×𝑻𝒘𝒐 𝑾𝒆𝒆𝒌𝒔 × /𝐿𝑆/

XIX "Aire"🌀

Maratón - III

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Cortejo - Segunda semana - Miércoles

Se levantó casi saltando de su cama apenas oyó su despertador sonar. Su Lobo chillaba y jadeaba en su interior provocando cosquillas en su vientre, no lo sabe con exactitud, pero juraría que así se siente estár embarazado. No lo admitirá nunca en voz alta ni en frente de alguien, pero es una muy linda y cálida sensación.

Saber que su Alfa vendría por él para el segundo día del cortejo lo hacía sudar y retorcerse de nervios y felicidad, porque sí, nunca había estado tan feliz al lado de algún mundano conocido o cercano.

Harry le había dicho que se ponga ropa cómoda para la cita, así que optó por unos típicos skinny jeans negros, unas van's negras con blanco y una remera suelta azul que hacía resaltar sus ojos y a la hermosa corona de flores que posaba en su cabeza desde el lunes, que fue el día en el que el cortejo comenzó, oficialmente, tendría que llevar esa corona a todos lados a donde él vaya para demostrar que un Alfa, específicamente su Alfa, lo está cotejando. Sería algo así como romper el cortejo pisar o tirar la corona y, como algunos libros aseguraban, el Alfa podría morir de depresión.

Nunca se atrevería a hacerle eso a alguien ni mucho menos a Harry, no se vería capaz de soportar el dolor y el peso de una muerte por haber roto algo tan especial como un Cortejo de lazo.

Louis se había estado animando a salir con camisetas que dejaran a la vista los tatuajes de sus brazos y clavícula. Alguna que otra vez se ganó miradas de sorpresa y reprimendas por algunas señoras, pero poco le importó al ver la sonrisa orgullosa de Harry.

El timbre sonó haciendo que pegue un respingo en su lugar frente al espejo. Suspiró exageradamente y se acomodó un poco el cabello hasta encontrarse un tanto decente para su Alfa. El timbre volvió a sonar y prácticamente bajó corriendo por las escaleras ganándose una riña por parte de su madre, quién se encontraba en la cocina.

Abrió la puerta y su precioso Alfa se encontraba tras ella, vistiendo unos ajustados skinny jeans negros como los suyos - solo que a Louis se le ajustaban en los muslos- una camisa blanca casi trasparente que deja ver los tatuajes en su pecho y abdomen, unas botas negras y su cabello tirado hacia atrás con una bandana azul. Tuvo que parpadear para decirse a si mismo que deje de mirarlo o comenzaría a babear.

-Hola, amor! Esper.. - No pudo terminar ya que el pequeño Omega había atacado sus labios en un necesitado beso. Tardó en responder, pero al final lo sostuvo fuerte por su cintura y movió sus labios al compás de los finitos de su Omega.

-Hola. - Susurró a unos centímetros de su rostro, mantenía sus ojitos cerrados y una boba sonrisa en sus comisuras.

-¿Como estás? - Preguntó el mas alto de la misma manera.

-Muy bien y muy feliz. - Respondió casi chillando como un niño.

-Mmh ¿y se puede saber por qué? - Murmuró mientras posaba su nariz en la fuente de olor del Omega, llenándose de ese aroma a fresas y vainilla fresca para complacer a su Alfa, que ronroneo feliz y jadeó por más.

-Es que... No le vayas a contar a nadie, eh. - Se apresuró en decir siguiéndole el juego al oji verde. Sintió como éste negaba aún en su cuello y siguió hablando. - Bueno... Un Alfa muy, muy bonito me está cortejando. - Dijo en vos baja. Harry lo miró con ambas cejas alzadas.

-¿Y ese Alfa es muy, muy, muy bonito? - Preguntó con fingido enojo. Louis asintió frenéticamente con hombros en alto, mostrándose "firme y serio". - No puede ser. ¿Incluso mas que yo? - Louis dudó, pero volvió a asentir. - Eso es imposible! Nadie es mas bonito que yo! - Se cruzó de brazos y sacó su labio inferior mostrando un pucherito que Louis quiso morder.