Capítulo 26

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Narrador omnisciente:

El vuelo de Ilaria recién había llegado a la ciudad, la chica se sentía cansada, eran al rededor de las 05:00 de la tarde y el viento no hacia más que revolver su cabello. Al salir del aeropuerto la chica pidió un taxi y al este ponerse en marcha volvió a encender su celular topándose con un centenar de mensajes de Ezra por lo que de inmediato le llamó

Inicio de la llamada

—¿¡Cómo pudiste subirte a ese avión sin avisarme!?—Le reprocha de inmediato

—Te llamé mil veces y no me respondiste—Se justifica

—Debiste haberme esperado

—¿Dónde?, ¿En la calle?

—Me tenías muy preocupado, un mensaje de texto no es la forma para avisarme que regresarías a México

—Me disculpo por eso—Responde la chica pidiendo tregua—Ya nada puedo hacer, estoy a punto de llegar a mi casa

—Quiero que regreses a los Ángeles—Le pide serio

—No puedo regresar

—Pues, olvidaste algo importante aquí

—¿Qué cosa?—Pregunta la chica confundida

—A mí—Responde serio

Ilaria se ríe del comentario de Ezra 

—No te abandoné amor, no eres un perrito sin dueño

La chica continua la conversación explicándole lo sucedido, las fotos que Alice había encontrado en el sofá y la discusión con la chica. El taxi se detiene frente a la casa de la chica y esta se despide apresuradamente para entrar

—¡Por dios Ilaria estás aquí!—Le dice su hermano al abrirle la puerta

La chica se ríe de la efusividad de su hermano y rápidamente es abrazada por este

—Te dije que me extrañarías—Le presume Lili

—¿Por qué no nos dijiste que regresarías?, ¿Cuánto tiempo te quedarás?

—Responderte eso es complicado, ¿Y mamá?—Le pregunta al no verle por ningún lado

—Está en el Oxxo, fue por unas cosas, se pondrá muy feliz de verte aquí

Andrés ayudó a Lili a subir sus maletas hasta su habitación y se acostó sobre las sabanas rosas de la chica

—Estamos en el interior, puedes quitarte esos lentes de sol—Bromea el chico

Ilaria irremediablemente se quita los lentes dejando en evidencia sus ojos rojos e hinchados llamando la atención inmediata de su hermano menor

—¿Qué te pasó?—Preguntó preocupado

—Tengo mucho que contarte

La chica se quitó los zapatos y se acostó al lado de su hermano.

—Antes de comenzar, quiero pedirte que no me juzgues y no me interrumpas, porque la historia es larga

—¿A quién asesinaste?

—Nada  más que a mi amistad con Alice—Responde—Me enamoré del padre de mi mejor amiga

—¿¡Tú que cosa!?—Le pregunta sorprendido

Ilaria le contó todo lo sucedido desde que llegó a Los Ángeles, con los ojos llenos de lágrimas le mostró las fotografías

—Deja de llorar que si mi mamá te ve así tendremos que inventar una muy buena historia para ocultar lo que pasó—Le pide—Tienes más lágrimas en los ojos que ojos

El padre de mi mejor amigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora