Pepero Day ¬ NaKook

¬ 15

Sin darse cuenta, en medio de la carrera, ambas llegaron al colegio.

Im terminó perdiendola de vista, y se detuvo a descansar. No por nada Jeongyeon pertenecía al equipo de atletismo del colegio.

Luego se las pagaría, pero ahora, lo único que quería hacer era sacar sus libros del casillero e ir a dormir en el salón durante la clase de química.

El día transcurrió como siempre; dormir en las clases donde los profesores no les prestan atención a sus alumnos -la mayoría-, salir a los recesos, leer en secreto, y repetir todo lo anterior.

Cuando llegó el horario de salida, la castaña se quedó en la entrada del instituto a esperar a la de apellido Yoo.

Repentinamente, oyó murmullos a sus espaldas, más algunas risas.
Probablemente se estaban burlando de ella, como hacían de costumbre, por lo que optó por ignorar aquello.

A lo no muy lejos, pudo ver a la peligris acercarse rodeada de otras dos chicas, mientras venían platicando animadamente entre ellas.

Rodó los ojos, y se volteó para esperarla un poco más lejos de donde estaba, pero al hacerlo, chocó con el cuerpo de alguien, más específicamente, el mismo alguien a quien estuvo intentando evitar todo el día.

— Hola — Dijo él, sonando amable.

— H-hey, hola Jeon — Sonrió nerviosa — ¿Cómo estás, qué haces aquí? — Preguntó.

Rápidamente notó lo que dijo, y ganas de salir corriendo hacia su casa, aparecieron en su sistema.

Jeon arqueo una ceja, y rió ligeramente — Eres muy graciosa, NaYeon — Le dedicó una pequeña sonrisa.

— Lo siento, no soy buena para hablar con las personas — Suspiró, desviando la vista hacia el suelo.

— En realidad eres buena, solo necesitas práctica — Comentó — Por cierto, iba a preguntarte si ya te ibas — Dijo sereno.

— Oh, s-si, lamento si te moleste yo en realidad-

— ¡No quise decir eso! — La interrumpió, notando el fallo en su expresión — Lo siento, quise decir que si ya te ibas a casa, para volver contigo, porque iba a ir a la casa de TaeHyung pero el tonto me dejó diciendo que iba a salir a otro lado entonces tengo que regresar solo y suponiendo que vivimos juntos- ¡no juntos! O sea, que somos vecinos, me refiero a-... — Cerró los ojos con fuerza, y también suspiró. Ya ni sabía que estaba diciendo.

Im rió levemente, ganándose una mirada por parte del coreano. Ella le hizo una seña con la cabeza, apuntando a la calle, e inició a caminar.

Por fuera se mostraba segura, tranquila. Pero por dentro, habían miles de personitas manejando todo para que no meta la pata, y arruine el momento.

— Al parecer no eres la única que no es buena para hablar con las personas — Oyó la voz de Jungkook llegar a su lado.

— Tu eres bueno, solo necesitas práctica — Repitió, guiñandole un ojo, y soltando una risa severamente ligera.

Sintió como el contrario imitó el gesto, y su organismo empezó a revolotear dentro suyo.

Si esto se volvía una costumbre, no iba a poder manejarlo bien.

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Nimin_36