𝘤𝘩𝘪𝘲𝘶𝘪𝘵𝘪𝘵𝘰𝘴 » 𝘤.𝘳.𝘰 𝘺 𝘤𝘢𝘻𝘻𝘶

catorce.

tomás.
seis años después.

escuchaba la base sonar, mientras que escribía sobre un bloc de notas, tiraba frases por tirar, luego me quedaria con lo mejor escrito.

-che, nene, te vino a visitar sheila.- dijo lucas, abriendo la puerta de mi habitación.

-decile que pase.- pedí.

-dale, ojo, eh, que quiero dormir.

le levanté el dedo del medio.

poco después, la rubia cruzaba la puerta con una sonrisa. -tomi.- dijo alargando la i. -¿cómo estás?- dejó un beso sobre mis labios y se sentó en mi cama.

-hola shei, bien ¿y vos?

-bien, bien ¿cuando tocas?

-eh... en unos días, creo que el viernes.

y estábamos a lunes, la verdad, cada vez me encontraba con menos entusiasmado, osea, me encantaba la adrenalina de los show's y toda la gente saltando por mi, pero eso me hacía buscar su cara entre la gente.

-¿estoy invitada?- alzó las cejas.

-si, sabes que si.- respondí.

-bueno, solamente venía a ver como estabas, tengo que ir a hacer unas fotos a una cantante, no sé.

-¿cómo se llama?

-cazzu.- contestó. -¿la conoces? ella hace trap, tambien.

-si...- suspiré.

-ah, que bueno.- sonrió. -ya me voy.- dejó un beso sobre mi boca y se retiró.

ella no sabia mi historia con julieta, nadie lo sabia, solamente mis amigos, la gente nueva que se unió a mi vida los últimos años yo no les había contado nada sobre mi pasado.

todo fue muy doloroso, alejarme de ella, alejarme de mi hogar.

[flashback]

-no, tomás, no.- dijo julieta, mientras secaba las lágrimas de su rostro. -¡no! ¡¿sabes que?! ¡dejame! ¡terminá conmigo!- gritó, gritó con fuerza; con dolor. -¡dale, cagón, dejame!

-julieta, tenés que entender que no es algo que yo quiero, tengo fe en nosotros, pero vos sos chica y todavía necesitas a tus viejos.

-¿porque? ¡ellos te aman a vos, confian en vos, puedo irme con vos! ya te aburriste de mi ¿no?- comenzó a llorar más fuerte.

-no llores, hey, por favor.

-¿cómo querés que no llore? ¡te vas a ir a otra provincia! ¡me estás dejando sola!- exclamó.

-julieta, no... no lo hagas más difícil.

-¿sabes qué? yo te voy a dejar, no, no voy a dar que vos me dejes a mí, ¡yo te voy a dejar! terminamos, sí, tomás, terminamos.- me empujó y comenzó a golpearme ferozmente, yo la entendía, de un día al otro le estaba diciendo que me iba y la dejaba sola, quien sabe cuanto tiempo.

-por favor, calmate.

-andate acá, tomás, no quiero verte.

[fin del flashback]

y así lo hice, me fui y no la vi desde ese día hace cinco años.

salí de mi habitación, h estaba con sol, su novia.

ella me miró. -¿todo bien?

-bien, bien.- me encogí de hombros. -normal.

[...]

julieta.

-ah amiga, vas a romper todo este viernes.- dijo joaqui, pasando su brazo por mis hombros.

-vamos a romper todo.- corregí.

-si, amor, pero vos más.- dejó un beso en mi cachete. -¿cómo estás vos?

-bien, re ansiosa.- reí.

tocamos la puerta del estudio de la fotógrafa, tenía que hacer propaganda de una marca de ropa.

-hola.- dijo la chica, por lo que sabía se llamaba sheila. -¿todo bien, chicas?

-todo perfecto.- respondí.

-bueno, pónganse cómodas y juli, tenés la ropa en el baño para que te vayas poniendo.

asentí y caminé hasta ahí.

en el pasillo, había una foto de la que suponía era la mano de sheila entrelazada con otra mano tatuada, tatuajes que yo conocía muy bien.

tragué saliva.

me vestí en el baño y salí.

-¿vos conoces a cerreo, no?- me preguntó sheila.

casi me atraganto con mi propia saliva.

y joaqui quedó pálida.

ambas no escuchábamos ese apodo hace mucho.

-eh... sí.

-ah, él es mi novio.- se rió. -eran amigos ustedes ¿no?

si, amigos...

asentí.

-a juli no le gusta a hablar de ese tema.- dijo joaqui. -¿porque no hacemos las fotos y listo?

hablar de él, me había desborotado toda mi estabilidad emocional.