38

2.5K 202 7
                                        

Abrí la puerta, lo primero que había hecho fue tomarlo de su camiseta blanca y traerlo hasta mis labios

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Abrí la puerta, lo primero que había hecho fue tomarlo de su camiseta blanca y traerlo hasta mis labios.

Pude notar que había sido una gran sorpresa para él, que no se lo esperaba, pero no tardó en reaccionar y demostrar que también quería.

Oí cómo cerraba la puerta para después poner el seguro.

Dirigió su mano a mi pierna, hizo que la elevara un poco, lo cual hizo que me acercara más hacia él.

Sentía como la acariciaba, pero  necesitaba más.

Y sé que él se había dado cuenta por el momento tenso.

Me cargó y como pudimos, caminó hasta la cama. Me depositó en ella.

—¿Estás segura? — susurró cerca de mi oído

No quería oír nada más.

Lo tomé de las mejillas y lo acerqué hacia mi. Esa era la respuesta.

—¿Te parece que después me modeles éste lindo vestido? — comentó coqueto

Sentí como llevó sus manos hasta mi espalda y comenzó a bajar el cierre; sonreí un poco.
Hasta que llegó a su punto y poco a poco fui deslizándolo, quedando solamente en ropa interior.

Él sonrió un poco mientras tomaba el vestido para después tirarlo por ahí. Se acercó para después besarme ferozmente.

—Dios...eres preciosa — susurró

Volví a sentir sus calidad manos en mi espalda, en cuestión de minutos, ya no sentía mi sujetador.
Deslizó los tirantes por mis brazos, e hizo la misma acción como lo había hecho con el vestido.

Besó mis labios, después mi mejilla, barbilla, fue hasta mi cuello y después al valle de mis senos

Gemí

—Me encantas

Los volvió a besar para después él quitarse su ropa.
Me mordí levemente el labio.

Acaricié su perfecto abdomen y pecho.

🌹🌹🌹

Tapé mi cara apenada

—Mi cumpleaños fue ayer — sonreí tímidamente

—Lo sé pero te había prometido un pastel de chocolate con mermelada de fresa

Me había despertado y Cillian no estaba en la cama. Había tapado mi cuerpo con una cobija, y miré a la habitación. Algo tenía Cillian con las decoraciones medio antiguas.

Hasta que oí la puerta, obviamente me había asustado hasta que Cillian venía hacia mi con un pastel y el número 23 de velas.

Hizo que pidiera un deseo, lo pensé y después soplé.

—Que todos tus sueños se hagan realidad — sonrió, tomó con dedo la nata del pastel y lo probó — vaya, mi Chef se lució

Sonreí apenada. Aún estaba sin ropa.

—Oh...¿quieres que te preste algo mío?

Peace |Cillian Murphy| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora