Fue difícil encontrarme
cuando te perdí,
te habías llevado
no solo parte de mi alma
sino también
mi manera de reconocerme,
mis ganas de ser feliz.Te permití hacerme de menos
cuando no sabías dónde ir,
con la vida que te había tocado,
pero nunca se te ocurrió
llevarme lejos,
ni hacer de mis sentimientos
una razón para seguir.A la final lo entendí,
lo único que podía hacer
era marcharme,
dejar que te encontraras
y sin importar
que yo me perdiera en el intento
dejarte ir.
Ahora soy feliz.