado de decirle de una forma sutil que es imposible.

Con Nat estamos en el sótano del club, tratando de levantar las pesadas armas de la manada, mientras que Brooke solo está llevando los trajes que usamos para la primera vez que un lobo de nuestra manada se transforma, así no tiene que quedar desnudo cuando vuelve a ser humano.

- Si los chicos no llegan a estar en la parte de atrás para llevar las armas, juro que les pienso dar una paliza cuando los vea – declara Nat, al mismo tiempo que arrastra el arco por el piso, sin tener la fuerza suficiente para levantarlo del todo

- Ya te dije que te puedo ayudar a llevarlo – le hago acordar – O Brooke también puede, total, ella está llevando uno por uno los trajes para no tener que llevar lo pesado – las dos giramos la mirada hacia mi mejor amiga, viendo como está a unos cuantos pasos de nosotras, llevando uno de los trajes tranquilamente – Igual yo no puedo decir mucho porque estoy llevando solo las flechas – Nat suspira

- Vení, ayúdame con el arco – asiento y dejo las flechas entre mi brazo y mi cintura, para después levantar la parte del arco que se arrastra por el piso

¿Ya están en la puerta de atrás? – le pregunto mentalmente a mi Mate

Estamos – afirma

Ya vamos para allá

- Los chicos están afuera – le digo a Nat

- Buenísimo, aceleremos el paso – asiento conforme y empezamos a caminar más rápido

- Chicos – llamo su atención cuando los veo de lejos – Ayuden – ellos se acercan y, después de que Samuel me dé un beso en la mejilla, agarran el arco y las flechas, para que nosotras vayamos a buscar las demás cosas

Así estuvimos un rato, lleno de idas y vueltas. Cuando terminamos Nat y yo no podíamos más con nuestras espaldas, cosa que hizo reír a mi mejor amiga y hacer que nos diga que somos unas viejas.

No puedo describir la forma en que me siento cuando pienso que mañana vamos a irrumpir en el territorio de los vampiros, sin permiso y siendo menos que ellos. Samuel y yo vamos a tener que entrar, mientras que Nat y Brooke van a estar del lado derecho del territorio y Kai y Spencer del lado izquierdo, listos para entrar a ayudarnos si lo necesitamos. Decidimos que solo dos entrarían a revisar y escuchar de lo que se habla, porque si vamos todos juntos sería más difícil esconderse y movernos entre las calles y el castillo. Calculamos que nos va a llevar unas dos o tres horas hacer todo si no tenemos inconvenientes. Los caminos ya están decididos y, aunque los vampiros suelen ser más fuertes de noche, el pelaje negro de Samuel y mío nos hace menos evidentes a esas horas, igual que los trajes del mismo color.

Después de bastantes opciones propuestas por todos, decidimos que los trajes los vamos a guardar en el baúl del auto de Kai, mientras que las armas en el baúl de Samuel y en el mío.

*23:58*

Bajo las escaleras los más rápido que puedo y no presto atención a lo demás, cosa que me hizo no darme cuenta que la luz de la cocina está prendida y mi papá está despierto.

- ¿Loana? – pregunta apenas sale de la cocina - ¿A dónde vas tan apurada? – hago varias muecas con la cara mientras pienso, haciendo que su ceño se frunza en confusión

- Voy...a lo de Brooke – sonrío mentalmente por la respuesta - Me invitó de la nada porque...peleó con Kai y está media...

- Entiendo – me interrumpe – Andá, pero mañana volvé rápido así podés venir a buscar tus cosas

Lobos de MedianocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora