Capítulo 19

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Luego de unos minutos donde su mente se mantuvo en blanco, Wei Wuxian se levantó y fue hasta detrás del biombo para limpiarse del pecado que acababa de cometer. Una vez que las esencias mezcladas se fueron de su piel, volvió a vestirse con la ropa que tenía guardada en su bolsa qiankun. Meses de lidiar con un adolescente le hizo estar siempre preparado, debía recordar agradecerlo a XuanYu cuando todo esto acabara.

Fue hasta la mesa y se bebió el té relajante, sinceramente lo necesitaba. El ruido sordo en su oído, su corazón acelerado y su cuerpo tensó fue cambiando a medida que la manzanilla recorrió su ser. Y el pastel alimento su vacío estómago, la azúcar parecía endulzar lo amargo de su sentir. Una vez que acabo, trago el nudo de su garganta y salió por la ventana en busca de un fuerte viento que se llevara el olor de sándalo sobre su piel. Fue una suerte que para esa hora no hubiera gente en la calle, así que su soledad logró calmar de una vez por todas esa pesadez en su pecho. Su caminar lo llevo hasta aquella pared, donde una pareja y diversas formas talladas, se encontraban y pasando con delicadeza sus dedos sobre el relieve de estos, el arrepentimiento volvió a llegar hasta él. Mientras pensaba como borrar aquellos dibujos de la pared, sus dedos trazaron inconscientemente el nombre de Lan WangJi hasta que un sonido lo distrajo, volteo a ver en su dirección y se encontró con Wen Ning quien estaba usando un talismán para limpiar la muralla. De pronto lo vio e inclino su cabeza con duda.

― Joven Maestro Wei, ¿qué hace aquí? ―

― Yo... paseaba ¿A-Yu? ―termino por decir luego de un suspiro.

― XuanYu me dijo que iría a la posada y me dio estos talismanes para borrar el tallado que hizo Hanguang-Jun. ¿No lo ha visto? ―

― No. Quizá entro a una habitación directamente ― lo pensó por unos momentos.

Wen Ning lo vio abatido así que se abstuvo de preguntar por el Lan y en su lugar termino por usar los talismanes que el más joven de sus amigos le dio. Por su parte, el nigromante trataba de distraer su mente con un plan para atacar el Templo Guanyin sin que nadie que amaba terminara dañado.

― Ugh... A-Ning, vamos ― se dio media vuelta y comenzó a caminar en dirección a aquel edificio.

― ¿A dónde vamos, Joven Maestro Wei? ― pregunto el cadáver recibiendo un "Al templo" como respuesta.

Debido a que durmió tanto ese día, finalmente no pudieron llevar a cabo el plan inicial de revisar con calma el edificio y destruir la matriz sin llamar mucho la atención. Así que, aprovecharía la hora para evitar el mayor impacto negativo en los demás, si es que hubiera una pelea.

Llegaron pronto, las luces estaban apagadas y las puerta cerradas eran altas, por lo que saltaron por la pared hasta llegar al techo, allí Wuxian notó la existencia de una barrera que evitaba que la luz interior y los sonidos se notaran en el exterior. Dentro, en el patio, había un gran grupo de personas, la mitad eran monjes y la otra mitad eran cultivadores de la secta Jin, todos listos para luchar. Sin embargo, lo que más sorprendió al pelicorto fue la figura blanca en medio de todo ese desorden, Lan Xichen estaba parado allí sin restricciones ni ataduras. Incluso los monjes y cultivadores lo miraban y trataban con respeto. Wei Wuxian supo enseguida que algo iba mal.

― Wen Ning, trae a A-Yu inmediatamente y a... ― se detuvo un momento, sin embargo continuo ― Hanguang-Jun también ― el cadáver asintió y desapareció en la oscuridad de la noche.

El nigromante no vio a Jin GuangYao por ningún lado y tampoco sabia si tenía el sello en sus manos, así que mordió su pulgar y con su sangre convoco a espíritus pequeños y poco detectables para que investigarán sin llamar la atención. Inmediatamente, una joven mujer y un niño transparentes aparecieron frente a él. Hace mucho que no utilizaba el cultivo y a pesar de la limpieza que Xiao Li realizaba en él, su cuerpo seguía lleno de resentimiento, por lo que fue fácil desatarlo. Los espíritus se inclinaron levemente y esperaron órdenes, las cuales fueron dadas de inmediato. Sin demora se desvanecieron en el aire, deslizándose entre las sombras de la noche para no ser vistos.

Bu Wang - Mo Dao Zu ShiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora