The Kyuden Sacre/ Beginnings

¡UN HUMANO EN KYUDEN SACRE!

- ¿¡No crees que te excediste..., Samael!?

- Él..., me pidió que... me tomara en serio... la pelea... y si no lo hacía, sería una ofensa... tanto para él, como para mí.

- Eres alguien particular... ¿Lo sabes, Samael?

- ¿Usted cree?, bueno ahora con su permiso, tengo que ir a ayudar a Damián.

- Sin formalidades, solo dime Rey y yo creo que si...

Samael fue corriendo a ayudar a Damián.

- ¿Estas bien, Damián?

- Algo..., pero por lo menos, no me mataste. ¿Verdad? Hahahaha (nervioso)

- Hahahaha, que exagerado, yo nunca haría eso, además, yo no lastimo a nadie, que no haya hecho algo para merecerlo, bueno... o al menos eso siempre intento.

- ¡HEY! ¡¿USTEDES DOS ESTÁN BIEN?!

- ¡SI, REY!, NO TE PREOCUPES YA VAMOS.

Damián y Samael, regresaron al lugar donde estaban casi todos los estudiantes.

- Bueno chicos, aunque fue corta, tuvimos una increíble pelea de exhibición y ahora toca, la última actividad de nuestra clase, una... ¡BATALLA CAMPAL!, sé que muchos no tienen experiencia peleando así que está será una oportunidad perfecta para ustedes, ah si, antes de que me olvide, Samael no puedes participar.

- ¡Espera, Rey! ¡¿Pero, por qué no puedo participar?!

- Bueno Samael, creí que ya lo sabrías, no creo que tenga que explicarlo. ¿Verdad?, también es tu premio por haber ganado la pelea de exhibición, puedes descansar, irte antes de clase, en sí lo que desees; aunque si mal no recuerdo... ¿Querías ayudar a ese chico verdad?

- Si, gracias Rey.

- Ah y antes que me olvide, llama a esa chica, creo que su nombre era Arel, ella estaba ayudando a Marcus.

- Enseguida Rey.

Samael desapareció del lugar y apareció al frente de Marcus y Arel, apoyándose en sus hombros.

- Hola tortolitos, ¿Cómo están?

- ¡Samael! ¡¿Pero como tú?! ¡Ah!, no importa con tu última pelea, ya ni debería sorprenderme.

- ¡Muy bien Marcus!, ya lo estas entendiendo, además no fue una pelea fue un combate de exhibición.

- Bueno para ser un combate de exhibición..., parecía como si jugaras con él...

- ¿De verdad di esa impresión?, maldición... ah y lo olvidaba, Rey te está llamando y no te preocupes por Marcus, yo lo cuido.

- ¡Yo no me preocupo por él!

- Vi que te sonrojaste...

- ¡No es así!, bueno ya me voy. (se va muy sonrojada)

Arel salió disparada del lugar y llego a adonde estaba Rey y sus demás compañeros.

- Tú chica si que es rápida, querido Marcus; pero bueno espero que no hulla de la boda

- No, no es así, no es mi chica; solo me intentaba ayudar con esto de los poderes, por cierto... ¿Por qué estás aquí y por qué Rey la llamo?

- Primero, porque soy tu mejor amigo; segundo, porque no me dejaron participar...(Deprimido) ah y a ella la llamaron..., porque tenía que participar en la batalla campal ¿Y qué tal si tú también vas?

- Así que una batalla campal..., ni loco voy, ni siquiera puedo liberar bien mis poderes; y ya veo..., porque Rey te dejo fuera, habrías noqueado a todos en dos segundos, ¿Tú quién crees que ganes?