TARDE PARA AMAR

Capítulo 8

-Estas mintiendo - susurro - no puedes estar hablando enserio, como te puede gustar ese idiota - negó, su cara en desaprobación lo decía todo, estaba molesto, la sola idea de pensar que Gulf gustaba de Bright le volvía loco.

- Entonces quién me puede gustar ? ¿Usted? - pregunto tan de golpe que Mew, quedó en silencio, no sabía que responder, nisiquiera sabía porque actuaba tan posesiva mente con el chico.

Tal vez por ¿Celos? No, eso no era posible, el no puede estar sintiendo celos de su secretario, eso era tan absurdo como el que Jai quisiera regresar con el. Escucho a Gulf nuevamente y sintió como su corazón palpitaba rápidamente.

- Respóndame, - veía cada expresión de su Jefe, como su cara se tensaba, y hasta podía jurar escuchar los latidos de su corazón, tan rítmicos y violentos. - ¿ porque actúa de esa manera, no lo entiendo - susurro - un día me odia y al otro actúa como un loco celoso que pretende ?

Gulf, quería entenderlo, quería saber que le pasaba, por más que quiso buscar una razón no encontraba ni una sola, incluso pensó, que si era posible entrar en la cabeza del mayor ya lo habría hecho.

- Y-yo no estoy celoso, - gesticulo mientras lo soltaba, y se echaba para atrás - es solo que... - me molesta tanto que estés con ese idiota y simplemente no te quiero cerca de el - No pensé que tuvieras tan mal gusto, solo es eso.

Que le pasaba, porque su mente pensaba otra cosa.

- solo es eso, - susurro - bien, puede porfavor no volver hacer lo de hace un rato - le miró - agarrarme como si fuera un maldito criminal al que usted tiene que requisar - aclaro

- Bien, no volverá a pasar, p-puedes retirarte - hizo un ademán con su mano.

Pensó que si se quedaba más tiempo podría hacer una locura, quería nuevamente acorralar lo y dejarle en claro que solo el podía estar cerca, no entendía esa necesidad de querer tenerlo siempre de besarlo, y tomarlo como suyo, e incluso evitar que otros se le acerquen.

Por suerte la campana, o más bien su amigo lo había salvado.

- Mew quería ... - Oh, Gulf, como has estado - pregunto al ver al nombrado a punto de salir.

- con permiso - hizo una reverencia ignorando la pregunta del mayor

- que le pasa - señalo tras el - porque se veía algo incomodo, ¿que le dijiste está vez? - pregunto entrecerrado los ojos.

- No le hice nada, - le miró- más bien dime qué haces aquí y no estás en tu oficina revisando lo que te envié - soltó, desviando la mirada contraria.

- Ya lo hice, tenemos que ponernos de acuerdo con los inversionistas, y ver que tanto están dispuestos a invertir. - respondió aún mirando seriamente a su amigo.

- Bien, le diré a Kanawut que agende una cita - agarrando el teléfono ....

- Eso puede esperar, - intervino - a lo que vine es porque quería preguntarte... si es posible adelantar la fiesta que organizas cada año, no sé si recuerdes pero... tenemos un viaje para el fin de mes - dijo juntando sus manos sobre el escritorio.

- Mierda lo había olvidado,- llevo una mano a su frente.

- Podríamos verificar la lista de los invitados más cercanos, - se encogió de hombros

- Le diré a Gulf que venga

- ¡Espera! desde cuándo le llamas Gulf? - alzo una ceja- Siempre te referías a él con estupidos apodos o incluso le llamabas por su apellido, como hace un momento.

- da igual como le llamé, Kao, - Rodo sus ojos

- Gu - Kanawut, puedes venir un momento - viendo seriamente a su amigo, quién intentaba ocultar una sonrisa.