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Despues de que Bakugou fuera secuestrado por la liga de villanos, toda la academia esperaba que su actitud cambiara, pero no fue asi, continuo siendo agresivo, grosero y explosivo, tal como el era.

Sus amigos estaba felices de que ser secuestrado no hubiera cambiado su personalidad, pero solo ellos y una persona mas, Todoroki, le agradaba la idea de que el rubio no cambiara por nada.

Pero solo ellos se alegraban, lamayoria de las personad dentro y fuera de la UA lo miraban mal, algunos disimulaban, otros lo miraban decaradamente con odio, el los ignoraba todo el tiempo, no le importaba lo que dijeran.

"¿Es el?, si parece un villano"
"Debió quedarse con la liga"
"Apuesto a que es un traidor"
"Seguramente es un villano infiltrado"
"Con esa actitud jamás será un héroe"
"Deberian expulsarlo, no se comporta como un heroe"
"Si no hubiera dejado que lo secuestraran All might seguiria siendo un heroe"

Esas y mas frases eran las que escuchaba todos los dias en todas partes, en la cafeteria, los baños, la calle, en todos lados, siempre acompañadas de miradas mal disimuladas llenas de desprecio.

Trato de seguir ignorandolas entrenando más duro, funciono bastante bien hasta que un lunes por la mañana escucho a Deku diciendo que pudo haberse defendido de los villanos y despues a Uraraka decir que realmente podria ser un villano, se alejo sin que ambos chicos lo vieran, ese dia llego un poco tarde.

Durante el descanso desapareció del salón antes de que sus amigos se le acercaran, un bicolor que habia notado un comportamiento raro en el rubio se apresuró a buscarlo, lo encontro en la azotea recostado con un brazo sobre los ojos, parecia dormido, se acerco y se agacho viendolo desde arriba.

-¿Que quieres bastardo? - la voz del rubio lo sobresalto ligeramente,pero no dejo de mirarlo.

-Bueno, hoy estuviste un poco raroy queria saber que te pasa - contesto tranquilamente - por cierto ¿como supiste que era yo?

-Primero solo estoy cansado y segundo nadie usa ese perfume que tu usas - contesto el rubio retirando su brazo para verlo a los ojos.

Cuando sus miradas se cruzaron el medio albino no supo que decir, desde cualquier perspectiva el rubio era hermoso a sus ojos, se acerco lentamente al rostro del otro esperando ser empujado o recibir una explosión en la cara, pero no sucedio, cerro los ojos y con delicadeza lo beso, al principio el rubio se quedo quieto, pero despues cerro los ojos correspondiendo el beso, le gustaba ese contacto, aunque no fuera muy cercano al bicolor, habian comenzado a convivir un poco, sabia que le gustaba al bicolor y debía aceptar que desde hace tiempo sentia algo por el.

El medio albino tomo con delicadeza las mejillas del rubio mientras este hacia lo mismo, disfrutando el beso hasta que acabo el descanso, se separaron lentamente jadeando y con un sonrojo en las mejillas.

-Bakugo, lo siento yo no debi hacer.... - comenzo adecir el bicolor pero un rapido beso de parte del otro lo hizo callar

-No tienes que disculparte bastardo, es muy pronto para que seamos algo más, conozcamonos primero - dijo el rubio poniendose de pie extendiendole una mano al otro

-Me encantará conocer mas de ti Bakugo - comento aceptando la mano que el rubio le ofrecía

Regresaron al salon entre platicas sin sdntido, el rubio sintio muchas miradas clavazas en ellos, pero por esa vez las ignoraria, por supuesto toda la clase quedo sorprendida de que ambos llegaran juntos y conversando tranquilamente, pero nadie comento nada.

Asi comenzaron a pasar los dias de esa semana, ambos chicos caminaban juntos hacia el salon de clases y pasaban los descansos juntos, despues de clases pasaban tiempo con sus amigos, los amigos del bicolor le decian constantemente que se alejara del rubio, pues este no le traeria nada bueno, el ignoraba esos comentarios, estaba seguro de que el rubio sentia lo mismo que el, y haria todo lo que pudiera para estar con él.

La depresion de un ángel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora