CAPÍTULO 9

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Abril 2025

El impacto hizo que Jin cabecera hacia adelante, inmeditamente el guardaespaldas que iba en el asiento del copiloto volteó para ver si se encontraba bien a lo que el idol respondió sólo con un asentimiento de cabeza.

-Es una chica- dijo el conductor del vehículo en el que se transportaba y se notaba la preocupación en la voz.

Jin puso la mano en la manija de la puerta pero su guardaespaldas lo detuvo con un simple – No hace falta, nos encargaremos. Llamaré a alguien del staff para que te saque de aquí – añadió bajando del vehículo.

Chocar no estaba dentro de los planes de nadie, sin embargo había sucedido. Jin estaba de por sí, hecho un manojo de nervios. Después de ese fatídico Julio en 2023 era la primera vez que volvería a verlos a todos. La primera vez que lo volvería a ver a él. Jin no quería pensar mucho en su primer encuentro después de casi dos años. Así que cerró los ojos que se seguían sintiendo pesados por el jet lag.

Habían pasado cinco meses desde que había le habían dado el alta oficial de su servicio militar, y según lo que la agencia le había dicho, se incorporaría al tour mundial en Ciudad de México, mientras tanto debía practicar en Corea para no verse torpe en el escenario. Y para ganar resistencia nuevamente. Y eso había hecho, practicar hasta el cansancio.

El chico de cabello negro volvió a inquietarse, su equipo tardaba demasiado en regresar al vehículo y nadie más llegaba por él. Además el conductor había dicho que el choque era con una chica y los modales que su madre le había inculcado hacia las mujeres le hacían sentir más desesperado por no poder ayudar.

Por más que quisiera retrasar el encuentro con los demás no podía llegar tarde. Faltaba una escasa hora para iniciar el sound check y debía estar ahí, listo. Quería ver nuevamente a Army y hacerlos sentir orgullosos de él tal como habían estado antes de su larga ausencia. Así que decidió bajar del vehículo.

Su cabello era castaño claro, adornado con luces de colores más claros. Tenía la piel tan blanca que parecía leche y los ojos le brillaban como si estuviera reprimiendo las ganas de llorar. Sostenía el celular en unas manos temblorosas. Y al levantar la vista chocó con su mirada.

A Jin le pareció poder ver dentro de sus grandes ojos marrones; ella, más que asustada por el choque le transmitía un desconcierto terrible, como si estuviera sufriendo mucho más allá del daño de lo que un simple accidente de tráfico podía causar. Y quiso acercarse y decirle que lo que fuera que pasaba se arreglaría.

Su guardaespaldas se giró en redondo al advertir su presencia.

-¿Qué pasa? – preguntó en un susurró - ¿Ella está bien? – volvió a inquirir sin apartar los ojos de la pequeña figura nerviosa.

-Lo está ¿por qué bajaste del auto? – le preguntó su asustado y molesto guardia de seguridad.

-Estaban tardando mucho y últimamente no me gusta estar encerrado – respondió con naturalidad dando un paso hacia el conductor que hablaba en un inglés perfecto con la chica.

-¿Estás bien? – le preguntó también en inglés, temiendo estar oxidado en su pronunciación.

La chica usaba mascarilla, porque después de la situación pandémica mundial ya era una costumbre llevarla en lugares concurridos, pero aún así se llevó las manos a la boca y abrió más ese par de ojos cafés.

Eran bonitos, pensó el idol. Hasta ese momento no se había detenido a observar  los ojos de las personas latinas, sabía que eran diferentes a los suyos, pero lo que no sabía es que también podían llegar a ser muy.... cautivadores.

Ready to Let Go | TAEJINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora