SELFISH FEELINGS ┃𝐇𝐘𝐔𝐍𝐇𝐎

17

Minho ; 21 años
Hyunjin ; 19 años

— ¡Era broma! ¡Minho! ¡Era broma!

El castaño soltó la almohada con la que había estado golpeando al menor, recuperando el aire.

— Estúpido 

El pelinegro lo miró con diversión.

Y la expresión de enojo del mayor se esfumó, llevando su mano a sus labios, huyendo en seguida de ahí.

— Si estás embarazado que quede claro que ese no fui yo —murmuró el pelinegro mientras escuchaba como el mayor vomitaba dentro del baño.

Minho quiso insultarlo, pero el dolor en su garganta lo mantenía más ocupado.

— Voy a matar a Christopher por ofrecerme esa mierda y por dejar que siguiera haciendo estupideces —murmuró poco después Minho sin fuerzas, mientras se dejaba caer y se recargaba en la pared de aquel baño, limpiando sus labios asqueado.

— Él intentó detenerte pero te encaprichaste a seguir tomando —dijo el pelinegro mientras le entregaba un vaso con agua y unas pastillas.— Y como él insistia lo mandaste al carajo y saliste de ahí

Minho lo miró con diversión, el menor sonreía infantilmente mientras le decia lo ultimo.

— Borra esa sonrisa idiota, ¿Fui malo con él?

— Un poco —respondió divertido.

— Y si salí de ahí... ¿Cómo es que terminamos en un motel? —preguntó antes de tomarse las pastillas de un trago.

— Yo te seguí, peleamos por que decías que yo era un amargado de mierda por no dejarte ser libre para hacer más estupideces, una cosa llevó a otra y terminamos entrando aquí —el menor se encogió de hombros.— La casa de Changbin queda como a cinco cuadras

Minho lo miró en silencio.

Su vista fue a su torso expuesto, centrando su atención en el sendero de marcas oscuras desde su cuello hasta sus clavículas.

Suspiró dramáticamente.

— Te voy a demandar por violación

— ¡Que no te hice nada!

— ¡Estamos en un jodido motel!

— ¡Porque tú me arrastraste hasta aquí!

Decir que Minho se encontraba frustrado era poco, se encontraba hecho un desastre mentalmente pero intentaba disimularlo, intentaba recordar aquella noche, pero solo lograba recuperar pequeños fragmentos de lo ocurrido.

Recuerda su garganta ardiendo cada vez más mientras bebía vaso tras vaso de alcohol, también recuerda a Chris, Ryujin y Hyunjin tratando de detenerlo, y recuerda haberlos mandado al carajo.

No recuerda como es que de alguna manera terminó caminando solo por las calles del lujoso barrio de Changbin, pero si tiene vivos recuerdos de la pelea a gritos con Hyunjin cuando este lo encontró.

— ¡Me preocupas maldición!

— ¡Sé cuidarme solo! ¡No necesito que vengas a cuidarme como si aún fuera el chico estúpido que te necesitaba para que no lo humillaran!

— Deja de decir tonterías y vámonos Minho

— No —el chico se dio la vuelta para seguir caminando sin un rumbo en especifico.— ¡Largate maldita sea! —bufó cuando sintió como el pelinegro lo tomaba por el brazo, safandose de este en seguida.— ¡No quiero que estés conmigo!

— ¡¿Por qué no?!

— ¡Porque estoy ebrio, me drogué y ahora estoy lo suficientemente idiota como para saber que si estas cerca de mí haré una tontería!

— ¿Te drogaste, imbecil?

El castaño sonrió inocentemente.

— Fue por una buena causa Jinie

— ¿Cuál? ¿Eh?

El castaño bajó la mirada recordando el trato que habian hecho el rubio y él.

— Por ti —murmuró— Necesitaba confianza, estupidez extra para poder hacer algo, pero ya me arrepentí...

El chico intentó huir un par de veces más, y ambas veces el menor lo detuvo.

— Oh que la chingada —bufó el castaño mirándolo.— ¿Ahora qué?

— No me importa si haces una tontería, no te dejaré ir solo

— Bien, entonces aceleremos esto, si haré estupideces las haré ya

Y solo recuerda haber tomado al chico por el rostro, para estampar sus labios con los contrarios.

— No actúes como la víctima Hwang, por la fuerza yo no podría meterte aquí ni en mil años —volvió a atacar el castaño con diversión, irritando a Hyunjin.

— Te seguí para que no hicieras una estupidez

— Y la estupidez la hiciste tú

— ¡El único que tiene marcas aquí soy yo! ¡¿Sabes lo jodidamente necio que eres?! ¡Tuve que encerrarte para que dejaras de irte encima mío, idiota!

Si bien Hyunjin había tomado lo suficiente como para no estar en sus cinco sentidos, su memoria no había sido afectada como era el caso de Minho. Por lo que él recordaba absolutamente todo.

Recordaba como Minho lo había besado, y como es que despues de ese beso había confesado todo lo que llevaba consigo desde hace un buen tiempo.

— No quiero que todo lo que hemos pasado se vaya a la mierda por intentar ser algo más, no quiero perder a mi mejor amigo, no quiero hacerte daño, no quiero comenzar algo que terminará tarde o temprano —decía el mayor en voz baja, sin atreverse a abrir los ojos y mirar al chico, solo sintiendo la respiración de este gracias a que sus frentes se encontraban juntas.—  Te amo joder pero no quiero perderte

Hyunjin recordaba perfectamente lo que había respondido, y para su suerte, Minho también.

— Cuando tenía dieciséis años, tú me dijiste algo que se convirtió en uno de mis lemas favoritos —susurró el chico mientras una sonrisa se apoderaba de sus labios.— “No dejes que te obliguen a ser algo que no eres por miedo”

Minho abrió los ojos y lo miró atento.

— ¿Vamos a dejar que el miedo nos quite nuestro derecho a ser felices?