7.- Katharsys - Black Sabbath

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Dirty Human Girl

«Una Lúgubre Novela de Sadomasoquismo»

"Khatarsis — Black Sabbath"

Los días transcurrieron sin más incidentes, la morena había convencido a Amity dejar que ella se encargarse de cortar con Boscha para después anunciar lo suyo y formalizarlo. Desde la primera vez en casa de Amity, Luz se había distanciado no sólo de ella, sino de el grupo en general.

Ni la cercana Willow sabía de bien a bien qué tanto hacía la morena por las tardes, ni tampoco era que importase mucho, seguro que la Dama Búho la mantenía ocupada con mil y un encargos.

Si, seguro aquello era.

Aún así, Amity no podía evitar tener una relación más hosca y tensa con Boscha. La demonio por su parte sentía su territorio amenazado por la pelimenta, no le gustaba nada que aquella chica acosase tanto a su amante.

Más de una ocasión había notado cómo Blight las miraba de lejos mientras se besaban o buscaban algún rincón solitario donde estar a solas.

Si era cierto que Boscha se había vuelto más discreta con sus relaciones más íntimas, sí que no sentía vergüenza alguna por besarla delante de otras personas a la menor provocación, pero delante de Amity era muy incómodo, sentía a Luz revolviendose entre sus brazos evitando sus labios.

Y era por Amity, maldita Amity Blight.

—¿Bueno a tí qué demonios te pasa? –había pasado tiempo desde que Boscha le había hablado así por última vez a la morena. —¿Qué se traen tú y Blight? –su voz era de una furia contenida aunque Luz supo ver bien en Boscha, estaba terriblemente celosa, desesperada y triste.

—Boscha... Yo... –los ojos de Luz se llenaron de miedo. La demonio vió aquel miedo y se sintió terrible, se odió por haber caído en aquello pero... Tenía que saber. Necesitaba saber.

—Sólo dime qué ocurre... –dijo con tono más dulce acomodándole el cabello atrás de la oreja para tranquilizarla.

—No sé qué se trae conmigo, hace días que no deja de... Seguirnos, de... De mirarme... –Luz se ruborizó. —me incomoda como me mira. Me hace sentir... Sucia...

Eso era todo lo que necesitaba saber.

—No le vayas a hacer nada, por favor... Deja que yo me encargue... —le dijo Luz abrazándola tratando de relajarla ya que Boscha estaba lívida temblando de rabia. —No quiero que te ensucies las manos... No quiero que te expulsen... Te necesito a mi lado...

Aquello hizo que los puños de Boscha se relajaran un poco, la morena estaba abrazando a la demonio con dulzura y cariño. Luz necesitaba más tiempo antes de que todo pudiera irse al Demonio como Dios mandaba, y no quería que la descerebrada de Boscha arruinara todo con sus celos estúpidos aunque bien justificados.

—Estás tensa... —comenzó a darle un massàge en los hombros con suavidad, la demonio inclinó el cuello a la izquierda emitiendo tronidos bastante sugerentes.

—Hace días que te echo de menos, cariño... –le murmuró la demonio comenzando a relajarse y a sentir un cosquilleo delicado en su sexo. —te extraño mucho...

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